■~● Capítulo 4 ●~■

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-No entiendo porque fuiste a buscarlo. Yibo, el no te ama. Jamás lo hizo. Ya deja de hacerte daño.

-Cállate y déjame solo Yi Ling. 

-Eres un tonto. La pandilla de Liu te está pisando los talones y solo piensas en ese malagradecido de Xiao Zhan.

-Vete de una vez Li Ying o no respondo. 

-Bien. Me iré y espero que al regresar no estés lamentando lo mismo. Hiciste lo correcto. 

La soledad era algo a lo que sabia acostumbrado de niño Wang Yibo, siempre le gustó si espacio y no era de compartir absolutamente nada. Pero todo cambió cuando una adolescente, se acercó a él y fue presentada como su media hermana. 

Zhao Li Ying era más que una hermana, podría considerarla su madre, puesto que ella hizo más que la biológica. No podría pensar que ella sería su némesis y la causa de su caída dramática en toda su vida.

Quería creer que tenía sus razones, pero por más que las buscaba no las podia hallar y era algo que no podía concebir a la ligera. Debía encontrar un punto medio para todo. 

-Me llamo señor. 

-Necesito que averigües algo. 

-Bien. No hay ninguna problema en ello. 

-Pero debes ser muy discreta. Yi Ling no debe saber nada de esto. 

-Lo entiendo. -sonriendo-. No debe saber que el pequeño león desea cazarla.

-De darse el caso sería desastroso ¿No lo crees Reba? 

-sonriendo-. Caótico y desafortunado. Me retiro. En unos días tendría la información.

-Si se puede en una semana.

-Yo hablaba de tres días. Pero haré lo mejor que pueda. 

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La paranoia no podía con ella, debia mostrarse calmada y sería sino deseaba levantar sospechas. No había dejado ningún testigo o prueba que la involucre. Todo había quedado totalmente limpio. 

-Deja de estar dando vueltas o serás capaz de hacer un hoyo en el piso. 

-No lo entiendes. Si él descubre que fui yo la que hizo todo a sus espaldas es capaz de matarme.

-No lo haria porque sería estúpido quedarse solo con todo esto. Se necesitan ambos para el negocio. 

-No lo entiendes Fong. Él ya no me necesita porque sabe todo. -tomo una copa de vino-. Le enseñe todo lo que debía y lo demás lo aprendió de Ming. 

-Entonces si deberías preocuparte. -tomo su saco-. Iré a jugar un rato. Siéntete en casa. 

LI Ying seguía tensa de solo imaginarse descubierta y de darse el caso, debía jugarse la última carta que tenía. Los daños estaban hechos y era inevitable que las consecuencias la alcanzaran. 

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-¿Qué pasó Meiling? ¿Por que lloras? 

-sollozando-. Se llevaron a mi A Die. Unos hombres de negro se lo llevaron y djieron que si llamamos a la policía lo matarían. 

-¡¿Qué dices?!

-Señorita Xiao. Unos hombres con trajes negros de llevaron al señor, pero reconocí a uno de ellos. 

-Habla Yubin ¿Quién era? 

-Uno de los hombres de confianza del señor Wang. 

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-Xiao Lu ¿Qué haces aquí? 

-No te bastó con todo lo que hiciste. Es que a caso no tienes límites ¡DIME! .-empujándolo con su silla-. 

-¿De qué hablas? -tomando los brazos de la silla-. ¡Cálmate y explícate! 

-Será mejor que digas en donde lo tienes ya avise a las autoridades y ellos vendrán en cualquier momento. -dijo Yubin-. 

-Esperen un momento. -dirigiéndose a Lu-. 

-¿Qué sabes Reba de esto?

-El señor Wang no fue quien secuestro a su hermano señorita Xiaom 

-¿Quién lo hizo entonces?

-mirando a su jefe-. Fue Yi Ling en complicidad con Fong. Ambos sabían que estábamos detrás de ellos. 

-Maldición.

Una llamada hizo eco en el despacho, algo que erizo los pelos de Xiao Lu al saber que podría ser la persona que tenía a su hermano. Pero quien no se encontraba en buenas condiciones tampoco era Yibo. 

-Contesta.-dijo Reba-. 

-Alo.

-¡Yibo! Porfavor... 

-¿Qué estás haciendo Li Ying?

-Dejemos las formas y vayamos al grano. Quiero que deposites xxxx a mi cuenta en una hora y reserves dos pasajes con destino para Argelia

-¿Algo más?

-No. Solo eso por el momento y tampoco intentes rastrearse porque sino se muere. -colgó la llamada-.

-¿Qué te dijo? Respondeme Yibo.

-Quiere dinero A Lu y pasajes para irse del país. 

-Es muy fácil lo que está pidiendo. -miro a su amigo-. Debe haber algo que esta tramando. Ella no se rendiría tan fácil. Yi Ling quiere algo más. 

-¿Qué piensas? .-miraba a Reba con interés-. 

-No debes darle nada hasta saber donde están.

-Estas hablando de la vida de mi hermano y si ustedes no le dan ese dinero, seré yo quien lo haga. -inquirió Lu-. 

-No seas estúpida mujer. Si les das será más fácil que no lo vuelvas a ver a tu hermano. Utiliza tu cabeza. -miro la computadora-. Ella tenía acceso a todo el dinero y es más fácil que lo hubiera sacado ella misma. -mirando a Yibo-. ¿Por qué pediría que se lo des? 

-No tengo idea. No se me ocurre nada. 

-Lo que ella está haciendo es jugar. Le gustan destruir a sus juguetes como suele llamarles. -susurro Yibo-. 

-¿Alguna idea de donde puedan estar? .-preguntó Reba-. 

EquivocaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora