Capítulo 1

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Scott McCall

La escuela estaba siendo tan aburrida, aún si tenía a mis amigos conmigo, había estado mensajeando un poco con Stiles por la mañana, pero luego dejo  de responder. Me preocupaba ya que la mayor parte del tiempo lo pasábamos hablando por mensajes juntos.

–¿Scott qué pasa?– mire a Isaac un poco sobresaltado – lo siento – dijo sonriendo

– Nada, no pasa nada –

– debemos irnos ya sonó el timbre – asiento sorprendido y levantó mis cosas.

Cuando salimos nos encontramos todos en el estacionamiento, Allison estaba junto a Isaac; Liam, Mason, Corey y Hayden estaban riendo de algo; Lydia estaba junto a Kira, los gemelos, Boyd, Erica, Cora y Derek; los dos últimos habían llegado recién para buscar a Erica y Boyd.
Mason ríe fuerte contagiándome un poco, pero algo me distrae completamente, una moto blanca se estaciona, junto al auto de mí mamá —que estaba justo en frente de nosotros —.

Desde que tenía unos 5 años soñaba con tener una moto blanca gigante y la que estaba frente a mí era alucinante, moría de curiosidad por saber quién era el que la conducía – hermosa – dije sin poder evitarlo Aiden se paró junto a mí asintiendo, Ethan se acercó también a nosotros

– ¿Quién es?

– no lo sé, pero quiero ser el– entonces la moto paso a ser segundo plano cuando vi la cara del conductor, estaba sacándose el casco y no hizo mucha falta descubrir quién estaba detrás – no puede ser – escuche a Aiden preguntar algo pero no preste atención, el casco ya estaba apoyado sobre el asiento de la moto y mí chico se giro a mirarme.

Camine hacia él embobado, tenía a mí mejor amigo frente a mí después de 3 años sin vernos – ¡Scott! – grito lanzándose sobre mí

– Stiles, no puedo creerlo – envolví mis brazos en el pegándolo a mí pecho, el hermoso castaño en mis brazos había crecido un poco, pero no tanto como lo había hecho yo, se veía mucho más tierno – te extrañe tanto

yo igual, moría por saber cómo estabas – se separó de mí sonriendo – feliz cumpleaños Scotty – me dijo con los ojos cristalizados, levantó una de sus manos mostrando unas llaves y luego golpeó con sus manos la moto – toda tuya –.

Negué mirándolo y reí encantado – te amo, eres increíble – reí fuerte encantado y tome las llaves de la moto sin poder creerlo .

¿entonces qué? ¿Damos una vuelta?

weretiger - scilesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora