Mi Pequeño Secreto

capítulo 1

Ashely

Toda mi vida escuché historias, y cuento sobre personas que se enamoran en un primer encuentro, que aquello es algo mágico, hermoso. Un sentimiento capaz de hacer que tú corazón vaya a millas por hora. Aquel sentimiento te hace sentir mariposa en el estómago y te hace pensar en esa persona día y noche, ¿Cliché? Cierto, pues así es como la pintan en los libros, en los cuento de hadas.

Pero en mi vida no es todo como lo pintan en los libros. Durante un tiempo sentía miedo y asco conmigo misma, sentía que ya no valía una moneda que estaba sucia, horriblemente me despreciaba a mi misma, adivinen.

¿Por qué?

Por qué un desgraciado robo mi inocencia cuando apenas era una niña. Ese pequeño recuerdo me atormenta cada día de mi vida, ¿saben que es lo peor? que ese pequeño animal vive en mi casa, me acecha cómo un depredador mira a su presa y aunque quiera borrar aquel suceso, el recuerdo se repite otra vez

—¿Que haces en mi cuarto?—pregunto a la persona que está parada al lado de mi cama.

—Vine a jugar un juego pulgarcita—respondió -.¿no quiere jugar?.

—No—respondo—ya déjame en paz —le grite con enojo.

A Pesar de mi súplicas, se me subió encima tocando mis partes íntimas sin ningún pudor y fue así cada noche, tocaba mi cuerpo a su antojo era asqueroso, siempre que terminaba de sus actos me decía:

—Este será nuestro pequeño secreto Pulgarcita—exclamo en un susurro—y no sé lo dirás a nadie o si no ya sabes lo que te espera.

Asiento

—Muy bien-suelta un suspiro— buenas noches pulgarcita y recuerda nuestro secreto —sale de mi habitación.

Esa noche no pude dormir, por miedo a que volviera aparecer. Quise contarle a mi madre pero no podía ya que nadie me creería si contaba lo que me sucedían en esas paredes y tampoco podía ir a la policía, por qué nadie le creería a una niña de apenas 11 años.

Pasaron años y el salió del país por negocios. Sentí un suspiro pero aún así no podía hablar nada de ese suceso, mi vida siguió normal aunque eso aparentaba. Con el tiempo me volví otra persona. No tenía esas ganas de sonreír, tampoco tenía un circulo social con cuál socializar, bueno solo tenía dos amigos maya y máx. Son mis amigos de la infancia, los tengo ahí solo para hacer mis días en la universidad más llevaderos. Aunque siento que una parte de mi los aprecia.

—¿Se puede saber qué es lo que tanto piensas?—me pregunta maya sacándome de mis pensamientos—Ash está muy perdida.

Esa es maya "mi mejor amiga" una chica pelinegra que mide 1.70, con ojos negros y cabello ondulado.

—Bueno... —suelto un suspiro—si, tienes razón perdón, ¿Qué me decías?.

—Te decíamos que habrá una fiesta Idol dentro de dos semanas.

—Y eso que tiene que ver conmigo —respondí secamente.

—Si tiene que ver—habla Max acercándose a nuestro sitio, sentándose frente a maya—tenemos que ir a esa fiesta por qué son de tres no de dos personas.

—Ustedes pueden ir sin mi—rebatí para salir del paso.

—Ash tiene que salir y Divertirte,—reprocha maya—debes cambiar a la Ash malhumorada solo por una vez.

— Y si ella no quiere salir—respondo mirándola a los ojos.

—Bueno—dice al final levantando las manos en señal de rendición—en verdad no te entiendo.

bien algún día lo entenderás

Respondió mi consciencia por mi, ellos no saben lo que me pasó, pero tampoco se los quiero contar. Es un secreto que nadie debería saber.

Suena la campana, me levanto para ir a mi tercera clase del día y la cuál odiare toda mi vida. Por rabillo del ojo veo como me sigue Max y maya, discutiendo por la misma cantaleta otra vez. En verdad ¿no se cansan?.

El tiempo pasó volando, y mi última clase termino temprano. Camino por el pasillo para dirigirme a la salida, pero al llegar me paró en seco y mis alarma se disparan al ver a la persona que me espera en la salida, siento como un nudo se me forma en la garganta y como aquellos recuerdo que me atormentan se hacen presente.

—Hola pulgarcita—¿me extrañaste?

Nota de autora

Disfruten este primer capítulo y espero que le guste tanto como a
mi

darinaD