𝐌𝐀𝐃𝐍𝐄𝐒𝐒; klaus mikaelson.

𝐓𝟑 || 𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟐𝟐.

Alianova se removió en su lugar jadeando de dolor por su herida en su costado, no había sanado de lo más rápido; abrió sus ojos, dándose cuenta que estaba en una habitación en la que nunca había estado antes. Se veía bastante tranquilo, muy amueblada y todo estaba en su lugar.

Intento sentarse para despertar un poco pero el dolor insoportable en su costado dolía como un infierno, y le desesperaba aún más saber que no podía hacer nada para que pudiera sanar.

'Despertaste, finalmente.' Klaus entro a la habitación haciendo que su cuerpo diera un pequeño salto.

'¿Cuánto tiempo he estado dormida?'

'Tres días.' Estaba asombrada pero su cara no mostraba ninguna expresión. 'Ahora que despertaste, pensé que podríamos hablar.' Tomo asiento a la orilla de la cama. 'Dado el hecho de que volviste de la muerte, ¿Qué paso? ¿Cómo es que estas aquí?'

'No lo se.' Dijo, realmente no tenía ni idea. 'Era un lugar bastante solo, hacia frio y estaba todo totalmente negro, era como que solo era yo.' Suspiro profundamente. 'Ahi estaba conmigo, siempre lo estuvo.'

'Kang.'

Ella asintió. 'Intento matarme al instante que me vio, no se realmente como logre pelear de vuelta, esta maldita herida me puso muy débil.'

'¿Sigue vivo?'

Alianova se quedó callada por un tiempo. Recordando cada detalle de lo que paso. 'Aprendió un hechizo, trato de drenar mi magia y simplemente no podía dejar vencerme así de fácil. Fue como Salem todo de vuelta, mi magia me salvo, quemando la mitad de su cuerpo, pero también se rehusaba a morir. Hice lo que alguien amaba hacer.' Klaus frunzo el ceño. 'Arrancar corazones. Y así lo hice, tuve su corazón en mi mano. Es increible como logre todo eso, ni yo creo que pude matarlo finalmente.'

'Esa es mi chica.' Ambos rieron levemente.

'Pueda que vuelva, no lo se.' Su sonrisa se esfumo al instante. '¿Por qué fue tan fácil matarlo ahí? ¿Por qué me tarde tanto en hacerlo cuando estábamos en nuestra realidad actual? Me deshice de él muy fácil, lo que deja muchas dudas.'

'Para mí que estas siendo muy paranoica.' Alianova alzo sus cejas, Klaus era alguien muy paranoico y decirle eso a alguien era irónico. 'Me refiero a que Kang realmente no tenía mucho poder sobre ti, solo descubrió tus debilidades, pero te demostraste como alguien de sangre fuerte, que actúa como que nada le importara y así nadie se aprovecharía de ello. Estarás bien.'

'Hope...' Murmuro. '¿Ella está bien?'

'Volvió a su universo actual, se fue triste y pensó que jamás volvería ver tu cara de nuevo. Si tu vives, ella también.' Le dio una leve sonrisa para no hacerla sentir tan mal. 'Hay una duda que tengo desde que te vi... ¿cómo lograste encontrarme?'

'Llegue a Mystic Falls, me tomo horas llegar ya que mi magia no está funcionando de lo mejor, todo gracias a Kang. Toda la gente del pueblo dijo que ya no estabas, que tu familia se había ido y tu con ellos. Recordé una conversación que tuviste con ellos.' Dejo salir un suspiro. 'Como ibas a volver a New Orleans después que toda esta locura terminara.'

'Ahora que ya has descansado, podríamos ir al balcón y veras que mi cuidad es de las más hermosas. New Orleans es un paraíso.'

Klaus le ofreció su mano y ella la tomo sin problema, con dificultad se puso de pie. Caminaron hacia el balcón de daba una vista perfecta de la cuidad.

Klaus se colocó al lado de ella, Alianova agarrándose del barandal para mantener el equilibrio porque sentía que en cualquier momento caía al suelo. Las luces adornaban la cuidad de manera que la hacía ver impresionante, un clima agradable y la luz de la luna mostrándose de la manera más hermosa.