Capitulo 19 𝓟𝓻𝓸𝓫𝓵𝓮𝓶𝓪𝓼

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Capitulo 19  𝓟𝓻𝓸𝓫𝓵𝓮𝓶𝓪𝓼  (Hielo - Zoé)

Limpié mi boca aún con el corazón apunto de estallar, mire con deteniendo a la chica, después de analizarla por completo entendí que era la chica del apocalipsis, me parecía increíble pero Enrique estaba aquí así que cualquier cosa era posible a estas alturas. Cinco estaba en silencio mirándome impactado por lo que acababa de pasar, se notaba en sus ojos que quería decir algo pero no podía.

-¿Estás bien? -Preguntó Enrique preocupado- 

-Enrique entra, hablamos más tarde ¿Sí? -Dije fingiendo estar tranquila-

Enrique asintió levemente con una sonrisa y se fue sin rechistar.

-¿Quién es ella? -Dijo con una sonrisa refiriéndose a mi- 

Mire a Cinco esperando su respuesta pero sólo se quedó callado mirándonos a ambas hasta que tartamudeo algo.

-Yo... Yo... Emm -Me miró rápidamente y después la miró- Delores, dame unos minutos -Esta asintió con una sonrisa- 

Cinco me tomó del brazo y me alejó unos metros de la puerta del bar donde se encontraba ella-

-Cinco, esto... -Me quedé en silencio y suspiré- Esto es muy extraño. realmente no sé que decir -Reí nerviosa- 

-Yo tampoco -Me soltó y pasó ambas manos por su cabello- Creo que debo arreglar todo este problema.

-Sí, claro -Dije no muy convencida- ¿Nos veremos luego? Sabes donde encontrarme -Fingí una sonrisa- 

-Claro, nos veremos después -Dijo sin importancia- 

Me acerqué a besarlo pero se apartó algo incomodo y me sonrió levemente. 

-Bien, nos vemos. 

Caminé en dirección a mi edifico, sentía mi corazón algo extrañado por la reacción de Cinco por la llegada de esa chica ¿Cambiará las cosas? Bueno, acabamos de "salvar al mundo" por así decirlo, creo que ambos merecemos descansar y seguir con la vida ya que ahora podemos hacerlo. Creo que sólo necesita aclarar las cosas con ella y pasar tiempo a solas.

Llegué al edificio, subí las escaleras y entre a la recepción que estaba vacía pues era algo tarde. Todo estaba cómo antes sólo que recordé que no tenía las llaves encima, suspiré molesta e intenté girar la perilla lo cual extrañamente funcionó pues estaba abierta. Entré y sí, todo estaba igual que antes, no había ningún cambio a excepción de la flor que me dio Cinco la ultima vez que estuvimos aquí, aquella no estaba.
Entré a mi habitación y en la cama estaba mi bolso con mi cartera dentro, mi celular intacto y mi chaqueta negra. Mi cartera tenía todo, dinero, mis tarjetas e incluso mi DNI perfectamente intacta, un escalofrío recorrió mi cuerpo cuando desbloquee mi celular y en este no había nada. 

Entré al baño dispuesta a darme un baño de burbujas, maldición lo necesitaba y necesitaba olvidar todo, olvidar que papá casi me mata y vi a uno de mis hermanos morir por su culpa. Claro ahora estaba vivo, pero ¿Si no? Tantos pensamientos me estaban jodiendo la cabeza y la concentración en que debía hacer algo. 
Estaba en la tina del baño mirando hacia el techo intentando despejar mi mente, sequé mis manos con la toalla que yacía en un pequeño mueble a lado de la tina, tomé mi celular y marqué el numero de Enrique. 

-¿Hola?  -Me quedé en silencio un momento- 

-Hola, Enrique -Este rió levemente- Esto... Fue bastante raro lo de hoy, ¿No?

-Contigo todo puede esperarse -Dijo divertido- Pero, ¿Qué pasa ___? ¿Por qué la seriedad? -Se escuchaba relajado- Nunca me llamas.

-Nada en especial -Reí nerviosa- ¿A qué hora mañana? 

𝒞𝑜𝓂𝓅𝓁𝒾𝒸𝒶𝓉𝑒𝒹 | Cinco Hargreeves y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora