Tu los odias, yo los amo

Molestando A Cale

Era estúpido, esas estúpidas bestias y ese gamberro sinvergüenza no valían su tiempo, no valían tanto como para que un noble como él le diera importancia a algo tan simple como la vida de unos extraños y lo peor era que el encuentro con esos gamberros fue lo mejor de la jodida semana; aunque sea lo distrajeron ese jodido día y lo hicieron mas pasable. Pero nuevamente los problemas lo perseguían hasta las puertas de un bar, ¡esos jodidos bandidos! ¿Quién se creían para robar en su presencia?, no eran nadie, ¡nadie! Y aun así esos estúpidos desafiantes lo miraban como si fuera menos que ellos.

...

Mientras Cale perseguía a los bandidos que se encontro en el bar, los pequeños gatos también se encontraron desgraciadamente con ellos, no estaban seguros si esos bandidos sabían que eran gente bestia pero igualmente los atacaron; estaban lejos de Rock Soo, lejos de su hermano dragón y con secuelas del constante cansancio, gracias a eso les costaba más esquivar los golpes de los bandidos o los objetos que les lanzaban, estaban apunto de liberar sus habilidades y prepararse para enfrentar las consecuencias de ser descubiertos cuando una botella se estrelló cerca de la cabeza de un bandido, de repente una cabellera roja se abalanzó sobre los bandidos que se defendieron con furia antes de darse cuenta a quien golpearon, arrepentidos rápidamente corrieron con la cola entre las patas dejando a cale en el suelo y a los niños en un rincón.

Los niños no se movieron de inmediato y en vez de huir con Rock se acercaron a Cale moviendole la cara hasta que este gruñó y los trató de empujar con la mano, ya más aliviados le mordieron las mangas de la ropa hasta que Cale se levantó de mala gana, se apoyo en la pared e intentó orientarse con el mundo dando vuelta a su alrededor; los niños solo podían mirarlo a su segura distancia hasta estar seguros de que Cale lo seguía hasta los barrios bajos donde se encontraba su casa.

Rascaron la puerta principal esperando a que Rock pronto abriera la puerta esperandolos con los brazos abiertos y el rico aroma de comida recién echa proveniente de la cocina, pero esta vez no los tomo en brazos preguntando por su día, en cambio primero se quedó congelado antes de apoyar a Cale y ayudarlo a entrar mientras les ordenaba ir a comer y avisar al pequeño dragón que comieran antes que él. Sin decir más Rock llevo a Cale hasta un sofá cerca de la entrada que por suerte había limpiado el día anterior y lo recostó con cuidado mientras le levantaba la ropa ignorado con éxito las quejas.

_¿Qué sucedió?_

_... Pregúntale a tus bastardos_

Rock decidió no seguir preguntando y centrarse mejor en curar al gruñón para poder ir rápido a interrogar a los niños.

_Listo_ Cale se intento levantar pero Rock rápidamente lo empujó nuevamente al sofa ganándose una mirada de disgusto que internamente lo divirtió _No te muevas o quedaras peor. Ya mañana puedes irte, ahora recuestate y cuando te sientas mejor ven a cenar._ Rock se fue antes de recibir respuesta pero tampoco la necesitaba, lo que necesitaba ahora era ir a ver a los niños. _hablen_ ordeno en cuanto entró a la cocina y confirmó que los niños habían comido.

_...Unos bandidos empezaron a lanzarnos rocas, también estaban intentando golpearnos cuando Cale apareció y nos salvo_

_¡Yo no los salve!_

_¿Los hirieron?_ preguntó Rock preocupándose por los niños e ignorando al tambaleante Cale que se quejaba desde la puerta de la cocina.

_No, el único que resultó herido fue Cale_

_¡Oigan!_

_Hm, bueno lo que importa es que ahora estan bien_

_Sí_

_Sí, gracias Cale_

_¡Gracias nada!_

_Bien, ven a comer_