Capítulo III

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Me quedé un poco impactada la verdad, no esperaba verlos aquí.

Me acerqué más a la puerta y fue entonces cuando Mark me vio, me sonrió y me saludó y yo lo hice de vuelta.

También me fijé en que Tayler no estaba y eso me tranquilizó.

— Hombre pequitas Ya estàs aquí. —me dijo Jacob, me estaba mirando con una sonrisa que claramente expresaba que quería algo.

— ¿Qué quieres? — le conteste entrecerrando mis ojos de forma acusatòria.

— Que me abras la puerta. — me sonrió como un angelito.

En ese momento me eché a reír, todo su grupo me miró con una cara de diversión, menos Jacob que me miraba un poco mal debido a mi episodio de risa.

— ¿Te has dejado las llaves? — pregunte una vez acabe de reírme de forma divertida.

— Pues sí, algún problema. — me dijo fingiendo indignación.

— Pues sí, deberías ser más responsable. — dije yendo hacia las puertas con las llaves en mi mano — y pensar que eres mi hermanastro mayor... — murmuré, pero creo que me escuchó porque oí risas de parte de su grupo de fondo.

Abrí la puerta rápidamente y la aguante para que Jacob pasara, al ver que no pasaba me quedé esperando.

— ¡Pasa, venga! — dije empezando a irritarme.

— Bueno, es que... te quería avisar de algo. — dijo con malicia.

— Que... — dije entornando los ojos esperando lo peor.

— Resulta que, ya que tenemos casa sola, mis amigos se quedarán por la tarde. — dijo.

— Los padres lo saben? — pregunté aún sabiendo la respuesta.

— No, pero si llaman quiero que te asegures que no se enteran. - me ordenó.

— Y porqué debería hacerlo? — pregunté molesta. Cuando se juntaba con sus amigos se creía superior.

— Porque soy tu hermano mayor. — dijo.

— Hermanastro, no hermano. Y además eso no te hace superior a mi. Te recuerdo que me debes una por colarte el otro día en casa — le dije

— Venga va pequitas, hazme este favor — me dijo.

— ¿Otro más Jacob? Se te van acumulando, por que una cosa te digo, esto te lo voy a cobrar que lo sepas — le dije entrecerrando los ojos en su dirección.

— Está bien, hablaremos de eso luego — me dijo dejando pasar a los chicos.

Le dediqué una sonrisa de superioridad y él puso los ojos en blanco.

Los chicos pasaron y Jacob les hizo lo que él consideraba un house tour como dios manda.

Subí las escaleras detrás de ellos y cuando ellos se quedaron el la planta inferior de la habitación de Jacob y la mía, me adelante y subí hacia mi habitación.

Cerré la puerta detrás de mí, dejé la mochila del instituto a los pies de mi escritorio y me tiré a la cama, ya que al ser el primer día no habían puesto deberes los profesores, y menos mal, por que ahora mismo no me apetecía hacer nada de nada. Conecte los auriculares al móvil, entré a spotify y empecé a reproducir mi playlist mientras cogía el libro que me había empezado, se llamaba "boulevard" y por lo que Mire me había contado al final iba a llorar bastante.

Abrí el libro y empecé a leer.

Pasó una hora o así y madre mía, solo dos palabras; Luke Howland. Ufff, que guapo, ya me he vuelto a enamorar. Si es que es libro que leo, personaje del cual me enamoro.

Simplemente él Donde viven las historias. Descúbrelo ahora