CAPITULO 6

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Despierto antes de que la alarma suene. Estoy algo nerviosa, tomo varias respiraciones antes de levantarme e ir al baño.

El frío me hace temblar, el agua fría estaba perfecta y me despertó por completo pero el frío se quedo en mi piel.

Cuando bajo a la cocina, lista para ir a la escuela, ni siquiera volteo a ver el desayuno, solo me paro frente a la puerta a esperar a que Patrick termine.

-Lin, ¿vas a ir a la escuela hoy? -me pregunta Nick

-Si, - sonrío -el doctor me dio permiso de ir y mamá esta de acuerdo

-Yo ya termine, si quieres yo te llevo.

-Eh... -miro a Patrick y el asiente -Sí, por favor

Al encender el carro, la radio se enciende sola y la música suena por todo el interior. Es una canción lenta, nadie canta, solo es la música. Me quedo mirando por la ventana, ignorando todo menos la vista de lo que dejamos atrás.

La escuela es la misma, con alumnos por todos lados, algunos caminando otros sentados riendo y platicando, o pegados al celular. Sonrío y suelto un suspiro.

-¿Segura que quieres bajar? Por que si quieres puedo dar la vuelta y llevarte a casa.

Me giro para poder verlo a la cara. Su cara es diferente a otras veces, su pelo esta revuelto, se ve cansado, con ojeras, sus ojos ya no son de un verde claro y luminoso ahora se ven mas opacos y reflejan preocupación. Ahora que lo miro de cerca después de una semana me doy cuenta de una cosa, ahora me doy cuenta de que parece un mayor. Y es por mi.

Un peso invisible me abraza el pecho y me empaña los ojos. El me quiere, ellos me quieren y les duele esto, les duele igual o más qué a mi.

Lo abrazo. Lo abrazo tan fuerte como puedo. Agradecida por todo. Y el me devuelve el abrazo. Nos quedamos así hasta que el carro de atrás suena el claxon repetidas veces y la voz del conductor mal diciéndonos nos devuelve al presente. Nos separamos y empezamos a reír.

-Gracias -digo bajando de su carro

-Un placer. Y si te sientes mal, llama a mamá o a papá o a nosotros y vendremos por ti - asiento y cierro la puerta

Bere, Luz y Rous me están esperando en la entrada del salón.

-Hola - las saludo

-Hola

Antes incluso de saber de quién es el hola, tres pares de brazos me rodean y aprietan. A decir verdad, me aprietan un poco demasiado fuerte y hacen que los moretones cobren vida y se hagan presentes, pero no digo nada y espero a que terminen. Contenta por el recibimiento.

-Te apartamos un lugar -dicen antes de apartarse y sonreírme.

Les sonrío y las sigo al salón. Todos me miran cuando entro, agacho la cabeza y camino, no por vergüenza sino para que mi pelo cubra mí cara y esconda los lugares golpeados.

Escucho los susurros, mi nombre no esta pero no es necesario para saber que hablan de mi. Me siento en el último lugar de la última fila. A mi lado esta Bere, frente a ella esta Luz y frente a mi, esta Rous; estoy segura de que ellas lo planearon para que quedáramos así, para que nadie preguntara nada. Y realmente les debo un gracias. Aunque las miradas curiosas no faltan nadie se acerca.

GO: ANTES DE IRME Donde viven las historias. Descúbrelo ahora