Capítulo 34

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Pov Melissa:

Los ultimos tres dias Ginger me a estado evitando. Creanme que quisiera tener una gran maquina del tiempo y regresar en el momento en el que abri mi gran bocota. Tras salir de mi ultima y exhesiva clase de emprendimiento, decidi ir donde el profesor Matthew daba su ultima clase.

Ese hombre me vuelve loca. No se lo habia dicho a Ginger por pena pero, me siento mal ahora por esconder esto.

El profesor Matthew es mi tipo perfecto. Alto, con piel de porcelana, pelo largo y castaño, siempre con su chaqueta de cuero negro, ojos de color verde aceituna que resaltan por su color de piel, manos grandes y firmes, postura concreta y segura de si misma, con su cuerpo bien tonificado, y su sonrisa....

Puede que sea unos años mayor que yo pero, en la vida y en la muerte no hay solucion.

Llegue a su oficina, todos sus aprendices ya estaban saliendo, al aprecer ya se habia terminado su clase. De nuevo me la perdi.

Ya me habia dado por vencida cuando escuche mi nombre.

-¿Señorita Melissa?- hablo la voz gruesa.

Gire de inmediato y ahi estaba. El profesor Matthew parado afuera de su salon.

-De nuevo se perdio la clase- pronuncio apenas el hombre recorriendome con su mirada de erriba a bajo. Este hombre da falsas esperanzas.

-Le pido una disculpa pero se me atravezo la clase de emprendimiento. De verdad me gustaria  seguir aprendiendo del latín pero..

-Le puedo dar una clase especial si gusta. No tengo nada que hacer despues de las clases asi que no es un problema darle toda una clase de nuevo ¿le parece?- respondio con aquella atractiva sonrisa que lo caracterizaba. Cualquiera diria que podria ser un modelo de Calvin Klein.

-¿Encerio? Se lo agradeceria de verdad.

-Bueno, pasemos de una vez al salon antes de que se haga más tarde.

¿Que era esto? ¿El profesor Matthew me estaba ofreciendo una clase a solas? Señor, si llego a pecar no sera culpa mia.

Al entrar pude notar que ya habia guardado practicamente todas sus cosas. Era asombroso que el mismo se haya ofrecido sin ningun esfuerzo mio.

-¿Por dónde iniciamos?- hablo de nuevo aquel hombre que me tenia lca por el.

-Preferiria iniciar por dónde se quedo en esta clase- pronuncie apenas sin mirarlo a los ojos. El profesor Matthew podria tener a todas las profesoras a sus pies, incluyendo alumnas con esos hermosos ojos y atractiva mirada.

-Bien. ¿Se acuerda de la anterior clase?, nos quedamos en la historia del latín- agarro un gis blanco y comenzo a escribir- el latín es una lengua originaria de la Italia central; a medida que fue ampliándose el dominio de la ciudad de Roma, su uso se extendió inicialmente a Italia y luego a todo el Mediterráneo occidental y Europa central. ¿Ya recordo?.

-Si. De echo recuerdo tambien que nos dijo, que debido a la autonomía de cada dialecto como lengua común, se fue eliminando el latín progresivamente y que por el momento el unico lugar donde se sigue utilizando es en Italia o en sí, en el Vaticano.

-Valla, al parecer si prestas atención a mis clases- apenas hizo gesto de sorpresa pero, para mis entrañas que quería sonreir el hombre.

-¿Qué le hace pensar que no lo hago?- arque las cejas y fruncí el ceño. ¿Cómo puede pensar eso?.

-No lo sé, quízas porque la mayoría de las veces te veo mirar la ventana o en veces no me quitas los ojos de encima y sigues todos los movimientos que hago.

Rayos. Este hombre sabe que lo eh estado viendo como boba pero, ¿se fija que tambien en veces miro a la ventana?.

-Claro. Pero cómo es que se da cuenta que estoy mirandolo y que tambien miro a la ventana, ¿acaso le atraigo profesor?- Otra vez yo y mi gran bocota. ¡Por una vez en tu vida dí algo con sentido Melissa McClain!.

-¿Atraerme usted?-pregunta con sarcasmo mientra caminaba en dirección mia- no señorita McClain, no me atrae- siguio caminando hasta estar frente a frente los dos-, la respuesta correcta seria, usted me encanta y me gusta señorita Melissa.

Mi cuerpo quedo inmovil al igual que mis pensamientos. ¡Tenia al hombre de mi vida diciendome que le gusto y le encanto!; las unicas posibilidades de poder hacer un gesto de respuesta se esfumó al abrir mi boca, el profesor Matthew dio el primer paso. El me estaba besando. No podia cerrar los ojos por tal impresión. Senti escalofrios al sentir los labios suaves y calidos del hombre, sus manos pasaron de estar recargados en la mesita a sujetar mi cara.

La única cosa que podia saber por el momento era que, pase lo que pase, no me podria contener a la lujuria de este hombre.

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⏰ Última actualización: Apr 28, 2023 ⏰

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