Capitulo 1

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Llevo ya tres meses viviendo con mi abuela y ha sido un poco complicado pero creo que ahora que acabo de conseguir trabajo me llevaré un poco mejor con ella.

Mi abuela es un poco gruñona, piensa que si estoy aquí es por algún castigo, pero lo que no sabe es que ese castigo fue autoimpuesto, estos tres meses viviendo aquí fueron mi primera prueba, y a duras penas la había pasado, mi abuela y yo habíamos peleado casi todos los días, intentaba no ser grosera con ella, o responder sus ataques hacia mí persona, pero casi siempre lograba hacerme enojar tanto que explotaba, otros días solo la evitaba y me encerraba en mi habitación todo el día. 

-¿y dónde está este nuevo trabajo?-me pregunto desde la cocina. 

-bueno esta frente a la universidad, es en un billar, arriba hay una antro pero yo solo voy a trabajar en el billar-

-bueno ten mucho cuidado entonces, esos lugares no son buenos para una mujer, solo va gente a beber y hacer quién sabe qué otras cosas más. ¿y no podías encontrar un mejor lugar para trabajar?-

Traté, me esforcé mucho en no voltear los ojos y decir algo que provocará una pelea con ella. 

Uno pensaría que lo que dice es por mi bien, pero no era así, ella solo pensaba mal de mí y si no conseguía un trabajo de oficina o era alguien "respetable" entonces no valía nada como persona. 

-en los otros lugares donde solicité, no me hablaron nunca- respire diez veces. no mejor respire veinte veces. 

-ps si no queda de otra, está bien- salió de la cocina con dos platos en cada mano.

Me aproximé hacia ella para ayudarla pero me ignoró y siguió hasta la mesa. 

-mañana empiezo a trabajar, pero tengo que entrar una hora antes para que me expliquen el funcionamiento de todo-

Me dirigí hacia el comedor, porque ya moría de hambre, y mi abuela será lo que quieran pero es una excelente cocinera, hasta unos huevos revueltos le salen exquisitos; ella puso los platos  sobre la mesa y se sentó, yo hice lo mismo y empecé a comer un plato del guiso que había hecho. 

-¿y ya le hablaste a tu mamá para decirle de tu nuevo trabajo?-

-no, pero más tarde le mandó un mensaje-

Mi abuela pone fin a la conversación al encender el televisor y poner una de sus novelas, pasamos la comida en relativo silencio de mi parte, mientras ella me habla de su novela como si yo supiera la trama de ella. 

Más tarde por la noche, ya estaba recostada sobre mi cama, viendo las historias de mis amigas, todas están siguiendo con su vida normal, yo tenía que escapar un tiempo de ahí, sentía que necesitaba alejarme un poco, había hecho algo terrible, y me sentía aún peor porque nadie sabía lo que había hecho, esta era mi oportunidad para aclarar mi mente y reevaluar qué estaba haciendo con mi vida. 

Puse mi alarma a las nueve de la mañana, tendría tiempo de alistarse y llegar a tiempo a mi nuevo empleo, eran ya las diez de la noche y pretendía dormir temprano así que Me levante, me puse un pantalón de pijama, junto con una blusa delgada, apague la luz de mi cuarto y me tape toda, dispuesta a dormir profundamente. 

pero lo que pasó por varias horas fue estar dando vueltas por la cama, pensando en diferentes escenarios sobre el día de mañana y así hasta que dieron las cuatro de la mañana moría de sueño pero con mucho esfuerzo pude dormir unas horas. 

Mi alarma sonó y yo con mucha pereza la apagué, me levanté de la cama como si hubiera dormido ocho horas seguidas, pero no, solo era la energía de algo nuevo, me metí a la ducha y en cuanto sentí el agua caliente, todo el cansancio por no dormir apareció en mis hombros, pero intente darme la ducha lo más rápido posible, lo bueno de este empleo es que puedo ir con jeans y el calzado que quiera, la camiseta del uniforme me la entregaron ahí el día de hoy, así que mientras, optó por una ligera blusa negra y encima me pongo una chamarra de imitación piel negra, Me pongo un poco de delineador, rimel, y un labial neutro, no soy experta en maquillaje pero por lo menos esto lo se hacer.

ArishaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora