Chapter 5

340 32 1
                                    


𝐵𝑜𝑡ℎ 𝑠𝑖𝑑𝑒𝑠

Tosió un poco, y tomó la pastilla junto con el agua, mientras mantenía sus ojos cerrados por el picor que todavía tenía en su garganta. -Si, eso creo. -Abrió sus ojos para ver cómo Stolas le traía un vaso de shot con un contenido verdoso.

-Son hierbas medicinales, puede tener un sabor un tanto fuerte pero quita algunos efectos de la resaca...- Explicó al ver la evidente cara de asco que tenía el imp.

-Tú... ¿Como sab- -Trató de preguntar, hasta que un olor que no había notado antes inundó sus fosas nasales, era su ropa, apestaba a alcohol y ahora, un poco a vómito.- Oh... - Musitó avergonzado, tomándose el shot haciendo pequeñas muecas por el desagradable sabor.

El búho tomó asiento en el suelo junto a él, y ambos se quedaron en silencio.

Se mantuvieron en un silencio incómodo por un rato, ambos mirando para direcciones opuestas, hasta que el príncipe dió el primer paso, mirando hacía el imp.

-Tú... Ahm... -Se acomodó algunas plumas, pasando su mano por su cabeza a modo de regular su nerviosismo. -Quieres... ¿Hablar? - Preguntó una vez más, haciendo que Blitz volteara a verlo. -Uhm- claro que si no quieres esta bien, puedes irte si no te sientes cómodo no tienes porque quedarte s- -Trato de explicar con rapidez, tropezando se un poco en sus palabras hasta que fue interrumpido por el imp.

-Esta bien, esta bien.- Dijo el imp para calmarlo, pues sabía el nivel de nerviososismo que tenía. -¿Prefieres hablar aquí o...? -Estaba dispuesto a empezar, quería deshacerse de ese sinsabor, esa presión en el pecho que sentía cuando estaba con él. Quería deshacerse de todo aquello que le causaba pesar.

-Creo que en mi cuarto estaría mejor. -Dijo y se levantó del lugar, observando como Blitz tomaba un poco del enjuague bucal y pasaba a botarlo en el lavabo.

-Lo siento, es que el olor a vómito es un puto asco. -Soltó sin mas, siguiéndole el paso a Stolas.

El búho tomó asiento en el sofá, el mismo sofá de aquella vez, mientras que el imp copiaba su acción, sentándose frente a el.

-Y... ¿De qué quieres hablar? -Trato de hacerse el desentendido pues sabía perfectamente lo que venía, sabía que iba a ocurrir, sabía que en el momento en que dijera algo todo estaría acabado.

Y el volvería a estar solo.

Esta situación y sentimientos no eran ajenos al príncipe, su corazón latía tan fuertemente que era doloroso, era como puntadas continuas contra su pecho mientras que un nudo se hacía presente en su garganta. Su corazón estaba a la Merced de quien tanto dolor y felicidad le causó, a punto de quebrarse o dejar todo al olvido.

Este era el momento, no había marcha atrás, y ambos estaban conscientes de esto.

-Tú... La noche en la que me dejaste aquí-... -Aclaró su garganta, tratando de que aquél dolor agudo que le provocaba el nudo en su garganta no se interpusiera. -¿Realmente...crees lo que dijiste?- Finalmente lo había hecho, había preguntado lo que lo dejó tantas noches en vela, y por fin, tendría una respuesta.

-¿Lo que dije cuando estaba en la van? -Preguntó el imp, tratando de hacerle entender que no quería hablar, pero claro, el príncipe no estaba lo suficientemente atento para notar esto, y solo asintió cabizbajo, se mordió el labio. Esto era todo, era el final, su corazón le pedía a gritos soltar todo, como si no tuviera control de lo que sentía, 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘴𝘪 𝘯𝘰 𝘧𝘶𝘦𝘳𝘢 𝘢 𝘩𝘢𝘣𝘦𝘳 𝘰𝘵𝘳𝘢 𝘰𝘤𝘢𝘴𝘪𝘰́𝘯.-"Lo hiciste otra vez."- Se dijo a si mismo, nuevamente perdería a alguien más. Pero no, no puede ser él, de todas las personas que lo dejan de lado, no podía ser Stolas. Se negaba a aceptarlo, su mente y su corazón no hacían batalla al sentimiento de vacío que irónicamente llenaba el ambiente. ¿Realmente esto era todo? -Sí. Yo... Lo siento, sé que no es el mejor momento.- Tomó una pequeña pausa, acomodando sus pensamientos para poder endulzar su verdad.- Sé que te estoy dañando, y yo...-Imitó la acción de Stolas, y ahora era él quién estaba mirando hacia el suelo.- Yo lo siento. Perdón. -Fue lo único que se atrevió a decir, ya no podía mirarlo más, ya no quería estar ahí, pero no quería irse sin más. Había algo, una cierta necesidad de quedarse, solo esa vez.

-Perdón.

-No, perdoname a mi... Por todo, yo nunca quise- nunca traté de-... - Pusó sus manos cubriendo su rostro, no quería que el imp viera las lágrimas que ahora no podían dejar de hacerse camino por sus mejillas. Finalmente tenía la verdadera respuesta a su pregunta y en vez de alivio, un gran pesar se posó en su pecho.

Y sin palabras, el imp comprendió que todo era solo un malentendido. Pero ¿Y si no lo era? ¿Y si tan sólo se estaba engañando a si mismo en busca de algún tipo de soporte?

-Ya, Stols... Uh... Ya pasó.- Trató de consolarlo de la mejor manera que podía, acercándose a el y dandole pequeñas palmadas en la espalda. Sus sentimientos eran completamente inestables, pero sabía que la imagen de Stolas llorando le provocaba una dolor inimaginable, quería ayudar pero, ¿Cómo ayudaría si el era el problema?

La causa de todo lo malo que le pasa a la gente que quiere, las malas noticias que reciben, todo era culpa de él, entonces ¿Cómo podría siquiera tener el valor para consolarlo cuando no merecía siquiera estar cerca ahí?

-Perdón...Stolas.- Detuvo su acción, solo para comenzar a acariciar su espalda lentamente como si dijera "Aun sigo aquí, estoy contigo.", arreglando un poco sus plumas en el camino. Miraba hacía el piso como si fuera la cosa más interesante del mundo solo porque no sentía que podía siquiera merecer verlo.

[El búho finalmente retiro sus manos de su cara, secó sus propias lágrimas y dirigió su mirada hacía el más pequeño.

-Blitz... Lo siento tanto.- Dijo el búho, viendo como el imp subía su mirada y pudo notar los cristalizados ojos carmesí que tenía, que parecían haberse negado a llorar. -¿Podrás algún día... Perdonarme? - Preguntó con la voz aún quebradiza por haber llorado.

Y ambos se quedaron en silencio, viendo a los ojos del contrario.

Lo que habían sido minutos se sentían como horas, y ninguno había apartado la mirada, como si trataran de descrifrarse el uno al otro.

Hasta que la tensión fue rota por una leve risa.

-No seas una vieja dramática, Stolas. -Dijo el imp con una débil risa, tratando de darle algún tipo de alivió a la pesadez del cuarto. -Te perdono. -Afirmó, haciendo que una pequeña sonrisa se dibujara en el rostro del príncipe. -Con la condición de que tú... Me perdones, por cada momento que la cague...-Habló con dificultad, tartamudeando levemente.

Hablar sobre el tema de manera vaga era la única manera de que el se atreviera a decir algo, y de alguna manera, haberlo hecho se sentía liberador, se sentía 𝘤𝘰𝘳𝘳𝘦𝘤𝘵𝘰.

Quizás se podría acostumbrar a este sentimiento.

El imp había quedado cabizbajo nuevamente, sin poder mirarlo a los ojos.

...

┇1186 𝘱𝘢𝘭𝘢𝘣𝘳𝘢𝘴.

Once more to hold you ➥StolitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora