Once more to hold you ➥Stolitz

Chapter 9

 TW: Se menciona brevemente el concepto suicidio/no querer estar vivo. Lea con discreción o absténgase de leer.
 
Narrador pov.
 
El imp salió del baño y se dirigió hacia su viejo sofá, se recostó y observó a su alrededor.
 
El techo, sus ventanas, su tele que en ese momento pasaba repeticiones de series más viejas que su existencia, la lampara, sus paredes, y el techo una vez más.
 
Una pregunta se asomó por la mente vacía de Blitz.
 
"¿Es esto todo?"
 
Levantó sus manos, observo sus palmas, movió sus dedos en el aire y volvió a recostar sus manos en su estómago.
 
Sabía lo que pasaba cuando estaba completamente solo, sabía que este sentimiento siempre volvería, pero no sabía exactamente el porqué.
 
Todo se sentía irreal, abrumador, era demasiado.
 
Todo se sentía demasiado.
 
Tomó su móvil en mano, entró a su galería, como siempre hacía cuando sentía ese inexplicable vacío.
 
|Demasiado.|
 
Observó las fotos una por una, viendo los pequeños momentos donde se veía feliz, fotos de Stolas, Verosika, Fizzarolli, su hija, sus amigos, su hermana... su madre. Todas las personas que el apreciaba, y otras que no tanto, pero, todas esas personas tenían algo en común.
 
|Demasiado.|
 
Él las había alejado, y las pocas personas que estaban a su lado estaba seguro de que tarde o temprano lo harían también.
 
Después de todo, era su culpa.
 
|Demasiado.|
 
Cerró los ojos y apagó su móvil, no quería pensar en eso de nuevo.
 
No quería ser recordado de lo que pasaría inevitablemente, si era posible, no tener que abrir sus ojos una vez más, no quería que otro día empezara nuevamente.
 
No es que quisiera morir, simplemente no quería continuar. Sí esto era lo que sería día a día, no valía la pena para él. No valía la pena tener que sentirse así si nada iba a cambiar al final.
 
Una llamada hizo que su móvil vibrara en sus manos, acepto la llamada y forzosamente, habló.
 
- ¿Sí? – Esperó a la respuesta al otro lado de la línea.
 
-¡Blitzy!– Dijo el búho.
 
-Corta el royo, Stolas, ¿Qué necesitas? -Respondió cortante, aunque en cierta forma, le alegraba que fuera Stolas quién llamaba.
 
-Oh... Lo siento si llamé en un momento inoportuno, pero es que acabo de notar que dejaste el Grimoire en mi habitación... -Explicó brevemente, no quería importunar más al imp con su llamada inesperada.
 
- ¿Qué? –Se preguntó a si mismo, buscando en su mochila de materiales el Grimoire, el cual no encontró.
 
-Eh, sí. Creo que andabas muy apurado y lo olvidaste. -Su voz sonaba cada vez más desanimada. Genial, el imp lo había vuelto a hacer.
 
-Ugh, puta madre. – Se quejó hablando solo, poniendo una mano en su rostro. Seguía jodiendo todo lo que hacía.
 
- ¿Quieres que te lo lleve...? -Preguntó el príncipe a través de la línea, sonando inseguro.
 
-Sí, seguro, como sea. -Cerró su mochila nuevamente, mirando ahora el suelo.
 
- ¡Bien! ¿En tu oficina en veinte? – Su cambio de tono repentino le recordaba lo emocionado que se ponía cada vez que era algo relacionado con él.
 
"¿Por qué?"
 
-Bien por mí. – Y cortó la llamada antes de que el búho pudiera responder algo.
 
¿Por qué siquiera se molestaba en ir?
 
¿Por qué se emocionaba cada vez que podía ver al imp?
 
"¿Por qué te conformas conmigo?"
 
Esos pensamientos causaron que sus ojos se cristalizaran por un breve momento.
 
Él sabía por qué.
Pero no podía aceptarlo, no quería y no podía entender.
¿Por qué alguien como él... y alguien como yo?
 
Aclaró su garganta y se vistió nuevamente, subió a la van y fue a la dirección de su empresa.
 
Llegó en menos de quince minutos, y fue al baño. Limpió su rostro con agua, disfrutando del contraste entre la fría corriente de agua y su cálida piel, sumergiéndose en el sentimiento de relajación que le producía por unos segundos.
 
𝐵𝑜𝑡ℎ 𝑠𝑖𝑑𝑒𝑠
 
El príncipe entró por la puerta principal, buscando a la hija del imp y sus empleados con la mirada, resultando en confusión al notar lo callado que estaba todo.
 
- ¿Blitz? -Preguntó al vacío y nadie respondió.
 
Se adentró un poco más, dirigiéndose a la oficina Blitz, entrando a ella y cerrando la puerta detrás suyo.
 
Tarareo una melodía desconocida, mientras se sentaba en el pequeño sofá de la oficina del imp, notando una foto tirada a un costado, era él y su hija, lo pudo reconocer por sus cuernos, pues su cara y cuerpo estaban rayados por un tipo de plumón negro.
 
La puerta se abrió sin aviso, haciendo que el búho casi se le caiga la foto.
 
-Bien, ya est-... - El imp observó al príncipe hasta que noto lo que tenía en sus manos. - ¿Qué carajos haces con eso? -Se acercó hacia él rápidamente, casi arrancándole la foto de sus manos.
 
-Lo siento, es que la encontré tir-
 
-Está bien, solo dame el libro. -Dijo, cortando al búho y dejando la foto en su escritorio.
 
-Blitz... ¿Está todo bien? -Preguntó. Y esa simple pregunta sonó ofensiva hacia el imp.
 
-Claro que lo está, Stolas, ¿De qué hablas? – Respondió, dándole la espalda al príncipe.
 
-Sí... Lo s-... -Stolas trató de disculparse, más detuvo sus propias palabras. - ¿Qué estoy-...? No. -Y se levantó del sofá.
 
- ¿Qué? –Se dio la vuelta, mirando al príncipe de manera directa.
 
-¡No voy a pedir perdón cada vez que actúes de esta manera sin siquiera darme una respuesta! -Colocó sus manos a cada lado de su propia cintura, mirando al imp con un enojo justificable.
 
- ¿Perdona? -Solo había visto al búho enojado dos veces, pero esta vez algo era diferente. Se sentía diferente. -Stolas, ¿Qué quieres ahora? -Suspiro exhausto, estaba en su punto límite.
 
- Respuestas. No quiero que te quedes callado como siempre. -Soltó su silueta, suspirando pesado. - ¿Es mucho pedir que por lo menos respondas... esta vez?
 
𝐵𝑙𝑖𝑡𝑧 𝑠𝑖𝑑𝑒
 
"No puedo, no entiendes lo que estás pidiendo. Por favor...
No lo hagas más."
 
-... -Le regaló un silencio continuo, ese silencio que siempre resultaba agonizante.
 
El príncipe acercó su mano al rostro contrario, alejándose antes de siquiera rozarlo.
 
"Lo siento."
 
- ¿Sabes...? – "Por favor." – A veces tus sentimientos no son los únicos que importan. – "Perdóname." Y se enderezó, entregándole el Grimoire y acomodando su capa para luego salir sin ver una vez más al imp.
 
"La cague. Esta vez si la cague."
 
...

𝐵𝑙𝑖𝑡𝑧 𝑠𝑖𝑑𝑒 / 𝐵𝑜𝑡ℎ 𝑠𝑖𝑑𝑒𝑠
 
Más de la mitad de un mes paso, más de 3 semanas sin recibir ningún mensaje de Stolas, ni siquiera preguntando sobre su libro. Ya no quedaba nada de tiempo para la luna llena, pues sería el día siguiente.
 
El imp se encontraba en su oficina, contando el dinero producto de su más reciente trabajo, contando los billetes para distraer su mente de pensar realmente en lo que estaba sucediendo a su alrededor.
 
- ¿Blitz?
 
- ¡Blitz! – La imp de pequeña estatura llamó a por él una segunda vez, devolviendo sus pies a la tierra.
 
- ¿Qué pasa, Mills? -Dejó el dinero a un lado, dándole toda su atención a ella.
 
-Andas un ido últimamente, ¿Qué pasa por esa cabezota? -Preguntó, sentándose en su escritorio, con una sonrisa empática en ella.
 
-No es nada, no te preocupes. -Dijo el imp, acomodando su chaqueta.
 
-Vaaamos, jefe. Nos conocemos de años, anda preocupado, ¿O no? -Balanceó sus pies mientras hablaba, viendo al imp más alto.
 
-Millie, ya dije que todo estaba bien. -Respondió sin ganas.
 
-Uff, hace buen tiempo no me llamabas por mi nombre, esto es serio ¿no? -Mencionó, invadiendo los límites de su jefe.
 
-Millie, dije ya basta. -Miro hacía la pequeña, notando como su expresión cambiaba.
 
-Oh, lo siento, jefe. -Rascó su nuca, bajándose de su escritorio. -Recuerda que siempre puedes hablar conmigo. -Sonrió una última vez antes de salir y cerrar la puerta una vez más.
 
El imp sostuvo su rostro entre sus manos, no tenía la intención de tratarla así. Estaba tratando de evitar decir lo que pasaba por su mente, de no soltar más palabras erradas y de controlar sus acciones, más nada parecía funcionar.
 
Una y otra vez, volvía a joderla.
 
-Señor.
 
Una voz hizo que subiera su mirada, viendo al imp de cabellos blancos frente a él.
 
-¿Sí? -Preguntó, mirándolo.
 
-Eh... yo y Millie tenemos una cita en una hora, y quería preguntar si podríamos cortar el tiempo laburab- -Trató de explicar, siendo cortado por el imp casi de inmediato.
 
-Sí querías salir temprano podías decirlo en vez de sacar palabras del diccionario que traes atorado en el culo. -Dijo, tratando de sacar la sonrisa egocéntrica que siempre dejaba al hablar con él. -Claro que pueden irse, ya váyanse. -Se estiró en su escritorio, acomodando unos lápices.
 
-¡Gracias! -Respondió, saliendo y cerrando la puerta casi de inmediato.
 
El imp abrió su caja fuerte, sacando el Grimoire. Observó la portada, pasando su mano por el tallado dorado en él.
 
-Oye, Blit- -La hija del imp abrió la puerta con su pie, mirando el móvil mientras entraba.
 
- ¡CARAJO! -Saltó en su lugar, cayendo con el Grimoire encima. -Ay, mierda... -Se levantó, mirando a su hija, que lo miraba con confusión. -Perdón, cariño. ¿Qué ocurre?
 
-Euh... Voy a salir con unos amigos, no me esperes despierto. -Miró a su padre una vez más, alzando sus hombros y saliendo del lugar.
 
-Eh, ah- ¡CUIDATE, LOONEY! -Trató de despedirse, viendo apenas la cola de la hellhound al salir.
 
Levantó el Grimoire, colocándolo sobre su escritorio nuevamente, cogiendo su móvil del bolsillo, escribió rápidamente, mandando los mensajes antes de poder arrepentirse.
 
Sabía todo lo que podía ir mal, pero ¿Acaso no vale la pena arriesgarse? ¿No podía siquiera intentar?
 
...
 
"Stolas"
"Puedo ir hoy día?"
 
Visto.
 
 ┇1597 𝘗𝘢𝘭𝘢𝘣𝘳𝘢𝘴.

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¡Nota del editor!
 
 -Realmente espero que estén disfrutando de esto tanto como yo disfruto de escribirlo. ^^ ♡