Una Historia en Westeros - Cregan de la Casa Stark, el Lobo Negro

VIII - Vuelta a casa, tiempo de sanar y de crecer más.

Desde los altos muros de madera y piedra del Fuerte Skagos cientos de flechas, jabalinas y piedras fueron soltadas a la orden de Frigga para surcar el cielo de la mañana como una gran bandada de aves mortales que cayeron en picada contra los miles de piratas que corrían desbocados, desesperados y en busca de sangre contra los muros del fuerte, las flechas penetraron en su carne con facilidad acabando con la vida de cientos, las jabalinas atravesaron a muchos y las piedras rompieron los cráneos de muchos más, unos pocos se salvaron por llevar escudos sobre ellos u mejores armaduras pero no se salvarían para siempre en esta batalla. 

Los piratas siguieron avanzando hasta los altos muros solo para caer ante la fosa que había sido agrandada y profundizada cada pocos días desde el alzamiento del Fuerte Skagos, los hombres cayeron en los pinchos cubiertos en mierda y orinas, por si tuvieran la suerte de ser salvados sus heridas sean infectadas con la mierda y se enfermen para después morir en agonía. 

Aquellos que lograron pasar entre los pinchos y llegar a la muralla empezaron a subir de forma desesperada por las escalas que habían traído para este asedio y eran las únicas que podían traer. Mientras subían fueron victimas de flechas y otras armas como lanzas, espadas y hachas de los defensores que los esperaban en la cima de los muros no queriendo que llegaran a entrar en le Fuerte. 

Un suertudo pirata que llevaba un escudo y una espada logro llegar a la cima de la escala y cuando puso su mano en el muro del Fuerte sus ojos vieron como una maza volaba hacia el y después oscuridad, apenas segundos después su cuerpo fue lanzado devuelta hacia los piratas tirando a otros dos que estaban siguiendo al primero en la escala, la cual fue derribada de la muralla por las manos de Maege Mormont siendo acompañada por varios hombres de armas de Mormont quienes volvieron a la lucha. 

En otra parte del muro ocurría lo mismo, los piratas desesperados subían las escalas en busca de sangre y fueron recibidos por acero y muerte. Fue allí donde Arthur golpeo a un pirata con el borde de su escudo en la cara rompiendo su nariz haciendo que sangre saliera a borbotones para momentos después clavar su espada en su cuello acabando con la vida del pirata. 

Cuando pateo al pirata devuelta a los suyos para recuperar su espada fue alcanzado por una flecha lanzada por los pocos arqueros piratas que aun habían. El golpe llego en su hombro derecho y logro pasar por su armadura clavándose en su carne haciendo que diera un paso atrás y levantara su escudo cubriéndose de dos flechas más que se clavaron en su escudo, aguantando el dolor, sabiendo que era solo algo superficial y sin darle el gusto a los piratas de retroceder, Arthur rompió el eje de la flecha con su mano izquierda, volvió a pararse en toda su altura y siguió blandiendo su espada contra los asaltantes, esta vez tomando la cabeza de un desprevenido pirata que apenas había asomado su cabeza por la muralla. 

Fuera de los muros del Fuerte Skagos, los piratas iban llegando poco a poco en forma desordenada con ansias de pelea y saqueo que les habían prometido junto a sus capitanes en un ultimo esfuerzo por la victoria. Todo el movimiento de un grupo se detuvo de momento cuando una lanza voló y se clavo en uno de los capitanes piratas que cayo al suelo ya muerto, la conmoción duro unos segundos cuando se escucharon gritos de guerra llegar desde donde vino la lanza. Cientos de guerreros Norteños con el emblema de la casa Stark, Cerwyn y Forrester junto a los Legionarios eran lideraros por el mismo Cregan Stark quien blandía su hacha y tomaba la cabeza de un pirata que no reacciono a tiempo desde una pequeña colina en la cual no había nada unos momentos antes. 

Mientras las fuerzas Norteñas chocaban por el flanco derecho otra fuerza lideraba por Mors Umber junto a los hombres de su casa y otros atacaba el flanco izquierdo con una fuerza abrumadora pasando por los piratas como una espada ante una hoja de pergamino.