X - El torneo donde las sonrisas cayeron

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Torneo en Harrenhal - Tierra de los Ríos - Un año para la Rebelión 

Harrenhal, el castillo más grande de Westeros, con murallas tan altas y gruesas que era casi imposible tirarlas abajo con artillería convencional, torres tan altas que casi tocaban las nubes y salones donde podían estar fácilmente miles de persona...

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Harrenhal, el castillo más grande de Westeros, con murallas tan altas y gruesas que era casi imposible tirarlas abajo con artillería convencional, torres tan altas que casi tocaban las nubes y salones donde podían estar fácilmente miles de personas sin llegar a llenarse del todo.  

Este terrible castillo se levanto gracias al sacrificio de cientos de esclavos, cuyos cuerpos, almas y sangre se usaron para el mortero que unía las piedras de la fortaleza. Todo bajo el mando de la antigua casa Hoare, quienes antaño gobernaban sobre las tierras de los Ríos, el mar del Oeste y parte de las tierras de la Corona. Hasta que los Targaryen cayeron sobre ellos. 

Ahora, cientos de años después de la conquista, las ruinas de Harrenhal aun se usaban como asiento de casas nobles, como la casa Whent, quienes estaban organizando un gran torneo en nombre del Principe Viserys Targaryen, donde se invitaron a todos los grandes señores para participar y ver, junto a la presencia del Príncipe Rhaegar Targaryen y su esposa, Elia Martel. 

Cientos de tiendas rodeaban a la imponente fortificación, donde cientos de personas hacían sus preparativos para el torneo, vendedores y comerciantes dejaban ver sus mejores productos, herreros trabajaban dando los últimos toques a las armaduras y armas de quienes participarían en el torneo. La gente pequeña andaba por todas partes disfrutando de los diferentes lugares donde se podían divertir, la cerveza fluía como el agua, la comida sazonada se podía oler por todas partes y las damas de compañía hacían guiños a los caballeros en busca de un buen premio. 

De vuelta a las murallas de la fortaleza, donde diferentes hombres de la casa Whent y Targaryen hacían guardia constante, se podía ver a un hombre que estaba fuera del lugar. 

Un hombre joven vestido con cuero y ropas grises con un Direwolf estampado en su pecho, de cabellos oscuros y cara alargada junto a unos ojos oscuros que miraban atentamente el Camino del Rey en dirección al Norte, a su hogar y a su familia. El hombre era Eddard Stark o Ned, para los más cercanos. 

El joven Ned estaba de igual forma, feliz y preocupado. Feliz, porque podría volver a ver a parte de su familia después de haber estado creciendo y entrenando en el Valle ante la atenta guía de Lord Jon Arryn y también preocupado por todo lo que había escuchado desde hace varias lunas, rumores que lo tenían con muchas dudas. 

Cuando le avisaron que los caníbales de Skagos y los piratas de las Tres Hermanas decidieron atacar al Norte, Ned había suplicado a Lord Jon que lo dejara partir y unirse a su familia para dar justicia a quienes atacaron cobardemente a sus tierras, pero Lord Arryn se había negado, diciendo que no estaba listo y que el rey ya había mandado la orden de que el Norte reúna a sus fuerzas y tome las islas. 

Otra de las noticias que le tomo por sorpresa era el enterarse que su sobrino, Cregan, había sido elegido para atacar a Skagos, donde tomo la isla y destruyo a todos los caníbales y piratas que la habitaban. Su sobrino, quien aun no era mayor de edad, ya había liderado a hombres a la batalla y si los rumores que había oído junto a lo dicho por Lord Arryn, le fue sorprendentemente bien, haciendo que su nombre empezara a ser escuchado en diferentes partes. 

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⏰ Última actualización: Jun 18 ⏰

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Una Historia en Westeros - Cregan de la Casa Stark, el Lobo NegroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora