"14 de febrero"

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Los catorces de febrero se pueden describir como rosas que florecen en el amanecer de la primavera más cercana. Es el día en el que se descubren los sentimientos más recónditos y en el que el Sol no experimenta el ocaso.
Día del amor, en el que la vida se desborda de corazones y luces de colores para colorear el espíritu de quién lo festeja, formando un arcoíris de sutil belleza que adorna el cielo de la alegría. Constituyendo así, la felicidad en su máxima expresión, pues dicen que todo lo puede el amor, cuando se tiene la suficiente valentía, para dibujar en el atardecer de la agonía, un amanecer lleno de pasión.
Día de la amistad, en el que abrazas con fuerza a ese amigo que siempre ha estado contigo sin importar el caos que emanas mientras juegas a la ruleta rusa, en busca de nuevas aventuras e historias para contar. Ese amigo que se aferró a tu vida como si fuera suya y te enseñó a dar pasos firmes entre la tormenta. Por ese que eres capaz de darlo todo para que nunca te falte, y siga formando parte de tus momentos de felicidad.
Catorce de febrero, día que a pesar de ser efímero, cuenta con las suficientes horas para hacernos sonreír, y así entender que para ser feliz solo se necesita estar bien acompañado, pues más vale amar y ser amado por las personas correctas que solo vivir de las apariencias y con diamantes en las manos.

Poemas de Una Noche de LluviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora