UnLUCKY BOY [JaeDo]

CAPÍTULO 2

¿Qué le sucedía a ese chico? ¿Qué razón tenía para decirle aquello?

—Seamos amigos —le tendió su mano cuando ya volvía a estar a una distancia aceptable. No entendía a ese chico— ¿DoYoung? —llamó l ver que el chico no tomaba su mano.

—¿Eh? Ah, sí. Será un gusto trabajar junto a usted, Jeong-ssi—cogió l mano y percibió que el apretón fue un poco fuerte, no podría llamarse un apretón de manos amitoso.

—Puedes llamarme JaeHyun, seamos cercanos.

—Bien, espero buenas noticias de ti estos días DoYoung. Ya puedes dirigirte a tu supervisor. JaeHyun tú te quedas—añadió cuando DoYoung se dirigía a la puerta.

  Una vez fuera de la oficina, DoYoung se preguntaba si escuchó mal lo que le susurró su ahora compañero. Debía ser eso, sí, su subconsciente le había jugado una pasada.

—Parece que nuestro vicepresidente no es un amargado como dice la prensa. No decepcionaré su confianza.

  Su trayecto no fue muy largo y al llegar al departamento rápidamente divisó a JungWoo. Era imposible que su presencia pasara desapercibida. Estaba atendiendo una llamada, por lo que se quedó de pie a su lado mientras esperaba que terminara.
  Paseó su vista por toda la sección, este sería su segundo hogar de ahora en adelante. Sonrió.

—DoYoungie—JungWoo colgaba el teléfono. —¿Cómo te fue con el jefe?

—El Sr. Lee es una gran persona. Tenía miedo por lo que se dice de él pero en realidad es amigable—recibió un asentimiento por parte de su superior.

—Sí, creo que todos en esta empresa nos mantenemos aquí por la forma en que trata a su personal, sin embargo, el presidente es todo lo opuesto a él. Pero posiblemente no tengas que cruzártelo mucho así que estarás bien —levantó su pulgar. DoYoung río, su sunbae era increíble. —Ven—se levantó de su asiento y lo llevó unos cubículos más allá del suyo—Este será tu espacio de trabajo. Es lo más cercano a mí que pude obtener. Al frente estará el principito Jeong JaeHyun. Intenta no involucrarte mucho con él. No sé por qué quiso hacer sus prácticas aquí, es un mimado—refunfuñaba.

—¡Oh! DoYoung, seguramente no lo conoces pero él será el otro pasante, por un capricho decidió que volvería de América para hacer sus prácticas aquí, sencillamente pudo hacerlas en nuestra sucursal de allá—continuó quejándose. Parecía guardarle mucho rencor a Jeong.

—Conocí a JaeHyun hace un momento en la oficina de vicepresidente. Escuché que venía de una prestigiosa universidad pero no que fuera de América. Debe ser todo un genio —halagó—No caigas DoYoung. El muchacho está guapo pero es todo un patán—le habló como un hermano mayor sobreprotector.

—No me refería a eso sunbae—negaba DoYoung pero JungWoo lo ignoró.

—No será bueno para tu expediente un enredo amoroso con el sobrino del presidente. Eso era toda una revelación.

—En América… Entonces—iba a continuar pero JungWoo terminó—: Es el hijo del antiguo presidente.

—Vaya—DoYoung estaba sin palabras.

  Él sabía que luego de la muerte de Lee EungKyu, su esposa e hijo se mudaron a América de eso habían pasado siete años.

—No se sabe por qué ahora lleva el apellido de soltera de su madre y su cambio de nombre—contestó JungWoo imaginando lo que pasaba por la cabeza de su hobae— Ya ves DoYoungie, no es un buen partido—sentenció y DoYoung no se molestó en negar, ya iba conociendo a su superior, no malgastaría energías.

   Ahora alentaba más su teoría de que lo escuchado era producto de imaginación. Lee YoonOh,  ese era el antiguo nombre de JaeHyun ¿Por qué el cambio?

—Por hoy entrarás en el ambiente y me ayudaras con recados. En la tarde debo encárgame de una reunión con el departamento de producción y podrás acompañarme, soy un buen supervisor ¿No? —removió sus cabellos— Quiero que enseñarte todo lo que pueda, desde ya te he tomado mucho aprecio DoYoungie—dijo con una cara más seria.

—Gracias sunbae. No te defraudaré—habló con firmeza.
—Eso espero. Ahora vuelvo a mi puesto. En esta carpeta está toda la información sobre el personal de la empresa—señaló hacia el escritorio— puedes ir estudiándola. Nos vemos.

—Vaya, pensé que primeramente estudiaría los balances—suspiró pero su sunbae fue asertivo, debía primero conocer sobre la empresa.

  Se sentó  inició la lectura. Por momentos se levantaba a atender pedidos sencillos a JungWoo: ir a la fotocopiadora, llevarle un documento y así pasó la mañana.

  Cuando ya llegaba la hora de almuerzo, JungWoo lo presentó ante todo el equipo y lo ofreció a ser el mandadero de todos allí—Si alguno te molesta más de lo debido debes decírmelo. Quiero que realices recados por esa es la manera más fácil de saber cosas mínimas que no está en tus materias cursadas ni en documentos informativos. Es algo molesto pero luego lo agradecerás—acotó el mayor—¿Vienes a almorzar con nosotros?

—Quisiera quedarme a estudiar, traje mi almuerzo—comentó apenado por rechazarlo.

—Muy bien, prepárate para nuestra reunión—y salió del lugar.
  Estuvo leyendo un rato hasta que decidió sacar su comida.