UnLUCKY BOY [JaeDo]

CAPITULO 4

La ansiedad le iba ganando, él quería saber a qué se refería Johnny pero el hombre se negó a darle detalles antes de su reunión. Esa tarde JungWoo no le ofreció salir por alguna bebida y se prometió que al día siguiente tomaría la iniciativa y así agradecerle debidamente.

  La noche llegó y DoYoung jugaba con sus dedos, ya desesperado porque Johnny no llegaba y tampoco contestaba al teléfono.

Odiaba la incertidumbre, no pudo concentrarse en nada desde que salió de la empresa y cuando en verdad quería encontrarse al principal responsable de su estado, no lo encontró por ningún lado.

—Más te vale que aclares todo este lío que se ha creado en mi mente Suh Johnny—habló a la nada mientras mordía su pulgar. Sintió el teléfono vibrar. Era Johnny, tomó su bolso y bajó apresurado las escaleras para ir al encuentro a su encuentro.

—Espero puedas aclararme toda esa mierda de Jeong JaeHyun y de cómo sabes lo que ocurre. Ese hombre ha ido de amenazabas incomprensibles a ignorarme por completo. Parece una especie de ser que vive alucinando. Ayer no les quise comentar nada porque no le tomé gran importancia y no quería preocuparlos pero hoy escuché algunos rumores, entonces tú me pides reunirnos para hablar sobre ello también. No entiendo pero sabes que odio sentirme así, no puedo concentrarme y comienza a aterrarme que ese hombre sea un enfermo mental que se trae algo en mi contra sólo porque sí—terminó aquel monólogo desesperado y en cambio recibió la carcajada del conductor.

—Lo siento Do, pero me has dado la impresión de esas personas que está siendo acosado y piensa que será asesinado en cualquier mome-… ¡Oye! —se quejó cundo sintió dolor en su cabeza por el manotazo que recibió de DoYoung—Entiendo como te sientes y también me hubiera alarmado de no ser porque ayer YoonOh me habló para preguntarme sobre ti. De hecho, la reunión que te comenté ayer era con é pero no tenía idea que trataría sobre ti—alzó los hombres justificándose—Debiste hablar sobre ello con nosotros ¿Qué pasaba si en verdad se trataba de algún loco obsesivo?

—Bueno yo…—calló dudoso un momento—. No quise hacerle mucha mente a eso ayer porque igual se trataba de el sobrino del presidente pero hoy… No sé John, él no me dirigió la palabra en ningún momento y entonces uno de mis superiores me dijo de los rumores que corrían sobre que yo era la razón de su llegada a la empresa, que teníamos una relación, entre otras cosas que a mi ver eran más terroríficas por las amenazas que me hiso ayer—suspiró.

—Calma ¿Sí? Por ahora no te diré nada más pero no debes preocuparte por YoonOh. Él quiere aclarar las cosas contigo pero por algunas razones que ya imagino, no podía hacerlo en la empresa y me pidió que organizara la reunión, debe estar ya en mi apartamento esperando por nosotros. Luego me contarás sobre esas amenazas—terminó serio.

  Media hora después ya abordaban el elevador del edificio en el que vivía el mayor.

—¿Cómo es que ese hombre entra en tu apartamento así sin más? —preguntó entre curioso y molesto.

—Bueno, YoonOh y yo somos amigos de cuando vivía en América. Te hablé muchas veces sobre él. Recuperé contacto con él durante el tiempo que estu-.

—Entiendo, él es tu mejor amigo —cortó al otro, evitando recordar su incidente—. Pues no se parece en nada a la descripción que me llegaste a dar— lo miró escéptico.

—Doie, estábamos en crecimiento y él no atravesaba su mejor momento, recién llegaba a un lugar completamente distinto a su hogar y sufría la pérdida de su padre— recalcó—Ni tú ni yo conservamos la misma apariencia o personalidad de antaño.
  Touché, Johnny tenía un punto.

—Tampoco me hablaste de sus circunstancias —se justificó, reacio a aceptar que el otro tenía razón.

—Jamás pensé que te llegara a interesar y tampoco sabía que su padre era el antiguo presidente de JR, luego de saberlo no pensé que te interesaran mis conexiones con él. Espera a que hablemos con él y aclararás tu mente—intentó relajarlo.