UnLUCKY BOY [JaeDo]

CAPÍTULO 8

—… y tres americanos descafeinados por favor—termina a de hacer el pedido a la cajera. No le molestaba ser el de los mandados pero últimamente todo lo que hacía era andar de aquí para allá llevando y trayendo cosas, no podía quejarse puesto que era el jefe de departamento quien le daba las tareas.

  Era viernes, día en que tendría su salida con sus compañeros de trabajo. Día en que JaeHyun comenzaría con aquel juego de cortejo.

—Su pedido—le habló el chico con una pequeña sonrisa detrás de mostrador a lo que DoYoung lo tomó y se dirigió a su lugar de trabajo.

  Volvían sus pensamientos a JaeHyun que luego de aquella llamada la noche que estuvo con Jeno y que ocultó de éste porque la conversación trató de RenJun; no habían vuelto a hablar excepto cuando cruzaban palabras por el trabajo. Johnny tampoco se comunicó con él luego esa reunión telefónica con los otros dos.

  Tomó el ascensor y rápidamente llegó al departamento de finanzas. Bien, ahora debía ir a entregar el preciado café helado de su jefe de departamento. Ese hombre tenía un aura parecida a la de JaeHyun o tal vez fuera que ambos intimidaran al pasante por la belleza tan varonil y oscura que portaban.

—¿No tardó más de lo debido pasante?—preguntó el hombre sin dejar de mirar los documentos apenas DoYoung se anunció.

—Perdone, la fila estuvo un poco más larga esta vez—se excusó.

—Está bien—fue lo último que dijo y el de gafas no esperó más para salir de la oficina.

  Al cerrar la puerta suspiró, ni JaeHyun llegaba a tener esa actitud tan odiosa. No le había dado las gracias por el café en ningún momento. Lo mejor era no pensar en eso al fin y al cabo él era un simple pasante.

  Caminó a su cubículo, debía seguir estudiando aquellas estadísticas sobre las ganancias con los contratistas extranjeros.

Ante una duda se cohibió de consultar a su compañero, pero se decidió a hacerlo. Éste fue a su lado y se inclinó un poco para ver los detalles en la pantalla, aclaró añadiendo algunos ejemplos y DoYoung agradeció con sinceridad, a como se lo hizo ver el hombre todo resultó muy sencillo.

—Hoy me uniré a ustedes en el almuerzo—anunció JaeHyun antes de volver a su puesto.

—Uhm—respondió DoYoung con un asentimiento.
  Le extrañó aquello pero pudiera ser lo mejor para dejar atrás esa incomodidad que había estado mostrándole. Seguramente JaeHyun lo hubo notado.

                                                      ***

  A la hora del almuerzo el pasante se levantó con su caja de comida y le indicó al otro que los esperaban, dicho de mejor forma; lo esperaban a él porque cuando JaeHyun caminó al lado de DoYoung, HaeChan y JungWoo los miraron como si ahora tuvieran dos cabezas pero cuando DoYoung les dijo que se uniría a ellos para comer estos lo tomaron sin algún drama.

  Mark sólo se limitó a sentir y dirigir el paso. Algunas miradas se posaron sobre ellos en la cafetería. Por supuesto que todos miraría como el sobrino del presidente se sentaba a comer junto a aquel grupo.

—Es extraño que vinieras acá JaeHyun, dicen que siempre almuerzas en ese restaurante de comida internacional que está no muy lejos de acá—soltó HaeChan y DoYoung se preguntaba el cómo sabía sobre eso.

—Supe que sirven unos platos interesantes aquí—respondió y fue a dar su pedido.

  Ninguno agregó nada más cuando se fue y luego de eso estuvieron escuchando algunas ocurrencias de JungWoo mientras degustaban su comida.

—Nuestro querido pasante ya está robando corazones por ahí—comentó HaeChan con picardía, interrumpiendo un relato sobre los días de escuela de JungWoo.

  Todos dirigieron su mirada a él. DoYoung luchó por no mirar hacia JaeHyun ¿Acaso HaeChan había notado algo entre ellos? Pero si apenas se han dirigido la palabra estos días.

—¿Cómo es que no me he enterado de eso? ¡DoYoung!—se quejaba su supervisor con voz infantil.

—No sé de qué estás hablando HaeChan sunbae—respondió nervioso y miró a JungWoo negando.

—DoYoung comenzó a traerle el café a nuestro jefe de departamento ¿Verdad?—sólo se escuchó el sonido de uno palillos cayendo al plato.

—¿Insinúas que…?—intentó formular la pregunta JungWoo quien había sido el que soltó su cubierto por la sorpresa.

—¡No!—negó HaeChan riéndo—Nuestro DoYoung es muy adorable pero creo que ni él podría calar en el Corazón de Wong, si apenas y nos mira por el rabillo del ojo. Y disculpa que hable de este modo Mark pero creo que sólo tú llevas una buena relación con él—comentaba revolviendo su ensalada, Mark frunció su ceño pero no habló—Como les decía—retomó el tema—DoYoung ha estado haciendo los recados del jefe y uno de ellos es llevarle el café en las mañanas; algo extraño, sí, desde que estoy aquí sólo JungWoo llevaba su café—miró al mencionado pero este no quitó la vista de su comida—En fin, el chico que atiende el café es cercano a mí y pues me preguntó sobre un chico de mi empresa con gafas bastante lindo que esta semana comenzó a frecuentar el local. El único chico lindo y nuevo en la empresa es nuestro DoYoung—concluyó erguido sobre su asiento, sintiéndose orgulloso de su revelación y de repente abrió sus ojos dirigiéndolos al nuevo integrante en aquella mesa—Con todo respeto JaeHyun, sabes a lo que me refiero—dijo a modo de disculpa.

—Por supuesto—respondió JaeHyun cortando la carne con los cubiertos.

—Pero aún no termino, cuando le dije que era uno de nuestros pasantes se apresuró a preguntarme si tenías pareja a lo que le respondí que estabas libre y tal vez dispuesto.

—¿Ah? Yo no estoy dispuesto a nada sunbae. Me parece que estuvo mal de tu parte hablar de lo que no sabes—intervino molesto el de gafas que hace rato había dejado olvidado su almuerzo.

—Oye, no es para molestarse. No es que le haya dicho que darías un sí a la primera, solo estar dispuesto a conocer nuevas personas—se encojió de hombros.

—Siempre eres un metiche HaeChan, entiendo la molestia de DoYoung—apoyó Mark.

—Sólo quería ayudar, no es la gran cosa.

—Que tú lo veas así no quiere decir que todos seamos igual a ti—alzó un poco la voz Mark.

—No es necesario discutir por eso, me gustaría que antes me comentaras antes de asumir cosas. Es una cuestión personal—cerró su caja de almuerzo, ya se le había el apetito. Tener al Jung  a su lado no era lo mejor para su apetito.

—Mira, le causaste tanto disgusto que perdió el apetito—acusó Mark queriendo seguir la discusión.

  DoYoung abrió los ojos mirándolo con horror queriendo negar lo dicho.

—No es así, no tenía apetito en un principio—negaba con sus manos al aire.

—Déjalos DoYoungie, ellos buscan cualquier pretexto para discutir—habló JungWoo luego de estar todo ese rato en silencio—Hablando de estos temas ¿No tienes a alguien por ahí JaeHyun?—ante la pregunta el de gafas volvió a sentir los pelos de punta.

—Ahí va otro metiche—suspiró Mark.

—Sólo tengo curiosidad porque viene del extranjero—refutó el que tenía el mayor rango entre ellos.

  Todos miraron a JaeHyun, cada uno con una emoción distinta. DoYoung quería aparentar indiferencia pero era todo lo contrario, no entendía por qué debía estar nervioso, no era como si estuvieran insinuando algo entre ellos. Tampoco es que estuvieran ocultando alguna relación.

—No tengo a nadie, pero no estoy cerrado a las posibilidades. Si quieres presentarme a alguien esta noche, adelante—sugirió el hombre con el tono neutral que lo caracterizaba.

—Oh no, era intriga lo que me motivo a preguntar—rio JungWoo—Uno no espera que alguien tan guapo esté soltero—se echó hacia atrás en su silla.

—¿Eso es una insinuación?—elevó una ceja JaeHyun.

  JungWoo al escucharlo se sonrojó pero negó con rapidez causando una carcajada a Mark que al parecer fue el único al que le causó mucha gracia la escena.

—¿Qué dices? No es así, lamento mi sinceridad pero todos aquí somos conscientes de lo jodidamente guapo que eres. Eres guapo pero no me gustas de esa forma—terminó más tranquilo.

—Jodidamente es poco, lo único que se escucha entre las chicas es de lo caliente que es el sobrino del presidente y si está en una relación con el otro pasante. Ya le habíamos comentado a DoYoung sobre eso pero lo negó, según se sabe fuiste tú quien pidió estar junto a DoYoung en los cubículos—habló HaeChan sacando su teléfono y buscando algo—Lo último que han dicho es que al parecer eres más amable con DoYoung y es a quien más diriges la palabra—seguía moviendo su dedo sobre la pantalla y se detuvo cuando al parecer encontró lo que buscaba, volteó el teléfono para dar visibilidad a los demás—aquí se les vio entrando al baño casi al mismo, tú luego de DoYoung.

—Vaya, me pregunto si el presidente sabe sobre todo lo que hacen sus empleados en su horario laboral, espero estén rindiendo lo suficiente para cubrir el tiempo que se dedican a acosarme—dijo serio y HaeChan inmediatamente guardó su teléfono.

  El lugar comenzaba a quedarse vacío y un silencio incómodo se prolongo por unos segundos hasta que JaeHyun volvió a hablar.
—Si crees que iré a decírselo al presidente no tienes de qué preocuparte. En todas las empresas ocurre los mismo, eso ayuda a que no se aburran—miró a DoYoung quien se mantenía tenso—Pedí estar cerca de DoYoung porque no quería que se me tratara como alguien superior solo por tener parentesco con el presidente. He notado lo nervioso que éste puede llegar a ser por lo que pensé que intercambiar palabras con él le ayudaría un poco. Lo del baño podría ser casualidad—nuevamente miró a HaeChan—Por su puesto que no hay nada entre nosotros, pero no puedo negar el hecho de que sí despierta deseos en mí.

  DoYoung quería que se lo tragase la tierra ¿Cómo era que se podía ser tan impudoroso?

—¡Oh Santa Madre!—exclamó con las manos tapando su boca HaeChan, que luego de haber pasado su pequeño shock reaccionó—DoYoung, aquí tienes una declaración de la sensación de la empresa. Creo que me sonrojé, mierda. Sí que andas sin tapujos hombre—le dirigió una mirada picara al extranjero y luego de normalizarla la desvió a DoYoung.

—El pobre no puede no hablar, si ya de por sí es nervioso—lamentó JungWoo—No creo que estuviera bien dar ese tipo de declaraciones—miró al responsable con el ceño fruncido.

—Debes disculpar mi sinceridad—se encogió de hombros.
  JungWoo calló, le había devuelto sus propias palabras. Volvió la mirada a JungWoo sintiéndose un poco mal.

—Como ya lo dije no estoy interesado en intentar nada por ahora, las cosas serán distintas para ti JaeHyun pero aquí tomamos en serio los sentimientos antes que cualquier deseo momentáneo. Lo siento si esperas que caiga a tus pies, espero podamos ser buenos compañeros. Con permiso—sin más tomó sus pertenencias e intentó salir del lugar pero la voz de JaeHyun lo detuvo.

—Los sentimientos nacen del acercamiento y el acercamiento se da cuando decides hacer caso a tus deseos DoYoung.

  Éste reanudó su camino, cuando sabía que ya no podía ser visto llevó las manos a su pecho. Sentía ganas de llorar, se había comportado como un niño pero no sabía lidiar con aquella situaciones. Ahora menos podría verle la cara.

  El tiempo pasó con DoYoung tomando cualquier tarea que le permitiera estar fuera del cubículo para no ver a JaeHyun. Le entregaba unas carpetas a JungWoo y antes de irse éste lo detuvo.

—Tal vez no quieras ir por lo tragos hoy pero no creo que sea lo mejor. Puedo entenderte pero lo mejor será que intentes llevarlo como hasta ahora. Más de uno habrá escuchado todo lo dijo—JungWoo lo miró con lástima—Lo siento DoYoung si yo no seguía con el tema no se habría llegado a eso.

—Está bien, puede que tenga razón. Lo mejor es continuar como antes, no me gusta estar bajo la mirada de nadie, me incomodan estas situaciones—suspiró, miró de reojo hacia JaeHyun.

—¿No tienes deberes JungWoo? Te recuerdo que el pasante no está para andar de chisme contigo.

  Ambos chicos se sobresaltaron ante la voz de Wong YukHei, el jefe de departamento.

—Sólo le estaba dando algunas sugerencias YukHei ¿Tan aburrido te encuentras que ahora te paseas por el departamemto?—preguntó con JungWoo con molestia, DoYoung se sorprendió por el tono empleado, era primera vez que veía la molestia pintada en la cara de su sunbae.

   Agradecía que el espacio estuviera algo retirado de los demás. Más se sorprendió cuando Wong no respondió y salió del departamento.

—Idiota—murmuró JungWoo y cuando vio paralizado a su aprendiz rio—No hagas caso a eso.

  Sin más, DoYoung tuvo que volver a su puesto. Sintió algunas miradas ¿Siempre fue así y él no había caído en cuenta?, miró a JaeHyun pero éste estaba concentrado en el computador o eso aparentaba.

  Un suspiro se le escapó, tal vez debería pedirle a Johnny que lo acompañara a aquella salida y así quizás le sería más fácil lidiar con todo