UnLUCKY BOY [JaeDo]

CAPÍTULO 6

Ya llegaban a su destino y DoYoung divisó a Jeno que al parecer se despedía de otro chico. Sonrió para sí, seguramente era ESA persona y disfrutaría molestar al menor con ello apenas se saludaran. Ese le permitió olvidar un momento lo que había estado escuchando por JaeHyun en el camino.

—Es allí donde están esos dos chicos—indicó para que JaeHyun buscara estacionarse—Tal vez quisieras... uhm, pasar un rato aquí, ya que te tomaste la molestia de traerme. Sólo si quieres—se apresuró a decir lo último, no sabía de dónde venía aquel ofrecimiento pero si se quedaba ayudaría con el relato que le daría a Jeno.

—No lo sé—respondió JaeHyun al haberse estacionado—¿Desde cuándo conoces a estos chicos?—pregunto viendo en dirección a los mencionados.

DoYoung se sorprendió por tal pregunta, jamás podría llegar a pensar que Jeno... No. No podía ser.

—Si tienes alguna sospecha solo te pido que lo dejes. Jeno ha estado a mi lado desde mi niñez, es imposible. No—negó—. Ahora su acompañante es un desconocido para mí, posiblemente algún compañero de la universidad—aclaró sin dar más detalles.

—Ten cuidado, dices conocer de toda la vida a este chico Jeno pero no estás enterado de su círculo de amigos. Alguno podría usarlo para llegar a ti—Advirtió—Lo mejor será que me vaya, podría ser peligroso.

—Tienes razón, lo siento. No lo pensé—concordó—Lo bueno de haber llegado en este auto es que Jeno pensará que era Johnny quien me trajo. Aunque tengo pensado hablarle sobre lo que está pasando, al ser tan cercano a mí debo hacerle saber en la situación que me encuentro—DoYoung miró con decisión hacia JaeHyun.

—No puedes tomar estas decisiones por tu cuenta. Te prometí protección y la puedo garantizar sólo si me dejas saber todo sobre ti. La seguridad que te he colado no alcanza a saber de lo que hablas con los demás pero dado el caso tendrías que llevar un micrófono de ahora en adelante—ofreció de lo más normal, como si no estuviera hablando de que unos completos desconocidos invadirían su privacidad.

—¡Eso jamás!—exclamó molesto—¿Acaso controlarás mi vida de ahora en adelante? Entiendo que estés estresado por toda esta situación pero creo que estás siendo un poco paranoico—acusó.

—¿Paranoico?—preguntó JaeHyun con molestia—No sabes de lo que pueda ser capaz mi tío. Tú estás siendo muy optimista DoYoung. Parece que ya olvidas lo que te acabo de comentar—recordó—Debes sospechar de todos, aún fuera del trabajo.

DoYoung comenzaba a sentir un nudo en la garganta. Se sentía inútil e indefenso ante los argumentos del hombre y sabía que tenía razón.

—Esto va más allá de lo que puedo soportar—sinceró agachando su cabeza y cubriendo su rostro con sus manos—Tal vez solo deba renunciar.

—Estaría lanzándote al abismo. Ellos enterraran tu carrera profesional y quien sabe que otras más—advirtió el Jung—Al parecer tu amigo ya notó el auto. Viene hacia acá—DoYoung escuchó como JaepHyun suspiraba frustrado. Cuando levantó la vista ya Jeno tocaba la ventana del auto con una sonrisa.

Mierda, no sabía qué hacer. Miró a JaeHyun buscando su opinión. Si salía obviamente Jeno iría a saludar al que se suponía sería Johnny y si arrancaban el auto igualmente Jeno haría mil preguntas y sabía que en la cara ya no podría mentirle.

—Quitaré el seguro para que entre y así hablemos con él. Según la vigilancia no ha hecho nada sospechoso hasta ahora, daré el benefició de la duda—se resignó JaeHyun.

—¿Lo has vigilado?—ya ni sabía para qué lo preguntaba si era algo de esperarse—Entonces tus preguntas eran innecesarias. Ya sabrás todo sobre mi relación con Jeno—se cruzó de brazos.