Flechazo | KookTae

EXTRAS

¿Quién es Min YoonGi?

Guapo.

Popular.

Arrogante.

Inalcanzable.

Esas eran los primeros adjetivos que escuchó JiMin sobre un chico de tercer semestre. Él desconocía por completo la pirámide social, después de todo sólo era un alumno de nuevo ingreso; así que no podía asegurar si esas palabras para describirlo eran acertadas o no.

Sus compañeros de clase eran agradables, sin embargo, con ninguno de ellos pudo formar una amistad sólida; o por lo menos no hasta un semestre después, cuando conoció a Kim SeokJin y a su pequeño grupo de amigos.

Fue gracias a ello que lo vio por primera vez.

¿Guapo?, JiMin debía admitir que era atractivo, demasiado.

¿Popular?, la más obvia de todas. Toda la escuela sabía de él.

¿Arrogante?, no lo parecía. Conversaba con JungKook de manera agradable y siempre intentaba incluirlos a ellos en la conversación también.

¿Inalcanzable?, por lo menos para JiMin sí lo era. No había manera de que alguien como YoonGi estuviera con él.

No le tomó mucha importancia a la ligera diferencia entre su opinión y la de otros, le parecía que la gente sólo había asumido que YoonGi era alguien arrogante por ser bastante popular incluso en los cursos de arriba.

—JiMin, ¿cómo eres amigo de Min YoonGi? —le preguntó una chica durante una de sus clases.

Miró a su compañera, la conocía porque ella era parte de su clase durante el primer semestre y la había escuchado hablar sobre el chico alto de segundo año en un par de ocasiones.

— ¿Por qué lo haces sonar como si fuera algo sorprendente? —contestó con una sonrisa—. Llegó a la mesa en donde almorzaba con unos amigos y sólo comenzamos a platicar, no es la gran cosa.

— ¿Bromeas? —preguntó la chica en un tono que lo molestó un poco —Min YoonGi no sólo va a tu mesa y comienza a hablar contigo, ¿sabes la cantidad de gente que ha sido rechazada por él?

En realidad, no lo sabía.

—¿Cuál es tu punto? —preguntó fastidiado, queriendo acabar con la conversación.

—¿Cómo lo hiciste?

—No hice nada especial, nos hicimos amigos gracias a JungKook— respondió mientras pensaba un poco—. Si tanto quieres hablar con él deberías acercarte cuando esté con alguien que conozcas, tal vez surja un tema de conversación.

La chica sonrió, parecía que había escuchado justo lo que necesitaba. El tema terminó ahí, para alivio de JiMin, y pudieron continuar con el trabajo que debían realizar en pareja.

Después de esa conversación tan absurda, se encontró a sí mismo observando a YoonGi con detenimiento. El chico era demasiado agradable, travieso, escandaloso y alegre para poder considerarlo como alguien difícil de tratar; arrogante o engreído eran las últimas palabras que se le cruzaban en la mente cuando estaba con él.

Y tal vez por eso es por lo que le había empezado a gustar a pesar de conocerlo por tan poco tiempo. No podía mentir, se sentía demasiado atraído por él y por un momento creyó que podría tener una oportunidad. Comenzó a pensar en confesarse, después de todo no perdía nada; YoonGi era demasiado agradable y dudaba que fuera a insultarlo o humillarlo.

Una mañana mientras salía de clase y caminaba por los pasillos para dirigirse a la siguiente, se cruzó con el chico pálido. YoonGi lo vio a lo lejos y sonrió al igual que él, acercándose para saludar.