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Enero 10, 2022

9:00 am

Francia



Tarareo la canción Happy de Pharell Williams que suena en la radio en lo que termino de pasar el trapo seco por la cocina, en estos últimos años el orden y la limpieza es mi compulsión al igual que las compras. En situaciones tensas o estresantes me suelo refugiar en ese método donde descargo todo mis frustraciones dando como resultado algo productivo para la casa, el fumar es algo que nunca pensé tomar en cuanta, muchas veces reprendía a Jeon por eso mismo.

Jeon.

Sacudo mi cabeza quitando el sudor de mi frente con la manga de mi camiseta viendo como quedo reluciente mi cocina, sonrío cansada aproximándome a la barra de la cocina donde deje el paquete de cigarros de color rojo y el encendedor. Camino hasta la puerta corrediza que da hacia la pequeña terraza, saco uno llevándomelo a los labios divisando el color rojo de la colilla hasta su límite donde comienza la delgada línea blanca, lo enciendo dando la primera calada deleitándome con el dulce sabor de la fresa.

No son cigarros convencionales, había pasado por una tienda naturista donde vi estos cigarros medicinales. Compre un paquete y decidí investigar un poco antes de probarlos para no entorpecer la salud de JaeMin al oler el humo fuerte, pero me sorprendí al enterarme que estos ayudan a combatir las ansiedades, también que sirve como un buen método para dejar de fumar. Suele venir de diferentes sabores de frutas pero mi preferido es el de fresa.

A esta hora la calle del vecindario es poco transitada, uno de los beneficios por los cuales me encanto rentar este apartamento que está en pleno centro, se me hace más fáciles las comprar o ir a los pequeños restaurantes que están alrededor. Además que el gran parque está en la esquina donde los guardias no abandonan ese lugar, en pocas palabras este vecindario es muy seguro y discreto.

--La psicóloga dijo que tienes que dejar ese mal habito tuyo.—hablaron a mis espaldas sorprendiéndome, me volteo encontrando a un Wonho sin camisa somnoliento estrujándose sus ojos con sus puños.—Como siempre no me haces caso.

--Esto no crea adicción.—niego rápidamente.

--Pero te vuelve dependiente del tarde o temprano, solo date un tiempo para verte entrar en una crisis nerviosa porque no los consigues en el mercado.—terminó de decir con una sonrisa llegando a mi lado, bufo con fastidio dando otra calada.—Veo que te pasaste mis palabras por el agujero de tu cu-

--¿Todavía JaeMin no despierta?.—pregunto cambiando de tema viéndolo negar.—Terminaré mi cigarro y lo despertare, no me gusta que se levante tan tarde.

--Las partidas de ayer con él en Mario kart son muy interesantes, ese niño solo tiene tres años y no juega nada mal.—bosteza estirándose.

Sonrío victoriosa.—Salió a mí.

Termino de calar mi cigarro apagándolo contra el barandal de la terraza expulsando suavemente el humo por mis labios, me llevo el sobrante lanzándolo al cesto de basura de la cocina seguido de los pasos lentos de Wonho. Él se queda en el banquito de la barra agarrando su teléfono hipnotizándose como siempre hace.

Entro a la habitación de mi hijo abriendo la puerta y encendiendo la luz dándole un brillo único a las paredes de color verde manzana, enseguida frunce su seño sujetando más a Dooly su dinosaurio de felpa que no suelta por nada del mundo. Sonrió enternecida deslizando las cortinas de la ventana dándole la bienvenida a la luz natural.

𝙎𝙤𝙣 𝙊𝙛 𝙂𝙡𝙖𝙨𝙨 #2 男孩 | JJK & Melanie |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora