Hace seis años
Subo el volumen de la radio a todo volumen dejando que la canción de Don't Stop me Now me taladre el tímpano en un intento de callar las sirenas de la policía que vienen detrás de mí, sonrió burlón al verlos a través de mi retrovisor vamos a jugar un rato con ellos.
Giro bruscamente a la derecha en una calle estrecha poco transitada, al estar de noche me da más ventaja de hacer perder a estos hijos de puta. Sigo derecho hasta la última calle escuchando menos las horrorosas sirenas, cruzo de nuevo a la izquierda encontrándome con menos alumbrado público que en otras calles. Las luces rojas y azules las veo alumbrarme de nuevo los vidrios haciéndome que bufe con cansancio.
Piso el acelerador sim importarme mucho a qué velocidad vaya, estoy acostumbrado a escapar de ellos en reiteradas veces y es que mis encargos son muy llamativos a la vista del público. Cruzo a la izquierda para después volver a cruzar a la misma dirección siguiendo en línea recta hasta aquel estacionamiento, bajo la música con cuidado percatándome que ya no escucho las sirenas.
Apago las luces y me voy adentrando al viejo estacionamiento donde me encuentro con varios carros de diferentes marcas, estaciono con cuidado un poco lejos de la entrada. Apago el motor del auto y me bajo de este rápidamente dejando las llaves en el techo del auto, abro la puerta detrás y saco la mochila deportiva junto a un muñeco con ropa diferente a la mía para colocarlo en el asiento del conductor.
Me quito la cazadora que tengo y se la coloco rápidamente al muñeco haciendo un intercambio de prendas, tiro la puerta y comienzo a trotar dirigiéndome a la otra salida del estacionamiento. Busco las llaves del otro auto en el bolsillo de aquella cazadora y mi pulso se acelera cuando no siento las dichosas llaves.
--¡Mierda bote las llaves!.—grito en un susurro removiendo mis cabellos frustrado, miro a todos lados desesperado en busca de alguien o de algo.
Escucho como mis latidos incrementan sin buscar una salida a este desastre, si voy caminando me demorare mucho y los imbéciles de la policía me atraparan enseguida.
En eso unas luces me hacen cerrar mis ojos al darme en todo el rostro, gruño con molestia cubriendo las luces con mi mano cubierta por el guante de cuero que suelo usar para no dejar rastro. Relamo mis labios acostumbrándome a la luz y veo a la distancia a cuatro personas enfundadas en aquellos trajes de niños ricos que suelo odiar.
--¿Qué mierda pasa con ustedes?—pregunto bruscamente al ver que ninguno de ellos dice algo al respecto, a lo lejos escucho las sirenas de los policía haciéndome alterar mis nervios.
--Jung Hoseok, esto debe ser tuyo.—me tiran unas llaves a mis pies percatándome que son del auto que busco.—Veo que andas con mucha prisa.
--¿Tienes pocos huevos de mostraste ante mi?.—pregunto con burla mostrándole la mejor de mis sonrisas, estos niños de papi siempre quieren hacerse los superiores.—Si, tengo mucha prisa por si lo ha notado.
Decido recoger las llaves, pero el disparo que resuena hace que me reincorpore al mismo tiempo que las llaves se mueven lejos de mí, parpadeo tragando grueso escuchando la risita divertida de aquellos cabrones. Vuelvo a verlos y el que está en el medio avanza ante mi dejándome sorprendido al ver a quien tengo delante.
Jodida mierda
--Jeon Jungkook, por tus expresiones de asombro me hace reconocer que sabes quien soy. —esta vez soy yo quien retrocede al mencionar su nombre el más maldito de todos está enfrente de mí, extiende su mano cubierta por un guante y con mucha duda acepto su saludo.—Ven con nosotros antes que vengan esos hijos de puta.
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𝙎𝙤𝙣 𝙊𝙛 𝙂𝙡𝙖𝙨𝙨 #2 男孩 | JJK & Melanie |
Aksi"El destino es la suma de todas las decisiones que uno toma en esta vida" Melanie había jurado vengarse de ellos, de hacerles pagar todo el dolor le habían causado. Tendría que usar todas sus armas a su alcance, incluso su propio cuerpo y su corazón...