medicine ♡ yoonmin + kookmin + vmin

drømmemiddag

♡

Un ladrido hizo que su corazón se paralizara y rápidamente giró hacia delante, viendo cómo su perrito corría felizmente hacia él, las lágrimas terminaron por ganarle y rompió en llanto mientras abrazaba a su feliz perrito que se movía en sus brazos con locura. Estaba tan feliz de verlo.

Sin embargo, oyó unos pasos frente a él y ahora era Taehyung quien apareció en su campo de visión, agachándose para sonreírle dulcemente.

—Dasom es un sol... y es muy tierno. Como su dueño.
Dijo sonriendo, sentándose en el suelo. El animal ladró y se soltó de los brazos de su dueño para correr hacia el otro hombre, pidiendo sus caricias.

Jimin se sorprendió ante eso. No creía que luego de tantos meses su mascota fuera a recordar a Taehyung e ir tan contento a recibir sus caricias.

—Ah... pobrecito. Estas tan lastimado.
Le susurró, dejando de lado al perro que se fue a otro lado de la casa y acercándose a Jimin, quien intentó retroceder asustado, creyendo que le haría daño.—Está bien... No voy a hacerte daño. Tú y yo, Jimin... tenemos una conexión que nadie más tiene. Jamás podría herirte. Eres mi mejor amigo.

Jimin lo miró con las lágrimas en los bordes de sus ojos y Taehyung solamente le sonrió, abriendo sus brazos para que fuera a darle un abrazo. El pelinegro rompió en llanto y se lanzó a abrazarlo, siendo recibido por el mismo trato y estrechado en esos cálidos brazos.
No supo cuánto tiempo estuvo abrazado a él, pero eso hizo que sus niveles de estrés y desesperación bajaran mucho. Estaba feliz de poder recibir algo que no sea violencia.

Taehyung acarició dulcemente el cabello de Jimin, peinándolo un poco y quitando trozos de cera mientras él lloraba y lloraba, desahogándose en llanto de las cosas previas que le pasaron en esas eternas dos horas.
Sin embargo, el ladrido de la mascota de la casa los interrumpió.

—Aw, parece que alguien tiene hambre. ¿Por qué no le damos de comer? Tú y yo juntos, escuche que alguien esta en una dieta a base de pollo hervido.
Dijo, separándose del abrazo, Jimin le asintió mientras secaba sus lágrimas, parándose y caminando juntos de la mano hasta el plato de comida del animal el cual estaba sobre un mueble. Taehyung lo agarró y se sentó en el suelo, indicándole a Jimin que se siente entre sus piernas, dicho y hecho, Jimin se arrodilló con cuidado y se sentó en el suelo un poco adolorido. Fue Taehyung quien lo acomodó, recostando la espalda de Jimin en su pecho, haciéndolo sentir seguro.

Jimin comenzó a darle trocitos de pollo a su mascota mientras Taehyung lo miraba con una sonrisa, acariciando su cintura cada tanto y apoyando su mentón en el hombro de su... amigo.

Pobre Jimin... Él realmente creía que Taehyung era bueno.

Cuando el perro finalizó toda su comida, Taehyung actuó preocupado.

—¿Jimin? ¿Qué es eso que tiene Dasom en la frente?
El pelinegro lo miró confundido, revisando a su mascota.

—No... no tiene nada.
Susurró.

—Revisa bien, mira... justo ¡aquí!
Gritó, alzando un martillo que tenía guardado en su tapado y golpeando con fuerza la cabeza del animal, matándolo. Un grito se escapó de la boca de Jimin, horrorizado, viendo los sesos de su mascota esparcidos por el suelo y sintiendo gotas de sangre en su rostro. Sus manos temblaron con locura mientras veía como Taehyung quitaba el martillo de entre los restos de su mascota, lanzándolo hacia atrás.

—¿P-por... qué?
Alcanzó a susurrar, girando levemente su visión para encontrarse con quien le sonreía como si nada hubiera pasado.

Taehyung rió, parándose.
—Ah... ¿Por qué te lo mereces, quizá?