Solo anhelo tus feromonas [ABO]

Extra 3: Mundo paralelo

Extra: mundo paralelo

Tong Che se despertó. En el momento en que abrió los ojos, fue recibido por el techo blanco como la nieve de la sala, y por un momento, estuvo en trance, sin saber qué día era.

Miró fijamente al techo durante dos minutos antes de que sus recuerdos de antes de caer en coma regresaran.

Se había escapado de casa, llevando su cuchillo.

Bebió cerveza en el lago, diferenció y se cortó las venas.

Entonces, no murió, y parece que se salvó.

Después de un breve repaso, Tong Che de repente levantó su mano izquierda y se la llevó a los ojos.

Metió la mano en su bolsillo y, efectivamente, no había ni rastro del cuchillo.

Sabía que la persona que lo había salvado se lo había llevado.

Tong Che se empujó hacia arriba.

Justo cuando se recostaba en la cama, la puerta de la sala se abrió y entró una enfermera de cara redonda.

Cuando la enfermera lo vio sentado, obviamente se quedó atónita por un momento, y pronto apareció una sonrisa en su rostro: "¡Pequeño, estás despierto!"

Tong Che frunció los labios y replicó en voz baja: "Ya no soy un niño".

"A la edad de trece años, acabas de diferenciarte", la pequeña enfermera se acercó y sonrió, "¿Por qué no ibas a ser un niño?".

Tong Che dejó de hablar. Después de una pausa, no pudo evitar preguntar: "Me he diferenciado en un Omega, ¿verdad?"

"Así es", respondió la pequeña enfermera, poniendo los ojos en blanco, "te has diferenciado en un lindo Omega".

Tong Che bajó los ojos. Sus pestañas temblaron y sus ojos perdieron el ánimo por un momento, pero la enfermera no se dio cuenta.

"Espere un momento", volvió a decir la enfermera, "Llamaré al médico para que lo examine".

Después de decir esto, la enfermera se dio la vuelta y salió de la sala.

Pensando en algo, Tong Che de repente gritó: "Ah... hermana enfermera, me gustaría preguntar; ¿Quién me envió aquí?

La enfermera se detuvo, se dio la vuelta y describió brevemente: "Era un niño Alfa, muy delgado y alto..."

Habiendo dicho esto, la enfermera hizo una pausa, sus mejillas se pusieron rojas y luego continuó: "¡Se veía muy guapo!"

Tong Che fingió no ver el cambio de la enfermera. Frunció los labios y volvió a preguntar: "¿Cuánto tiempo he estado inconsciente?"

"Entonces ..." Tong Che volvió a preguntar, su voz aún más baja, "¿Entonces me ha visitado en los últimos tres días?"

La enfermera hizo una pausa, como si dudara, pero finalmente negó con la cabeza: "Él no ha vuelto a estar aquí".

Parecía tener miedo de que Tong Che estuviera triste y rápidamente agregó: "¡Podría estar demasiado ocupado y surgió algo!"

Tong Che bajó la cabeza, dio una respuesta vaga y no volvió a hablar.

De hecho, no sabía por qué le importaba tanto, si esa persona vino a verlo.

Es solo que su voz todavía resonaba vagamente en sus oídos, preguntándole: "¿Por qué quieres rendirte antes de haber visto el mar?"

No entendió bien esta frase, pero realmente quería verlo con sus propios ojos. ¿Cómo sería una persona que dijera tal cosa?