La ponzoña y la putrefacción predominan en este lugar donde sus enfermedades podrían matar a cualquiera que ose adentrarse en este jardín y el olor es tan nauseabundo que vomitarías sin parar sin respirar hasta que tu cuerpo termine escupiendo bilis y mueras.
-sin duda es un asqueroso jardín, ¿cuánto habrá pasado desde la última vez que vi a nurgle? Igual estará en su lugar de siempre con su caldero.
El sin nombre recorre con tranquilidad el jardín yendo a ver al dios nurgle, tranquilamente podría haberse teletransportado a él pero prefería ver el jardín recordando sus tiempos con él.
-veo que aún conserva las enfermedades que hicimos, les habrá dado un buen uso.
Mientras observaba las cosas putrefactas del jardín el sin nombre llego al caldero.
-no esperaba volver a verte por aquí innombrable
-bueno, hay mucho entretenimiento ahí fuera pero de vez en cuando no está mal salir de tu zona de confort y visitar a un viejo amigo
-¿fuimos amigos?
-ey eso me ofende sabes de entre los cuatro tu me caes mejor además conservas las enfermedades que hicimos en nuestro tiempo. Si eso no significa que me aprecias entonces no sé lo que es.
Mientras decía eso una criatura se le acerca al sin nombre, era un pequeño engendro del jardín de nurgle.
-oooohh mira este pequeño horror, - lo levanta - ¿Quién es una horrorosa criatura eh? Siii tu.
-deja a ese nurglete, si solo vienes a molestar será mejor que te vayas.
-¿puedo quedármelo?
-¡¿Qué?! ¡No! Ni lo sueñes
-ah vamos, déjame quedármelo no vendría mal una mascota en mi territorio vacio.
-tu quisiste tenerlo así, ahora bájalo.
-¿y si te ayudo a crear una enfermedad?
-¿Qué?
-si, déjame ayudarte y a cambio me das este nurglete no es un mal trato ¿no crees?
-mmmmhhhh... está bien solo por esta vez ya que estoy intrigado.
-perfecto es un trato. ¿Comenzamos?
-adelante
Antaño ambos dioses disfrutaban fabricar enfermedades y ahora una vez mas lo hacían justos casi como reconstruir una vieja amistad pero tanto el sin nombre como nurgle ya no sentían nada de su vieja amistad y esto solo era un ganar/ganar, nurgle obtendría una enfermedad y el sin nombre su nurglete además de mantener al dios de la peste entretenido para que pruebe la enfermedad y así poder interactuar con la persona que se encuentra enjaulada al costado del caldero. La diosa enjaulada era isha diosa de la salud de los eldars que actualmente solo sirve como sujeto de pruebas de nurgle aunque se dice que hay un romance extraño y turbio entre ellos pero poco le importaba al sin nombre eso, al final la enfermedad esta terminada.
-muy bien es hora de probarla, isha mas vale que estés preparada.
Nurgle se acerca hacia la diosa y la infecta con la enfermedad, el dolor no se compara a las anteriores veces que isha trato con una peste clásica de nurgle, el tiempo para recuperarse fue mucho más largo de lo que nurgle esperaba por lo que estaba muy impresionado con la nueva creación.
-eso fue impresionante, en verdad es una buena plaga.
-me alegro que te guste, al final no fue un mal trato ¿no?
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Warhammer 40K: Jubius: Dios del principio y el fin
Science FictionEl sin nombre decide actuar pero antes debe reclutar a ciertos individuos secuela de eremes el anti-traidor