Legacy Project - [ Pokémon ]

Un Reluciente Futuro

Nos encontrábamos cerca de llegar a la gran Ciudadela, mientras nos adentrabamos en las entrañas de la majestuosa ciudad presenciamos muchos combates entre entrenadores, hasta que uno en particular llamó mi atención.

—¡Darkrai, usa pulso umbrío! —gritó una conocida voz.

—¡Typhlosion usa carantoña!

Darkrai cayó derrotado, y el victorioso había sido aquel entrenador que vi junto a Kairi mientras buscamos el artefacto, el mismo que me atacó en la cueva, ese era Dai y su retador... ¡Takuto!

—Rápido, debemos irnos de aquí, él fue quien me atacó en aquella cueva —mencioné apresurado y salimos del lugar.

Pero algo de lo que no nos percatamos es que Takuto nos había comenzado a seguir.
Seguimos caminando por la Ciudadela hasta llegar a un enorme palacio, donde se enfrentaban dos entrenadores, una chica de cabello azul claro, ojos de color olivo y de tez clara, llevaba un vestido blanco con retoques azules y dorados, audífonos y unas zapatilla doradas.

Esta se enfrentaba a mi rival en Kalos, ¡Alain!
todo parecía apuntar que ella era la campeona... Amaya.

Después de verlos combatir me acerqué y llame la atención de ambos.

—¡Hola! Alain, cuanto tiempo sin verte —hablé.

—¡¿Satoshi?! Tienes razón, ha pasado tanto tiempo —contestaste con una pequeña sonrisa.

Después de eso hable con la campeona. Nos presentamos correctamente y nos dirigimos dentro del palacio junto a Gou, Koharu y Kairi.
Le mostré el aro y le explique la situación a Amaya, ella me llevó al campo de entrenamiento.

—Bien, Satoshi, si tu vínculo con tu pokémon es tan fuerte como parece ser será muy fácil que lo uses —dijo Amaya.

—Bien, Pikachu, ¡vamos!

—¡Vaporeon usa rayo burbuja! —exclamó Amaya.

—Usemos el poder que se nos confirió... —dije las palabras de mi movimiento z—, no solo eso, necro energía actúa, ¡Necro rayo catastrófico!...

...

Después de todo eso seguimos rumbo a las cuevas, comenzamos a adentrarnos en las oscuras y peligrosas cuevas que conformaban el sistema volcánico de Neos.

Estuvimos un tiempo caminando en las cuevas y las temperaturas variaban, de pronto subían y se presentaba un calor extremo y de pronto bajaban y el frío era demasiado como para congelar agua en cuestión de segundos. Seguimos avanzando por ese laberinto hasta que nos topamos con lo que temíamos, el camino se cortaba por un barranco.

Kairi uso a Togekiss para que nos ayudara a pasar, pero no fue fácil, las corrientes de aire que había dentro de alguna manera se tornaron fuertes, por suerte todos pasamos sanos y salvos.

Continuamos por un buen rato siguiendo por los túneles, nos enfrentamos a muchos contratiempos en el camino. Finalmente estábamos llegando al punto donde nos indicaba el mapa, hasta que escuchamos una voz.

—Alto ahí... —resonó una voz en la caverna.

Todos volteamos a ver de donde venía la voz, frente a nosotros se encontraba Dai, bloqueando la continuación de la cueva.

—Con que tú eres el causante de todo —habló Gou.

—No entienden lo que estoy haciendo aquí, aléjense antes de que tenga que lastimarlos —respondió con seriedad.

Intercambiamos miradas, era un momento de tensión mientras el chico nos miraba por debajo de su capucha, finalmente nos mostró su rostro.

Alejo de su cuerpo la capa que usaba para cubrir su identidad, vestía con una sudadera de un morado intenso, un pantalón rasgado, sus ojos eran de un morado más claro y su pelo era negro.