chapter 1

131 18 2
                                    

—Perfecto, terminamos la clase por hoy, les recuerdo que la próxima semana comienzan los laboratorios, así que les pido que vengan preparados, los controles serán de entrada. —De esta forma el docente daba por acabada la última clase de la semana mientras Doyoung seguía concentrado tomando los últimos apuntes, el resto del salón se retiraba ruidosamente del lugar, escuchándose conversaciones de qué harían durante el fin de semana, de esta forma fue como el joven quedaba prácticamente solo en su puesto. Cinco años habían transcurrido desde que Doyoung decidió irse de su casa y hacía apenas dos años desde que logró su ingreso a la universidad, era uno de los estudiantes más destacados dentro de su carrera, lo que extrañamente llamaba la atención de sus compañeras de clase, sin embargo este no estaba interesado en nada ni nadie, apenas tenía un par de amigos a los cuales frecuentaba muy poco, su tiempo era bastante reducido ya que para solventar sus gastos universitarios debía trabajar en una cafetería luego de sus clases. Era un joven muy callado lo que le daba una imagen bastante misteriosa, siempre iba bien vestido por las costumbres que tomó desde pequeño en su familia, era habitual verlo de camisa y pantalones de tela, con sus zapatos bien lustrados, un peinado algo grotesco y sus infaltables gafas redondas que le quitaban un par de años de encima, el típico nerd de las películas.

Apenas terminó los últimos arreglos en sus apuntes, comenzó a guardar todos sus materiales en su maltratado bolso chequeando cada cierto tiempo su reloj de mano, al parecer estaba justo a tiempo para salir y llegar a la cafetería para tomar su turno.

—Hola Doyoung. —Una dulce voz interrumpió los pensamientos del chico por lo que este alzó su mirada y se encontró con Haneul, otra de las estudiantes destacadas en su curso, una joven muy bella de estatura promedio que acostumbraba a llevar su negra cabellera suelta y vestidos muy coloridos.

—Oh… Haneul, necesitas los apuntes de hoy, ¿verdad? —Doyoung se dispuso a abrir su bolso, cuando la joven lo tomó de una de sus manos y negó rápidamente con la cabeza.

—No, no es eso, yo… quería saber si tienes tiempo ahora. La semana pasada me dijiste que podríamos salir esta. —La chica preguntó bastante tímida, dejándose notar un agraciado rubor sobre sus mejillas.

—Lo siento, no puedo, tengo trabajo. Prometo que será en otra oportunidad. —Respondió el castaño algo distraído y con esa seriedad que solía caracterizarlo, luego de ello no tardó mucho en volver a poner todas sus cosas en orden y salió con algo de prisa del salón, dejando a la chica bastante desilusionada. Doyoung con el tiempo había tomado bastante distancia de las relaciones afectivas, a finales de la secundaria había tenido una novia con la que duró un par de meses, muy pocas veces le pudo dedicar tiempo ya que solía utilizarlo en trabajo, todo esto terminó por dañar mucho a su pareja, por lo que luego de acabar con esa relación decidió evitarlas por completo hasta que al menos pudiera darse tiempo para estar con ellas, así que al estar tan mentalizado en ello, su interés era prácticamente nulo sobre las otras personas.

Mientras caminaba hacia la salida observaba en repetidas ocasiones su reloj, detestaba llegar tarde a cualquier lugar y al parecer esta sería la primera vez que lo haría si no apresuraba su paso. A la velocidad que iba, unos segundos más tarde ya había salido del edificio y se encontraba caminando por el campus hacia la salida de este cuando alguien saltó sobre su espalda y gritó bastante feliz por su encuentro.

—¡Doie! —Era Mark, uno de sus amigos en la universidad, este al parecer también iba saliendo de su última clase, se le notaba bastante sudado, llevaba su buzo puesto y el bolso con el que acostumbraba llevar su cambio de ropa. Mark fue una de las primeras personas en acercarse a Doyoung, si bien no estudiaban lo mismo, ya que él estaba estudiando pedagogía en educación física, este siempre se destacó por ser una persona muy popular y sociable dentro del campus, de hecho fue él quien se acercó al joven Kim luego de verlo en repetidas ocasiones caminando solo por la universidad. Ambos se hicieron más cercanos cuando Mark le ofreció una habitación en su departamento, este al frecuentarlo más, había notado la situación de su amigo, él tenía dos trabajos para poder pagarse un lugar donde vivir y para pagar sus mensualidades, él al tener una buena situación, decidió ayudarlo sin pedirle nada a cambio, en un principio Doyoung no había aceptado su oferta puesto que no quería estar aprovechándose de la amabilidad de alguien más, pero cuando comenzó a notar que el dinero ya no le alcanzaba lo suficiente y su reducido tiempo acortaba considerablemente sus horas de sueño, decidió aceptar su oferta.

Changes | JaeDoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora