Roommate - Luffy y tu

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- Gold D. Roger, el rey pirata dejó descendencia.

- ¡Portgas D. Ace será ejecutado! Por todos los crimenes que ha cometido.

La guerra se escuchaba de fondo, disparos y gritos eran los que lo acompañaban. Ace deseaba morir. No quería que esto sucediera, su familia estaba ahí para salvarlo.

- ¡Váyanse de aquí! ¡No les pedí que me salvaran! - Grito con toda su fuerza, hasta sentir el ardor en su garganta. - Solo váyanse... Por favor.

- ¡Ace! - entre todo el ruido pido distinguir la voz de su hermano - ¡Vine a sacarte de aquí! ¡Solo espera!

Luffy estaba ansioso, podía sentirse, sus ojos demostraban un sin fin de sentimiento mientras corría y esquivaba a aquellos que lo querían detener.

Luffy lo salvó, lo sacó de ahí, estaba feliz. Ace peleaba a su lado.

Pero nada tiene un final feliz. Realmente no hay un final feliz.

La sangre manchó sus dulces manos, no podía creer que Ace estuviera muerto. Ver su pecho calcinado, restos de el en sus manos.

¿Por qué hiciste eso Ace?

Tu no debiste hacer eso, no debiste.

(...)

- ¡! - Respiré con dificultad, sentía mi pecho ardiendo. No podía respirar.

Intenté pararme pero solo termine cayendo. Respiré profundamente para buscar el aire que me faltaba.

- ¡¿Que paso?! - Entro Luffy con prisa.

Cuando me vio termino en el suelo conmigo intentando ayudarme. Mirarlo solo me hizo recordar ese extraño sueño, tan... Amargo.

Lo abracé, y lágrimas empezaron a desbordarse, Luffy solo me abrazó mientras me acariciaba el cabello.

- Por favor, respira.

Me había olvidado de respirar, cerré los ojos olvidando lo que pasó, y por fin pude calmarme.

- ¿Ya estás bien?

- Ah... Sí, gracias... Estoy bien. - Me ayudó a sentarme en la cama.

- ¿Que pasó? - Sus ojos solo demostraban preocupación hacia mi, y mi corazón solo pudo calmarse más.

- Tuve una pesadilla, pero fue algo... Tan real.. pero también irreal. - Suspiré.

- Todo fue un sueño, realmente me asusté al escuchar ese golpe, pensé que te había pasado algo.. - Me abrazo.

- Gracias por venir a verme, pensé que tenías el sueño pesado. - Reí.

- Cuando es algo peligroso mi sueño se vuelve ligero, más si algo te puede llegar a pasar. - Me sonrió.

Miré la hora y faltaba 3 horas para las 6

- Hay que dormir, falta mucho para ir a hacer nuestros deberes. - Lo voltee a ver.

- Se me fue el sueño shishishi

- Ahora que lo dices, realmente no tengo ganas de volver a dormir ahora, deberíamos ir a jugar un rato, ¿Te parece?

- ¡Si! Iré a encender la consola - Y así como lo dijo se fue.

Un suspiro salió de mi boca, ese sueño, no, esa pesadilla fue muy real, Pero... ¿Por qué no hice nada? ¿Por qué solo estuve a lado de Ace sin ayudarlo a escapar?

Luffy, verlo en ese estado solo hace que mi corazón se rompa, odio que sufra, se veía tan devastado. ¿Dónde estaba esa dulce sonrisa?

- ¡____! Ya ven!! - Gritó Luffy desde la sala.

- Ya voy, no grites, si no van a venir a tocar la puerta!

Miré mi habitación por última vez y cerré la puerta.