Parte 39

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Patri: sabes que desisto como madre

Leila : fenomenal, no la he tenido nunca para intentar tenerla ahora

Patri: lo siento, sabes que no quería ir por ahí. Ya sabes que cuesta hacer esto. Leila perdóname, ha sido un impulso. Es como si estuvieses ajena a todos y con todos 

Leila: tranquila, no tuve su cariño puedo vivir sin el tuyo, por cierto yo no necesito una madre necesito una amiga 

Patri: pues joder no lo pongas así de difícil conmigo, te conozco y sé que no estas enfadada por esto, y no soy más que una amiga y lo sabes, soy como tu hermana

Leila:  lo estas empeorando 

Patri: no lo empeoro porque sé que tengo razón y más aún cuando no me has pegado, cuando te enfadas de verdad pegas a la persona y yo estoy viva

Leila: para mi mala suerte sí. Mira Patri no quiero empeorar las cosas que tal si olvidamos todo

Patri: sabía que muy cabreada conmigo no podías estar

Hacen su saludo  

Laia: que hacéis ambas aquí a las 10:30 de la mañana 

Leila: entrenar, porque no estás con Misa. O es que acaso te has cansado ya de ella

Laia: que dices tú ahora. OS VAIS A CALLAR. Y no , con Misa voy bien para tu mala suerte pero que yo sepa eso no es de tus asuntos

Patri: ya parad, Leila ha desayunar, y tu Laia ve con Misa y despertad al resto si es que no se han despertado aún que ya es tarde. Y Olga nos iba a llevar a un mirador y por la noche a un antro de la zona poco visitado 

Laia va a su cuarto y le dice a Misa que vaya despertando a las de la planta de arriba, que ella va a despertar a las de su planta 

Leila: Patri, no la soporto más. Es insufrible. Misa aquí Misa allá todo el día juntitas. Estoy segura que algo falso hay detrás de eso 

Patri: desde cuando te importan las relaciones de los demás?

Leila: no me interesan, no me gusta esa

Patri: es cosa mía o estás celosa de Laia

Leila: antes muerta. Para estar celosa de ella tendría que gustarme Misa y ese no es el caso.

Patri: estás segura que no hay alguien más en mente Leila Ouahabi

Leila: tranquila, tu compañera de copas siempre estará disponible para cuando quieras ahogar tus penas, no hay nadie en mi vida actualmente. Sabes que no creo en esas gilipolleces del amor desde hace años 

Patri: ya, seguro 

Laia: va arriba todas, que tenemos desayuno abajo

Van saliendo una a una, Patri y Leila se duchan en el cuarto de Patri para evitar confrontaciones con el resto, al estar ya muy despiertas bajan enseguida de nuevo a la cocina y Leila se come un plátano

En la planta de : 

Ona: abro los ojos ante los gritos de Laia, como grita la tía. Es increíble grita igual que en los partidos no se relaja, tengo que decirle a Misa que la relaje. Me giro y lo que veo no me lo podía creer: como es posible que se haya levantado cuando hemos dormido tan poco. Tan pronto como digo eso su imagen me vuelve a la cabeza y sus palabras retumbaban en mi cabeza. No estaba preparada para mirarla de cerca a los ojos, y menos a Mapi o a Ingrid la que hemos liado. Desde cuando yo Ona Batlle ruego que me besen. Esto va ha ser una tortura. Ahora a desayunar fuera a ver lo que nos encontramos . Se cambia y se prepara 

En la planta de 

Mapi:

Durmiendo con mi primera enemigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora