"Nunca te mal influenciaría a tí."

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-Eres demasiado lenta, Potter.- Me dijo Malfoy.

Después de una larga, muy larga, explicación sobre lo que conllevaba ser subcapitana, todas las responsabilidades y advertencias nos pusimos a entrenar. En resumen, Malfoy sería quien dirigiría todo y no podría llevarle la contraria, además de obedecerle en todo lo que esté me pidiera, cosa que no pensaba hacer y le había dejado bien claro.

Para calentar comenzamos haciendo unas carreras de un lado a otro del campo de entrenamiento y como era de esperarse, Malfoy las ganaba. Al fin y al cabo el era un buscador y era más rápido que yo.

-Aham, ¿vamos a hacer algo más o piensas estar toda la mañana haciendo carreritas?.

-Me parece que alguien se a picado un poco.

-Buf, no veas.- Respondí con notable sarcasmo.

Nos dispusimos a practicar el siguiente ejercicio que consistía, como no, en velocidad. Los dos teníamos que perseguir una snitch dorada.

-Si yo la cojo primero tendrás que hacer todo lo que mandé por una semana. Si es al revés yo tendré que hacerlo.

-Trato hecho.- Dije estrechando su mano.

No me iba a dejar vencer tan fácilmente. La snitch salió disparada hacia arriba y yo tras ella, dejando a Malfoy un poco detrás. Di un brusco giro mientras bajaba y giraba al rededor de un aro de quidditch, Malfoy no tardo mucho en alcanzarme y le dio una patada a mi escoba haciendo que me desviará un poco. La snitch comenzó a bajar nuevamente, ahora casi rozando el suelo. Alcance a Malfoy y golpee fuertemente su lateral con mi hombro, este no tardo mucho en devolverme el golpe. Y así, sucesivamente, hasta que su escoba freno en seco y este me agarro de la sudadera llevándome disparada con el. Los dos salimos volando hasta caer en el suelo, este encima de mi, haciendo que yo me llevará todo el golpe.

-¿Se puede saber que mierdas has hecho? ¿por qué has frenado la escoba en seco?.- Dije mientras me quejaba en el suelo.

-No sé que a pasado.

Este comenzó a incorporarse hasta dar con mi cara. Se quedó algo pasmado y podía jurar que tenía las mejillas de un pequeño color carmesí.

-¿Te vas a quitar de encima o te quito de una patada?.- Basto que dijera esto para que el reaccionará y se levantará sentándose en el suelo.

-Ahora llévame a la enfermería, me duele todo.- Dije mientras me incorporaba para sentarme en el suelo también.

Este rodo los ojos y me cogió al estilo princesa.

-Me siento como una recién casada.- Dije bromeando por la forma en la que esté me cargaba.

-Lo que tú digas, Potter.

Gracias a las maravillas de la magia, la enfermera no tardo más de 10 minutos en curarme.

Cuando salí Malfoy se encontraba apoyado en la pared con los brazos cruzados.

-¿A donde crees qué vas?.- Pregunto este cuando me vio pasar por delante suya.

-Se acabó el entrenamiento por hoy, Malfoy.

Dicho esto me dirigí a la habitación de mi querido hermano.

-Estoy agotada.- Dije mientras me tiraba en su cama.

-¡Ah!- Grito Ron incorporándose de la cama para mirarme con cara de puro espanto.- ¿Como has entrado?.

-Por la puerta.

-Oh, hola Mar.- Dijo Harry entrando por la puerta de la habitación.

-Hola.

-No me ignores, casi me da un paro cardíaco por tu culpa.

Quiero ser tuyo-Draco Malfoy (Enemies to lovers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora