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{LA HUIDA DE LOS DRAGONES VERDES}

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"El tiempo es un amigo cruel, que nos arrebata lo que más queremos"

AegonII Targaryen
11:59 pm de la noche anterior

Hablaria con mi padre, jamas le habia pedido nada y por primera vez le pediria algo, casarme con Dhalia, que detuviera aquella boda.

Me habia probado el vestuario que mi madre habia mandado para mi asistencia a la boda.

Camine por los pasillos los cuales los senti demasiado grandes y eternos, cuando llegue me pare en la puerta de esta, suspire unos minutos antes de abrir y pasar.

La habitacion de mi padre siempre me habia parecido un lugar lugubre, no solia entrar casi nunca ahi, era como estar en medio de un funeral, la imponente maqueta en la cual mi padre habia prestado mas atencion que a sus hijos aun estaba ahi solo que incompleta, el ya habia perdido las ganas de continuar con ella .

Habia soñado día y noche con destruirla

Eliminar esa maldita maqueta.

-Buenas noches-hable mientras caminaba, su habitacion estaba sumida en la oscuridad, solo entraba la luz de la luna.

No obtuve respuesta asi que me aproxime mas a su cama.

-Buenas noches, necesito hablar con usted pa...majestad-hable .

¿Me estaba ignorando?, que falta de respeto.

Toque su hombro y lo movi ligeramente, tenia los ojos abiertos, estos ya no expresaban vida,no respiraba.

El rey habia muerto.

 Había fallecido por la enfermedad que lo había aquejado por tanto tiempo, y sabía que mi madre y mi abuelo aprovecharían la oportunidad para intentar colocarme en el trono, los habia escuchado, los murmuros del castillo tarde o temprano terminan por descubrirse.

El tiempo jugaba en mi contra, no podia dejar que vieran que mi padre habia fallecido y por otra parte tenia que buscar la forma la cual evitar aquel matrimonio.

Que se joda el maldito tiempo.

Me encontraba en una encrucijada, ya que yo no quería ser rey y tampoco deseaba traicionar a mi hermana y tambien tenia que encontrar la forma de evitar a toda costa aquella union.

Piensa Aegon, piensa.

Mi mirada se dirigio a la maqueta de mi padre, me acerque a verla, vi los tejados de la fortaleza, observe por minutos este, se me ocurrio una idea, por primera vez ame que esa maqueta existiera.

Con fuerza moví un armario y lo coloque contra la puerta, moví  varios objetos mas para que cuando intentaran abrir la puerta no puedan, una vez listo esto mire a la cama donde se encontraba el cuerpo.

-Espero te rencuentres con ella- tome la corona del rey - con Aemma-dije suspirando para luego acercarme a la ventana, abri esta de par en par, vi que si daba un paso en falso podria perder la vida, tome valor y con cuidado camine por la orilla hasta estar frente a otra ventana, esta siempre estaba abierta, la habitacion de Helaena.

Entre a su habitacion, ella estaba sentada en su pequeño mueble mientras tejia una tela negra con hilos dorados.

-¿Que haces aqui Aegon?-pregunto ella levantandose sin apuro, dejo su tejido a un lado

-Necesito que te pongas tu mejor vestido hermanita, no tenemos mucho tiempo-dije hablando casi en susurros -Padre murio, ¿Confias en mi?-

-Oh- dijo Helaena pero en su mirada no hubo tristeza, solo lastima-Confio en ti- contesto 

-Bien, mientras te cambias yo buscare algo para lograr salir de aqui sin que se den cuenta-hable y empece a buscar alguna capa entre las cosas de su armario, encontre algunas, no me di vuelta hasta que ella me aviso que estaba lista, se habia puesto un vestido verde claro

-Princesa Helae...-Criston Cole habia entrado a la habitacion y se quedo mirandome a mi y a mi hermana, yo traia la corona de mi padre entre mis manos y Helaena estaba muy arreglada para aquella hora-No preguntare, pero...- hizo un gesto cerrando los ojos refiriéndose si es que el rey habia muerto.

-Si-vi la expresion de Ser Criston al verme con la corona , el pensaba que yo reclamaria el trono-No, no quiero que me detenga Ser, necesito que mañana logre atrasar que entren a los aposentos de mi padre ¿Puedo contar con usted?- pregunte.

-Ser... Se lo ruego-hablo Helaena al ver a Ser Criston dudando.

El asintio y luego yo y Helaena nos pusimos las respectivas capas, logramos llegar hasta pozo dragon donde ella monto en Dreamfyre y yo en mi querido Sunfyre.

La noche era oscura y fría.Mientras volábamos, el viento soplaba muerte en nuestras caras, y el frío calaba hasta los huesos. No podíamos permitir que las inclemencias del clima nos distrajeran de nuestro objetivo.

Helaena y yo volábamos en silencio.

Nuestros dragones se elevaron mas en el cielo, las escamas brillaban bajo la luz de la luna. El viento frío azota mi cabello y me hace estremecer, pero me mantengo firme en mi asiento.

Pero a medida que nos acercábamos a Rocadragón, sentí una mezcla de alivio y tensión.

Llegue hasta el puente donde nuestros dragones aterrizaron, baje del mio y cuando iba a ayudar a mi hermana esta bajo por si sola, se sacudio y me sonrio, antes de que yo hiciera algo ella tomo mi mano.

-¿Aegon?¿Helaena...?-dijo Jace que por algun motivo se encontraba ahi -Supongo que vienen a entregarnos las invitaciones para su union personalmente-

-Quiero hablar con tu madre-dije firme.

-¿Para?-pregunto Jace.

-Decirle que eres un idiota-conteste y Jace giro los ojos, Helaena apreto mi mano -Lo siento, no estoy de humor, necesito hablar con Rhaenyra urgentemente-hable y el asintio ligeramente.

Su mirada se posiciono en mi mano unida junto a la de Helaena, sus pasos eran tranquilos, decidi seguir el paso de misma forma, mi corazon latia muy fuerte y estaba aterrado pero no queria que mi hermana me viera de aquella forma.

Jacaerys nos guio hasta el salon de Rocadragon, ahi estaba la imponente silla de piedra, Jace nos dijo que esperaramos ahi, yo traia la corona escondida bajo la capa, quite la capucha dejando libre mi cabello, luego me acerque a Helaena y le quite esta, ella sonrio, acaricie su mejilla.

-Todo estara bien, tu hermano te prometio algo y lo cumplira-sonrei y ella tambien lo hizo.

-¿Tu estaras bien?- pregunto ella.

-Lo estare, por primera vez en mi vida se que debo de hacer y que estoy haciendo lo correcto-conteste y ella asintio.

-Aegon,¿Que sucede?, cuando te dije que contabas conmigo para todo no me referia que me buscaras a las tres de la mañana-dijo en tono de broma- se habia puesto un vestido rojo, venia acompañada por Daemon-Mi dulce hermana Helaena, que gusto verte mi niña- dijo ella sonriente .

No sabia como empezar, si alguien queria a Viserys era Rhaenyra, si a alguien queria Viserys fue a su hija.

No sabia como empezar, si alguien queria a Viserys era Rhaenyra, si a alguien queria Viserys fue a su hija

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Flores de fuego - Aegon Targaryen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora