𝘿𝙖𝙙, 𝙡𝙤𝙤𝙠 𝙖𝙩 𝙩𝙝𝙚 𝙘𝙡𝙤𝙨𝙚𝙩! ✧ jaywon

세번째

Confundido miró temeroso hacia la salida y su cuerpo se paralizó viendo como el hombre que decía ser el "coordinador" tenía la mascarilla baja y le sonreía de oreja a oreja moviendo su mano de un lado al otro.

Una mano sobre la suya lo hizo sobresaltar y soltar un grito, alarmando a los pocos maestros en compañía de niños del lugar.

— Señor Yang. ¿Se encuentra bien? — el chico rubio lo miraba preocupado. — Le daré algo de agua, por favor venga.

Algo atontado siguió al chico y se sentaron luego de ingresar a una oficina, Jake le tendió un vaso de agua y lo aceptó.

— Gracias y disculpa por lo de antes... — estaba avergonzado ahora.

Una sonrisa del contrario se dejó ver y negó suavemente.

— Al contrario ¿Lo asusté al tocarlo sin previo aviso? Lo vi algo distraído y traté de llamar su atención, lo lamento si lo sobresalté a tal punto. — Jake sentó frente a él y apenado se disculpó.

Seguro había actuado como un paranoico... Pero estaba asustado a mil.

— No es eso coordinador, solo que vi a alguien que me dio una mala espina afuera. — iba a averiguar quién era ese tipo ahora, necesitaba sacarse ese temor de encima.

La mirada del rubio lo examinó.

— Solo llámame Jake. — le corrigió y su mirada se volvió confundida. — ¿Dijiste alguien afuera? ¿Eso siquiera es posible...?

No estaba entendiendo nada, a ese punto no sabía quién era el más confundido, si él o Jake.

— ¿A qué te refieres? Cuándo llegué con mi hijo un tipo diciendo ser el coordinador se me acercó. — se detuvo al sentir escalofríos. — Estoy preguntándotelo por si lo conoces, ese hombre pudo haber estado en mi casa anoche, tanto mi hijo y yo estamos asustados. — finalizó y miró al callado chico de cabellera rubia frente él.

La cara del notable extranjero (por el acento) en frente suyo era un dilema, el rostro tenía una mezcla de confusión, enfado y miedo.

¿Qué pasaba?

— Emm... Señor Yang, el único coordinador de la escuela soy yo. — el rubio le dirigió una mirada temerosa. — Nunca esperamos a los padres afuera, mucho menos tenemos trabajadores en ese lugar... Aparte de los de seguridad, claro.

Su mente quedó en blanco. ¿Qué no conocían a ese hombre? ¿Entonces quién demonios era y por qué lo molestaba a su hijo y a él?

— No puede ser cierto...

Jake abrió sus ojos con un notable miedo que pudo identificar.

— ¿Usted vive por la calle Park? Siendo exactos... ¿En la casa "Dad Park"?

Dad Park, ahora que recordaba ese era el apodo de la casa. Al comprarla recuerda haber oído al antiguo dueño referirse así sobre el lugar.

— Sí... Compré la casa hace dos semanas y me mudé ayer por la mañana.

Un suspiro salió de Jake y lo miró con la sonrisa más fingida del mundo.

— Bien, no se espante pero el anterior dueño... ¿Sabe por cuántos días se quedó viviendo ahí? — el rubio parecía estar intrigado.

— El anterior dueño dijo que vivió ahí con su familia durante dos años.

El extranjero abrió los ojos a más no poder, estaba sorprendido evidentemente.

— Ha... Eso es mentira, el señor Lee vivió ahí con su familia solo por seis días... Pero según oí al séptimo día decidió irse y vender la casa luego de que su mujer tuviera un aborto espontáneo. — en ese momento Jake sacó un folder del escritorio y le mostró unas fotos. — Fue horrible, la señora Lee dijo que le habían arrancado a su hijo desde adentro, que había sido un demonio...

Su cuerpo completo tembló al ver dichas imágenes, se veía a una mujer con una vestido de flores cubierta de sangre y llorando mientras acogía su vientre, también al señor que le vendió la casa totalmente furioso y con unos dos niños detrás de él, ambos lloraban. Todos rodeados de policías y vecinos.

Su mente en blanco no sabía que pensar. ¿Un demonio le había arrancado a su bebé? Tan solo pensarlo su estómago se removió.

— Pero eso no es todo, según los abuelos de la zona esa casa existe desde la segunda guerra mundial, oí que supuestamente durante esos años un hombre fue torturado y asesinado ahí. — Jake terminó de hablar y alzó lo hombros confundido.

— Entonces... ¿Penan? — estaba asustado a mil.

— Sí, oh bueno, eso dijo la Señora Lee, dijo que amanecía golpeada y que molestaban a sus hijos, decía que era por un demonio, tan solo pensarlo me asusta.

¿Amanecía golpeada y que molestaban a sus hijos? Mierda... Todo parecía tener sentido y le aterraba la sola idea de que sea así.

— Disculpa Jake pero... ¿Por qué preguntaste en dónde vivía?

El rubio lo miró unos segundos y suspiró rendido cayendo suavemente en su escritorio.

— Los hijos del Señor Lee estudiaban aquí y su madre al traerlos dijo que vieron al mismo "coordinador" afuera. — pausó y lo miró fijamente. — Pusimos guardias por eso mismo pero ese "coordinador" nunca más apareció y los niños tampoco volvieron a estudiar.

Debía admitir que ahora tendría un horrible temor instalado en el corazón por su hijo, no sabía que debía hacer.

— Mierda... Ahora no tengo la más mínima gana de volver a mi casa. — en sarcasmo soltó una risa y Jake avergonzado negó rápidamente.

— Creo que lo asusté aún más ¡lo siento mucho! Solo me parece tenebroso el lugar, suelo pasar por ahí al volver del trabajo y me genera un inexplicable escalofrío caminar cerca. — el rubio sonrió y posó su mano en su hombro. — Tenga cuidado si vive ahí, muchas familias no soportaron estar ahí por más de dos semanas.

— No te preocupes, por ahora todo está tranquilo pero tendré cuidado. — mintió claramente, pero no iba a decirle a un "desconocido" que prácticamente tenía moretones en el cuerpo y que había visto a su hijo hablando con la nada, no podía.

— De igual forma... Toma. — un pequeño papel fue dejado en su mano. — Es mi número, si sucede algo no dudes en llamarme, me agradas.

Sin oponerse recibió el número y salió del lugar, dirigiéndose a su casa.

Tendría que cocinar el almuerzo y esperar que su hijo llegue.

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Holii aquí nuevo cap, estuve full ocupada y no pude actualizar seguido, tampoco estaba bien emocionalmente y no me daba la imaginación para escribir un capítulo. Ahora estoy algo mejor y trataré de ser constante, gracias a los que leen. ☺️✨