Mi vida en rosa (GAP The series fanfic)

Capítulo 10

SAM

El viaje de regreso a casa había sido sumamente agotador, me preocupaba que Mon, se sintiera mal durante el vuelo, pero el médico nos aseguró que sería seguro viajar.

Ambas estábamos ansiosas por saber si mi esposa estaba embarazada, sin embargo, no lo sabríamos hasta dentro de dos semanas más y eso me estaba volviendo loca de los nervios.

—¿Tenemos que ir a trabajar hoy? Quedémonos a descansar un poco más —le digo con un puchero a mi hermosa esposa que insistía en despertarme

—Sam, llevamos mas de dos meses fuera y hay mucho trabajo pendiente. El pobre de Kirk, está que ya no puede entre los preparativos de su boda y el nuevo proyecto. Vamos —me mueve

—Él quería casarse, así que soporte

—Sam, es tu empresa, eres la CEO, debes estar en esa junta, anda. Levántate o no habrá sexo esta noche —abro los ojos de golpe y me levanto de un salto. No soportaría un castigo así, ya lo había vivido y era horrible.

—Ya estoy despierta, anda vamos a bañarnos —tomo a mi esposa de la mano y entramos a la ducha.

Le quito la ropa a mi esposa y luego me desvisto rápido. Quería hacerle el amor antes de irnos.

—Amor ¿No crees que se ven mas grandes? —me quedo viendo a sus pechos que se veían muy diferentes 

—Teerak, no necesitas una excusa para mirar y tocar mis pechos, yo creo que están… oh —al momento en que se gira al espejo se queda viendo intrigada. Me coloco a su espalda y ambas inspeccionamos —es cierto, se ven… diferentes ¿crees que sea por el tratamiento?

—No sé si sea el tratamiento, pero me gusta —no podía retirar mi vista de sus hermosas montañas, si algo me volvía loca, eran sus perfectos pechos.

—Sam, deja de mirarme así —me saca de mi ensoñación. Ya me imaginaba con sus hermosos pechos en mi boca

—Yo… lo siento, pero de pronto me dio hambre —le hago una mirada sugerente y llevo mis manos a sus pechos.

—¡Ay! ¡Duele! —se queja, lo cual provoca que me asuste

—Amor, perdón. ¿Apreté muy fuerte?

—En realidad no, pero creo que están muy sensibles —me dice sobando lentamente —Duele —ella hace un tierno puchero y unas lágrimas salen de sus ojos

—Tal vez deberíamos ir al médico, no me gusta verte sufrir así

—No creo que sea necesario, tal vez me va a bajar pronto y por eso el dolor… eso significaría que —me da una mirada triste y gacha la cabeza

—Hey, no pensemos en eso. Aún es pronto, ¿de acuerdo? Solo han pasado tres semanas desde que hicimos la inseminación

—Pero ¿y si no funciona?

—Lo volveremos a intentar todas las veces que sean necesarias hasta que logremos ser madres —le digo con una sonrisa

—Te amo, Sam

—Te amo, Mon. Ahora, vamos a la ducha. Cuidare de no lastimarte —ella me asiente sonriendo y juntas entramos en el agua.

Me coloco a espaldas de mi esposa y con cuidado comienzo a dar masajes por su espalda enjabonando cada rincón de su hermoso cuerpo.

Paso mis manos lentamente por sus pechos cuidando no hacer presión, ella se remueve un poco, pero me hace seña de continuar a lo cual obedezco.

Mis manos siguen su recorrido favorito por el cuerpo de mi esposa, llegó a su vientre y acarició suavemente. Ojalá aquí este nuestro bebé.

Comienzó a besar su cuello y ella se remueve en busca de más contacto. Una de mis manos se mueve hasta su entrepierna y la noto extrañamente más excitada de lo normal, pero me encanta.

Doy caricias leves a su entrepierna disfrutando del deleite y jadeos que ella me brinda.

—Ahh… Sam

Continuo besando y acariciando su intimidad, mi esposa se retuerce de placer bajo mi mano provocando que quiera hacerla sentir aun más.

Lentamente introduzco dos dedos en su interior y ella hace más espacio, sé que quiere más, así que le complazco

—Así amor… así… ahh

Cada jadeo hace que me excite aun más, así que comienzo mis embestidas rápido. Quiere que llegue pronto.

Mis embestidas son rápidas, pero precisas, con mi pulgar, acarició su clítoris provocando más placer en ella. Sus caderas se mueven al compas de mi ritmo y sé que está apuntó de llegar al clímax.

—Ahh… Sam…Ya casi… un poco más… ahh

—Te amo Mon —Mis palabras parecen causar efecto en ella y siento como se corre con mis dedos dentro de ella.

Poco a poco disminuyó la velocidad y salgo de ella. La acomodo frente a mi y le doy un sentido beso.

—Te amo, Teerak.

Volvemos a nuestra sesión de besos y al cabo de unos minutos nos damos prisa para ir trabajar.