¿Estas bien?

285 19 2
                                        

Pablo POV

No dormí por estar pensando en el beso que Loreto y yo nos dimos, fue algo que no imaginé que fuera a pasar tan rápido.

Estaba en el entrenamiento, corrí hacia los chicos para contarles, ya que esto no me lo podía callar.

(........)

Ferran—Entonces... ¿estás muy enamorado de ella?

Pablo—No sabes cuánto, deseaba que volviera y cuando volvió, fue algo tan mágico.

Balde—Giuuu, nunca te había visto tan pegajoso, cursi y enamorado.

Pedri—Así pasa cuando uno tiene novia.

Pablo—Pero no es mi novia.

Pedri—Pronto lo será.

Marcos—¡Torres! ¿Tú porque tan desconcentrado? ¿En que piensas o que?

Torres—En nada, en nada.

Torres soltó una pequeña risa y pudimos deducir que le había pasado algo con una chica, porque siempre era lo mismo.

Ansu—¿Qué pasó ayer en esa fiesta?

Torres—¿Cómo saben qué pasó algo?

Ansu—Porque te conocemos.

Pablo—Bueno con lo borracho que estabas, de seguro te acostaste con una cualquiera. Loreto, en serio que se la pasó preguntándome porque la tratabas tan mal.

Torres volvió a reírse pero esta vez me molesto.

Pablo—¿Por qué te ríes de ella?

Torres—No me estoy riendo de ella, ¿por qué piensas que la odio?

Ferran—A ver... qué todos nos hemos dado cuenta de cómo tratas a esa chica, es evidente. Pero bueno si Pablito está con ella, pues... no le vas a poder decir nada.

Torres—¿Cómo? ¿Están juntos?

Pedri—Se besaron, en la fiesta de ayer, pero lo van a estar, no creo que falte mucho.

Torres—Mereces a alguien mejor, Gavi.

Pablo—Deja de hablar ¿si? Tú siempre tan negativo.

Xavi—¡Chavales! A entrenar.


Loreto POV...

¿Cómo lo iba a ver a la cara? ¿Por qué me bese con Torres? Toda la noche me quede pensando en lo qué pasó en tan solo una noche, estaba tan bien con Pablo, y luego... luego paso algo que no imagine nunca.

Pablo me había llamado para ir a verlo a entrenar, y le dije que si, tenía que hablar con él, pero no quería ver a Torres, no podía. Me puse unos pantalones y una hoodie y salí de mi casa.



Esperé a Pablo afuera de mi coche, no quería entrar al club sola. Mi cara no era la mejor, estaba seria, ni aunque hiciera una sonrisa forzada, se me iba a quitar esta carita.

Pablo—Oye... pero si solo nos besamos, tampoco es para que traigas esa cara.

Pablo apareció a lado mío y lo único que hice fue sonreír pero más bien parecía cara de tragedia.

Pablo—¿Estas bien? Digo... por la cara que traes.

Loreto—Ahh, si, no dormí es todo.

Pablo—Yo tampoco pude dormir, que me la pase muy bien contigo.

Loreto—Si, Pablo... yo...

Pablo—¿Te parece si saliendo vamos por un café? Es que ahora tengo que volver adentro.

Loreto—Claro, si, vamos.






Caminábamos por los pasillos para llegar a la cancha, cuando alguien me llama por teléfono.

Pablo—¿Vienes?

Loreto—Ahora te alcanzo, voy a contestar la llamada.


Pablo solo asintió con la cabeza, y yo me quede en el pasillo, con la llamada en pausa, por que no sabía quién era.

Loreto—¿Hola? ¿Quién es?

Torres—Pues muy amiga de Pablo, no pareces.

Una voz muy conocida y que al instante me hizo girarme, estaba enfrente de mi.

Torres—Llegas como si nada, y él montándose películas en su cabeza, sin saber que tú yo ayer, tuvimos sexo.

Loreto—Eres un idiota, ¿qué quieres?

Torres—Que hablemos de lo que va a pasar con nosotros.

Loreto—¿Con nosotros? Con nosotros jamás va a pasar nada, fue un error, yo ya estaba pasada de copas.

Torres—Eso dicen todas, tú querías, y yo también.

Loreto—Eso no es cierto, yo al que quiero es a Pablo.

Torres—Lastima... que el encanto le va a durar muy poco.

Loreto—¿De qué hablas?

Torres—Yo le puedo decir todo lo que hicimos, pero... no lo voy a hacer. Sería una pena perder a un buen amigo, y hacer que le vaya mal, por culpa de una niña que solo se está aprovechando de él.

Loreto—¿Pero por qué dices eso? ¿Por qué piensas que yo me aprovecho de él?

Torres—Porque se como te aprovechaste de Jaõ.

Loreto—¿Tú como sabes de él? ¿Y por qué sabes tantas cosas de mi?

Torres—Estas en la boca de todos, yo se lo que le hiciste, y porque terminaron. Lo utilizaste para tener más seguidores, quisiste que te invitara a todas sus fiestas de lujo, para que luego te pasara, lo que te paso, y que nadie sabe, más que unas cuantas personas.

Loreto—Que hijo de puta eres, en serio. Tú que sabrás de mi relación con el, yo jamás me aprovecharía de la gente, cuando yo lo conocí yo ya era parte de este medio, es más, lo llevo siendo desde antes que el. Y lo que me paso, no fue porque yo lo quisiera, un hombre tiene más fuerza que una mujer, y nadie me escuchó, tú no sabes nada de mi, y el que te haya contado esa historia está mal. Pero si te mueres por contarle a Gavi, ve y dile, no seas maricón y no me estés amenazando, anda, y así arruinan su amistad de años.

Pablo—¿Que no me quieren contar?

Pablo volvió a aparecer en los pasillos y Torres y yo solo quedamos mirándole.

Loreto—¿No estabas en la cancha?

Pablo—Si, pero venía por mi termo y a ver si ya estabas lista, pero te encuentro aquí con Torres y pues...

Torres—Lo que no te queríamos contar, o bueno si lo íbamos a hacer, es que Lore y yo ya hicimos las pases ¿verdad que si?

Loreto—Ahh, si, mira, nos dimos cuenta que ya estamos mayorcitos para peleas y no se, pues por el bien de todos nos debemos de llevar bien.

Pablo—Hasta que maduras Torres, pensé que todavía le querías hacer la vida imposible a Loreto.

Torres—Eh... yo me adelanto, ahorita los veo.


Me quede a solas con Pablo, y simplemente me quede mirándolo.

Pablo—Si te hace algo, me lo dices, no le creo su comportamiento tan repentino.

Loreto—Tú no te preocupes.

Pablo—Claro que me preocupo, como porque te querría, si no estoy para cuidarte.

Pablo se acercó a darme un abrazo y un beso en la frente.

Loreto—También te quiero.

Maldigo el episodioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora