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"Vuelve a dormir", Hermione escuchó a Severus decir con firmeza después de que ella se desplomó de su cuerpo y se sentó en la cama.

"Estoy bien", dijo, con la voz medio apagada en la almohada.

Ella sintió que él levantaba la ropa de cama sobre sus hombros.

"Vete a dormir", dijo de nuevo en un tono de finalidad. "Los elfos domésticos traerán el desayuno. No tienes clases hasta pasado el mediodía; No hay razón para que te levantes".

Quería discutir, pero estaba cansada, incluso con las pociones. Probablemente había empujado demasiado lejos el día anterior.

Ella asintió de mala gana y comenzó a quedarse dormida antes de que él saliera de su habitación.

Sabía que tenía que enfrentarse a él, decirle que no iba a cambiar de opinión con más pociones, pero era más fácil no hacerlo.

No era una pelea que ella quisiera tener con él; no mientras vivían en lugares cerrados, y ella se estaba preparando para tomar sus NEWT. Si él iba a estar brutalmente enfurecido y decepcionado con ella, ella preferiría que sucediera cuando se fuera y no tendría que quedarse y soportarlo frente a toda la escuela.

Esa era la excusa que se daba cada noche cuando aceptaba las pociones sin decir una palabra, y cada mañana cuando se despertaba en su cama.

Era mejor así. Una vez que terminara de enojarse, se alegraría de que no pasaran sus últimas dos semanas en Hogwarts involucradas en una guerra fría.

Ella no le dijo que su sangre era casi translúcida, o que su corazón se aceleraba casi constantemente y la hacía sentir que no podía respirar adecuadamente.

No quería que las cosas se prolongaran una vez que dejara Hogwarts.

Presionaba su mano derecha suavemente contra su lesión palpitante e ignoraba la nube de temor que crecía en su mente.

Tritones. Eso era en lo que necesitaba concentrarse.

Ella se ocuparía de todo lo demás después de los exámenes.

Solo tenía que mantener todo bajo control por un poco más de tiempo.

Se desmayó a mitad de la semana de exámenes, en medio del tritón de la Transfiguración.

Cuando se despertó en la sala del hospital, Severus estaba de pie junto a ella, con su túnica negra dibujada a su alrededor.

Sus ojos estaban fijos en su rostro, y su expresión era cerrada e ilegible.

Se miraron el uno al otro en silencio durante mucho tiempo hasta que ella miró a su alrededor para ver si había alguien cerca y le sonrió tentativamente, extendiendo su mano.

Dudó por un momento antes de que sus pálidos dedos emergieran de las mangas ondulantes, y se sentó en el borde de la cama, tomando su mano en la suya.

Ella se sentó, todavía estudiándolo sin palabras. Su expresión era muy retraída, incluso para él.

"Era mi corazón, ¿no?", Finalmente preguntó.

Él asintió brevemente sin mirarla a los ojos.

"¿Cuántos exámenes me perdí?"

"... Cuatro".

Ella había estado inconsciente durante dos días entonces.

Miró hacia abajo y soltó una risa ligera y desesperada en voz baja. Por supuesto, terminaría perdiéndose casi la mitad de los exámenes NEWT para los que se había quedado en Hogwarts.

No vayas suave// traducción. SevmioneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora