UTIMÁTUM

CAPITULO 5

CAPÍTULO 5

No había dormido en toda la noche, sopesando su situación, pero ya había decidido viajar a Paris y seguir el consejo que su hermana pequeña le diera. Tal vez perdería el contacto con sus padres, pero estaba seguro que de alguna u otra forma seguiría contando con el apoyo de Hannah y eso amilanaba un poco su sufrimiento.

—Channie tienes mala cara, ¿estás seguro que te sientes bien? — cuestionó Jessica al ver a su hijo mayor entrar en el comedor.

—Sí mamá — se acercó y le dio un beso en la mejilla. Jessica sonrió, pues por las prisas mañaneras, su hijo había abandonado esa costumbre de besarla.

—Oh, cariño estas de buen humor hoy — comentó feliz la mujer. Chan asintió.

— ¿Nos dirás la razón hermano? — cuestionó con interés Hannah.

—Aún no, debo hablar con papá primero — respondió, Hannah frunció el ceño e hizo un puchero en protesta — Oh, no hagas eso, sabes que no puedo negarte nada y en verdad debo hablar con papá primero. — pidió abrazando por los hombros a su hermana.

—Está bien, pero no te dejaré en paz hasta que me digas qué es lo que escondes — dijo picándole uno de sus hoyuelos. Jessica contemplaba a sus dos hijos riendo y bromeando, como cuando eran niños, suspiró nostálgica al recordar que pronto esa imagen no se repetiría más, ya que su pequeña estaba por casarse.

— ¡Ya, no me hagas más cosquillas! — Pidió Hannah, riendo sin parar y arrojando una rebanada de pan tostado a Chan.

—Niños no jueguen con la comida — reprendió sonriente.

—No mamá — respondieron al unísono ambos hermanos riendo después.

—Mamá, ¿papá aún no se despierta? – preguntó Chan tras arreglar el nudo de su corbata.

—Tu padre se fue temprano a la empresa, tenía una reunión con los abogados.

—Oh, no sabía nada de una reunión...

Luego de desayunar y charlar animadamente con su madre y hermana, Chan se dirigió a la empresa, se sentía nervioso, pero dispuesto, le diría a su padre toda la verdad sobre su preferencia sexual y sobre su relación con Hyunjin.

Al llegar a la empresa fue abordado por Minho, quien estaba algo intranquilo por el movimiento de abogados y consejeros de bolsa que había en la sala de juntas y de la que el resto de los socios desconocían el motivo.

—Al fin llegas, Chan — dijo con mirada preocupada Lee.

— ¿Qué sucede?

—Eso mismo quiero saber yo, tu padre está reunido con abogados y asesores en la sala de juntas y nadie sabe el motivo. —Chan lo miró confundido.

—Sé lo mismo que tu amigo, mi madre solo me dijo que había salido temprano para acá. — Minho suspiró con pesadez.

—Diablos

—Minho

— ¿Sí?

—Ya tomé una decisión sobre mi relación con Hyunjin — Minho lo miró expectante.

— Iras a buscarlo ¿cierto? —Chan asintió sonriente. El menor lo abrazó feliz en mitad del pasillo, atrayendo las miradas curiosas de todos los empleados que se encontraban en el lugar. —estoy tan feliz por ti Chan. ¿Cuándo te irás?

—Hablaré con mi padre hoy y tomaré un vuelo después, solo me quedan cuarenta y ocho horas para llegar a nuestra cita. — contó sonriendo de medio lado.