Ian Está Prohibido (Completa)

Capitulo 10: El famoso Ian

Capitulo 10: El famoso Ian

NOEMÍ

Estaba sentada frente a la ventana de mi habitación observando el día nublado ya vestida con una chaqueta gruesa y abrigada, gorro y guantes, había estado lloviendo mucho y de paso toda esa lluvia se convirtió en nieve que caía y caía de manera espesa e inundaba toda la calle.

Era algo hermoso de ver.

Amaba la nieve.

Mi teléfono vibró en un mensaje, lo tomé y lo abrí leyendo que decía:

André: Estoy afuera.

Ah, por fin.

Tomé mi bolso y salí de mi habitación, eran horas de la tarde, mi madre había salido a trabajar, Ian y Theo fueron al gimnasio y yo me puse de acuerdo con André para salir a la feria de navidad.

Vino a buscarme en auto, su novio manejaba, nos saludamos como si el tiempo no hubiera pasado pero claro que ella estaba muy cambiada, estaba más adulta con el cabello muy corto en mechas claras cuando antes era muy largo, nos hicimos amigas en el instituto y nuestra amistad se intensificó después de la graduación, mantuvimos el contacto siempre. Ella iban con un amigo de su novio muy alto y simpático, pero tal vez demasiado parlanchín.

Hablaba tanto que no podía ni escuchar mis pensamientos.

Comimos cosas de la feria y vimos el teatro que estaban haciendo en el escenario de obras de navidad, el ambiente navideño se sentía muy hermoso, todo era magnifico.

Pero claro, el amigo del novio de André; Mario quería acaparar mi atención hablando, casi sin dejarme disfrutar de nada.

Me frustraba.

—¿Y que haces aquí en vacaciones? —dijo Mario.

Despegué la mirada de la obra de teatro y le dije:

—Vine a visitar a mi mamá.

Esperaba que con esa respuesta me dejara en paz, volví a mirar al frente, sin embargo Mario dijo:

—¿Quién es tu mamá?

Relamí mis labios ya algo frustrada y tentada a cambiarme de lugar hacia donde estaba André, pero claro, ella estaba muy a gusto con su novio Felipe disfrutando de la obra como 2 tórtolos, no quería tampoco ser el mal trío.

—Sheila Biché. —dije, sus ojos se ampliaron en sorpresa.

—¿La productora? —dijo incrédulo.

—Sí —dije, uhm, al parecer conocía a mi madre.

—Guao —dijo Mario—, ¿ella está comprometida con Ian Song, cierto?

Al parecer Mario le gustaba esto de la farándula.

—Sí —dije.

—Guao, guao —silbó entre dientes pareciendo emocionado—, Ian Song.

—¿Lo conoces? —dije sin comprender.

—Claro —dijo—, lo sigo en redes, ¿tú no?

—No —dije aun sintiéndome ajena a lo que decía, después de que terminamos nunca quise saber nada de él, eso incluía no seguirlo o ver sus redes sociales.

—Es muy famoso —me dijo Mario como si fuera su fan— y según sus últimos videos hará una película.

¿Famoso en redes?

Ah, de la película sí sabía, mi madre se encargó de eso.

La escena del teatro terminó y empezaron a aplaudir, yo iba a empezar a aplaudir cuando de repente me tomaron de la muñeca con fuerza, me voltee frunciendo el ceño, quedándome sin aliento cuando alcé la vista encontrándome con unos penetrantes ojos verdes.

Era Ian.

Y estaba enojado.