Ian Está Prohibido (Completa)

Capítulo 40: Después del accidente

#Maraton

Capítulo 40: Después del accidente

IAN

 

Mucha luz, demasiada luz, intentaba buscar la salida pero entonces solo retrocedía en la oscuridad y mi cuerpo estaba pesado dándose por vencido en las sombras.

***

Respiré profundo, abrí los ojos lentamente adaptándome a la leve luz que entraba por la ventana. Noté que estaba en una habitación de hospital, mi pierna enyesada, ahí estaba mi esposa tomada de mi mano, su rostro a un lado de mi cuerpo sobre la camilla, sus labios entreabiertos respirando profundo, sonreí acariciándole la mano con mi pulgar, ella se despertó, sus hermosos ojos enfocándose en mí somnolientos.

—Hola —susurró sorprendida limpiándose un poco debajo de los ojos hinchados.

—Hola —murmuré.

Ella se levantó.

—Déjame llamar a un doctor —dijo, pero le aguanté la mano que le sostenía, ella me miró.

—Pero... ¿qué ha pasado? —pregunté, sentía que me dolía demasiado la cabeza como para recordar algo.

Sheila pareció analizar mi rostro con cuidado.

—Tuviste un accidente de auto. —explicó.

No lograba enfocar nada, ni siquiera recordaba ese tal accidente.

—¿Iba contigo? —pregunté.

—No.

Vi las luces afuera de la ventana y las decoraciones navideñas, sentía que estaba perdido en tiempo y espacio.

—¿Es navidad? ¿Cuando tiempo estuve dormido? —pregunté.

—¿Qué es lo último que recuerdas? —preguntó.

Intenté hacer memoria, pero vaya que me dolía la cabeza.

—Recuerdo estar en el sofá —murmuré—, estabas preparando las cosas para que tu hija llegara en la habitación, y entonces... fuimos al aeropuerto a buscarla pero, ya no tengo más recuerdos...

Recordaba algunos fragmentos de la boda reciente, estaba enojado, lo recordaba, pero aún no comprendía por qué.

—¿No recuerdas haber visto a...? —empezó a decir Sheila pero su voz se perdió, su mirada mirando más allá de mí como si ella misma se frenara la lengua.

—¿A quién? —pregunté con curiosidad.

—A quien impactó contigo —agregó rápidamente.

—No, solo hay mucha luz —admití—, tengo lagunas mentales oscuras.

Ella acarició mi brazo y afirmó con la cabeza como si me comprendiera.

—Descansa ¿si? Llamaré al doctor —murmuró.

La vi salir de la habitación y me quedé mirando hacia la ventana sintiendo la migraña del dolor de cabeza, quería café.

***

El doctor me evaluó y dijo que progresivamente los recuerdos podían volver como tal vez no, que solo le diera tiempo al tiempo, que tal vez mi esposa me ayudaría a recordar, ella tomó mi mano prometiendo que lo haría y entonces después de algunos exámenes, dijeron que podía irme a las 3 de la tarde a mi casa.

—Estaremos bien —me dijo Sheila cuando el doctor se fue— igual no hay mucho qué recordar, solo ese camino al aeropuerto.

Afirmé con la cabeza.

—¿Y tu hija? —pregunté—, ¿qué pasó con ella?

—No pudo viajar —respondió—, le salió trabajo de último minuto.

Oh...

—Quiero café y comer algo —dije, mi estómago gruñía mucho.

—Sí, déjame buscarte algo en la cafetería ¿si? —murmuró—, ya vuelvo.

—Vale. —sonreí

Se inclinó y me dio un beso en los labios, cuando ella se fue me quedé mirando la puerta, había algo que sentía que estaba olvidando, algo importante... solo que no podía recordar lo que fue.

 .
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
************
Instagram: Ysarisareinamoo