Autoprevención | BELLAMIONE

Capítulo 20 Odio a uno mismo

Pocas horas antes de que comenzara la batalla, Bellatrix había sido convocada a una reunión con todos los líderes de escuadrón en la oficina de McGonagall. Una vez que llegó, se encontró con un grupo bastante nervioso de unas veinte personas reunidas alrededor de una maqueta de Hogwarts donde las banderitas indicaban las posiciones defensivas. No reconoció a la mayoría de las personas que estaban allí, pero las miradas en sus rostros le dijeron todo lo que necesitaba saber sobre sus pensamientos sobre la batalla que se avecinaba. Había muchas caras sombrías en la habitación. Y por una buena razón.

Moody estaba allí, por supuesto, como líder de la Orden, al igual que McGonagall, Harry Potter, Hermione y Antonin como representante de los ex-mortífagos.

"Ah, ahí estás", gruñó Moody. "Puedes quitarte la máscara. Todas las personas aquí conocen tu identidad y hablarán más fácilmente cara a cara".

Aunque Bellatrix se mostró reacia a hacerlo, se quitó la máscara con cautela y la dejó sobre la mesa. Hubo algunas caras de sorpresa, por supuesto, independientemente. Antonin asintió con la cabeza cuando se unió al grupo.

"Empecemos", dijo Moody. "Gracias a nuestro visitante del futuro, tenemos conocimiento exacto del número de fuerzas del Señor Oscuro y sus vectores de aproximación. Hemos reforzado las defensas a lo largo del patio. Pero hay un asunto más importante que discutir primero. Lo que estoy a punto de decir, puede que nunca salga de esta habitación.

El grupo se cuadraba mientras Moody caminaba de un lado a otro. "A través de un antiguo ritual, el Señor Oscuro ha creado varios horrocruxes, seis en total. A través de este método, ha dividido su alma en siete pedazos. Esto es lo que le permitió regresar en primer lugar y si uno de ellos sobrevive, lo hará. regresa después de que lo derrotemos hoy. Estas cosas deben ser destruidas antes de que el Señor Oscuro caiga. No creo que el mundo mágico sobreviva a un tercer regreso del Señor Oscuro, incluso si lo derrotamos hoy".

"¿Sabemos dónde están?" preguntó uno de los aurores.

"Cálmate, muchacho, estaba llegando a eso", respondió Moody. "Tres de los seis ya han sido destruidos, gracias a las intrépidas acciones del Sr. Potter y sus amigos".

Bellatrix casi sonrió cuando vio que los pechos de Harry y Hermione se hinchaban un poco con orgullo. Fue terriblemente lindo.

"De nuevo, gracias a nuestro amigo del futuro", miró a Bellatrix. "Hemos identificado y localizado tres horrocruxes más. Dos de los cuales están en el escritorio de McGonagall. Son la razón por la que el Señor Oscuro atacará Hogwarts en unas pocas horas y será destruido durante la batalla".

"Dos", preguntó otro auror, una mujer esta vez. "¿Dónde está el tercero?"

"Ahí es donde se complica", dijo Moody, con el rostro sombrío. "El tercero es el familiar del Señor Oscuro, la serpiente Nagini".

Se intercambiaron miradas de preocupación antes de que Moody continuara. "Espera que el Señor Oscuro mantenga a la serpiente cerca de él en todo momento, pero primero debe ser destruida. Ordena a todos los miembros de tu escuadrón que consideren a la serpiente como un objetivo de alto valor. Debe ser destruida a toda costa".

Ahora, era el momento de hablar con lo que posiblemente podría ser la peor noticia posible. "Moody," interrumpió Bellatrix. "Hay un séptimo".

La cabeza del anciano mago se giró hacia ella, con los ojos muy abiertos y luego frunciendo el ceño. "¡¿Piensas decirnos esto solo ahora?!" se erizó.

"Hay una buena razón para eso", dijo Bellatrix. "El séptimo es Harry Potter".

En el momento en que pronunció la palabra, Potter giró la cabeza hacia ella y parpadeó, tratando de procesar esa información. "¡¿Esperar lo?!"