La presidenta de natación ( Wheesa )

Capitulo 4: Salida

WheeIn estaba con Yang en su trabajo, todos los 15 chicos y chicas estaban con sus cabezas a gachas esperando que las chicas los siguieran regañando por su mala conducto hace 5 días atrás.

- 5 malditos días en la cárcel por armar alboroto, tuvieron suerte de que no les dijera 5 años oh algo así - Yang estaba muy enfadada, como líder de ellos su responsabilidad es controlarlos - Me están sacando ahora mismo de mis casillas, ahora voy a decirle a la jefa que ya están libres, no quiero verlos más en esto ¡No son unos pandilleros como los de la calle busca problemas! Son una familia, son civilizados y cuando no les involucra algo sólo se hacen hacia atrás en espera de mis órdenes. ¿Qué hubiera pasado si matan a alguien? Nuestra regla es "Si luchan es sólo para asesinar" y no asesinamos por gusto, ni por un ataque de celos - WheeIn se le salió una risita teniendo que girar su cabeza hacia otro lado - Eso es otra cosa.

Yang se fue en su moto dejando a todos los chicos suspirando agobiados por tanto.

- Ella tiene razón, nos portamos como pandillas sin régimen.

- Además eran unos niños.

- Es mejor que piensen como ganarse el perdón de Yang antes que termine por sacar un látigo y golperarles - El comentario de WheeIn los dejo atónitos - Jajaja, sólo bromeó, dependiendo de lo que dice mi madre nos quedaremos oh moveremos a otro sitio.

- Señorita Jung, usted si se ve buena persona, no da miedo como la jefa.

- Mi madre es así desde siempre, yo sólo mantengo mi postura gacha, por aprecio a mis hermanos.

- ¿Cómo fue que decidiste negarte a ser como tú madre, si tienes ese carácter como ella?

- Hay cosas de las cuales es mejor dejar en una caja y no sacarlo más... Eso me dijo mi padre.

- ¿Por qué?

- Por deber debo ser la siguiente al mando de la asociación, ahora mismo alguien más interpreta mi papel como la hija de la gángster arriesgando su vida por mi, desde que tengo conciencia eh vivido en un perfil bajo y oculto, veo a mi madre una ves al año y tengo prohibido hablar de muchas cosas internas que me cuentan para estar al tanto. Mi padre tuvo que cambiar de profesión por mi culpa y ahora... Solo puedo fingir ser nadie oh la típica chica intelectual sin amigos, cometí un gran error ese día de ir a la fiesta, fingir no conocerlos y callar el echo de que puse a muchos en peligro al salir sola de casa.

- No fue tú culpa realmente.

- Hay muchos ojos que sospechan hermano - El chico fruncio el ceño.

- No me parezco a mi madre por ser inteligente, me parezco a ella porque se disfrazar mis verdaderos deseos.

- ¿Y esos son? - WheeIn suspiró.

- Darle una paliza a alguien ¡En fin! Venga muchachos, que la señorita Yang espera vernos asiendo algo de lo contrario se comprará una guillotina.

- ¡A la orden! - Gritaron todos entusiasmados.

WheeIn conoció este grupo por redes, aún siendo unos jóvenes pequeños aficionados a las motos donde algunos y apenas sabían andar, cuando por fin crecieron decidieron nombrarse como la pandilla de "La daga Negra". Desde entonces han tomado el pequeño taller de Yang como su hogar, de vez en cuando mirándose por problemas ocurridos, pero no muy lejos de WheeIn, al tiempo la madre de WheeIn les contacto para trabajar para ella, pero su hija intervino con sus manos al fuego e impidió que usará al grupo para males, dejando los sólo como una unidad pequeña que servirían y cuidarian de WheeIn.

- ¡Señorita Jung trae esa palilla!

- ¡Voooy!