𝐃𝐞𝐯𝐢𝐥 𝐌𝐚𝐲 𝐋𝐨𝐯𝐞 - 𝐃𝐚𝐧𝐭𝐞 𝐱 𝐑𝐢𝐚𝐬 𝐆𝐫𝐞𝐦𝐨𝐫𝐲

01

Tomó asiento en su silla para luego tomar la última rebanada de pizza en su escritorio y comerla. De repente, el sonido de la puerta abriéndose frente a él llamó su atención.

—Demonios, alguno de esos idiotas vendrá a cobrar.—fue el primer pensamiento que se cruzó por la cabeza de Dante al escuchar la puerta. Aunque de todas formas no se inmutó.

Pronto notó que se había equivocado al ver que el individuo que entró a su pequeña y desordenada oficina era Enzo.

—¿No sabes tocar?—reclamó Dante, terminando de comer su pizza.

—De todas formas no te habrías dignado a abrir la maldita puerta.—dijo él tipo de mediana edad, baja estatura y algo grueso.

—Supongo que tienes razón.—dijo él Cazador de Demonios poniendo sus manos como soporte para su cabeza y sus pies en su escritorio, como era de costumbre.—¿Que tienes para mi?—preguntó Dante, suponiendo que el hombre regordete venía con alguna propuesta de trabajo.

—¿Acaso tengo que traer siempre un trabajo para venir a verte? ¿Como sabes que no vine a hacerte una simple visita amistosa?—preguntó Enzo cruzándose de brazos, lo cual hizo a Dante soltar una carcajada.

—Por favor, Enzo. Te conozco lo suficiente para saber que no viniste a hacer una "visita amistosa".—afirmó él jóven hijo de Sparda, mientras tomaba una botella que tenía en su escritorio y bebía de la cerveza que se encontraba dentro de la botella.

—Me ofendes, chico. Pero no estas equivocado, te traje un trabajo muy especial.—dijo Enzo para poner un maletín en él escritorio y abrirlo.

—Espero que no sea una de tus estupideces de nuevo.—dijo Dante tomando otro sorbo de cerveza, y recordando como había aceptado trabajos mediocres gracias al Ferino.

—¡Hey! Mis trabajos son muy buenos. Que no los sepas apreciar es otro tema.—dijo Enzo ofendido por el comentario del Cazador.

—Como sea. ¿Vas a decirme de que se trata o no?—preguntó él joven Sparda enderezándose en su asiento para prestar atención al Agente.

Él hombre de mediana edad esbozó una amplia sonrisa, seguidamente sacó una carpeta y se la extendió a Dante para que la tomara. El joven Sparda tomó la carpeta y la abrió para echarle un ojo. Dante se tardó un par de minutos leyendo, en los que el Agente esperó con paciencia y en absoluto silencio, atento a la reacción del chico ante la propuesta de trabajo.

—¿Guardaespaldas?—preguntó el joven Sparda al leer el contrato.

—Si... Pero no es un trabajo cualquiera, serás guardaespaldas de la Heredera del Clan Gremory.—dijo Enzo, incitando al Cazador a aceptar el trabajo.

—¿Heredera de que...?—preguntó Dante algo confundido.

—Son otra clase de demonios. Habitan en Japón. ¿No estas leyendo el informe?—preguntó Enzo al notar que él Cazador no estaba bien informado aún.

—Dejame entender... ¿Quieres que sea guardaespaldas de un maldito demonio?—preguntó Dante incrédulo.

—Eh... ¿Si?—dijo Enzo con algo de duda en su voz al escuchar el tono en él que Dante hizo la pregunta.

—¿Acaso estas demente? No sé si lo sabías pero soy un Cazador de Demonios, no una maldita niñera.—dijo cerrando la carpeta para arrastrarla sobre el escritorio hacia el Ferino.

—Escuchame, Tony. Piensalo, sé que ser guardaespaldas no es lo tuyo pero esta es una buena oportunidad, tiene una muy buena paga.—aseguró Enzo al joven hijo de Sparda.

—¿Cuanto pagan?—preguntó el Cazador para confirmar las afirmaciones del Ferino.

—Un millón de dólares. Un maldito millón de dólares, Tony.—dijo él Agente bastante entusiasmado, sorprendiendo al Cazador de Demonios.—Piensalo, podrías comprar lo que quieras, incluso podrías arreglar y remodelar esta pocilga por fin.—dijo el Agente regordete mirando la desastrosa oficina de Dante.

—¿Que tiene de malo mi oficina actual?—preguntó él joven Cazador arqueando una ceja.

—¿Bromeas? Es un maldito chiquero. Claro que con el dinero que ganaremos por el trabajo, podrías mejorar el lugar.—propuso él Agente levantando sus cejas.

Él joven Cazador tomó unos segundos para pensarlo, realmente no le vendría mal ese dinero, tenía muchas deudas por pagar y a decir verdad, realmente quería remodelar esa pequeña oficina.

—Será un trabajo fácil, cuidar a esa niña un par de semanas, matar a unos cuantos idiotas que probablemente intentarán asesinarla y volver a casa con mucho dinero.—fue lo que pensó el Cazador de Demonios, considerando la oferta del Ferino.

Dante suspiró, resignándose para luego responder.

—Tu ganas. ¿Quien me pidió a mi para este trabajo?—preguntó Dante con verdadera curiosidad.

—Uno de los cuatro gobernantes del inframundo, Sirzechs, pidió protección para su hermana menor, al parecer alguien quiere matarla por algún motivo desconocido.—explicó Enzo al joven hijo de Sparda.

—¿Cuando comienzo?—preguntó Dante al Agente, mirándolo a los ojos.

—Mañana, aquí está el boleto de avión y la dirección del lugar al que tienes que ir. Ahí te explicaran mas a detalle tu trabajo.

—Bien. Deberías agradecerme, cabrón avaricioso.—dijo Dante terminando su cerveza.

—Vamos, esto nos beneficia a los dos, chico. Además, no me digas que no te emociona recibir un trabajo tan especial como este, podrás conocer muchas japonesas ahí.—dijo Enzo levantando sus cejas de forma pícara, mientras tomaba su maletín nuevamente.

—Lo que sea.—respondió él joven Sparda con algo de desinterés.

—Nos vemos pronto, chico. ¡Seremos ricos!—exclamó el Agente saliendo de la oficina y cerrando la puerta tras él.

Dante rodó los ojos por la actitud del Agente de mediana edad. Luego de un rato comenzó a empacar sus cosas, un par de atuendos que usaba usualmente para cazar, junto con sus dos preciadas armas Ebony e Ivory y su característica espada The Rebellion.

Estaba listo para dar comienzo a su nueva aventura.

•••

Hola gente, esta vez les traigo una nueva historia, que quería hacer desde hace un tiempo. La verdad soy nuevo escribiendo sobre DMC y HSDXD, asi que si me equivoco en algo pueden hacérmelo saber, estoy abierto a cualquier idea por parte de ustedes. Tomen esto como un universo alterno, porque haré algunos alteraciones a ciertas cosas.

Sin nada mas que decir, los leo pronto, y espero que les guste la historia.