Samara y Cloudy: Un fanfic de Bluey

Una tarde tranquila

Ha pasado alrededor de una hora tras la partida de Chilli. Samara se encontraba en el cuarto junto a su tableta de dibujo, que se había traído consigo desde su país, acomodándose en el escritorio personal que se encontraba dentro de su habitación alistándose para ponerse a dibujar. Ya hacía mucho que no tenía tiempo para sus dibujos y para su desgracia la memoria muscular no había retenido toda la práctica que llevaba acumulando durante todo ese tiempo. Tenía un inicio complicado, sus temblorosas manos dificultaban un poco su proceso creativo, pero rápidamente ajustó su equipo para mejorar la estabilidad de su trazo. Una muesca más alegre se asomaba tras haber logrado crear un circulo más idóneo, así que tomando las riendas de su destino empezó a practicar de nuevo aquellas viejas técnicas que su hermana alguna vez le comentó. Sus pinceladas eran caóticas, a veces su mano no respondía correctamente y sus trazos a veces carecían de ritmo, la frustración se empezaba a notar un poco en sus movimientos algo bruscos.

Cloudy por su parte seguía en la cocina, aunque no era usual que ella cocinara, divisó u par de huevos y algo de tocino entre la alacena y no pudo evitar sentirse hambrienta. Tomó 4 huevos y un par de tocinetas antes de volver a acomodar todo en su lugar y tras tomar una sartén y poner a freír aceite, simplemente vertió el tocino esperando a que este quedara en su punto, más sin embargo se le pasó un poco y acabó tostando levemente el alimento. Sin esperar mucho más agregó los huevos al sartén y empezó a batir el alimento en busca de que quedara tal y como Samara solía hacerlo. Mientras terminaba de hacer la comida recordó como su hermana batallaba demasiado en hacer simples huevos fritos y terminaba haciendo huevos revueltos, algo que sin importar cuanto pasara, le hacía soltar una intensa risa que apenas podía sostenerla para evitar llamar mucho la atención. En pocos minutos ya estaba lista la comida y la separó en dos platos lo más iguales posibles, sin embargo, al plato de su hermana lo envolvió en papel aluminio y lo dejó por un lado de la estufa para que, tras haber dejado la comida de su hermana segura, se acercara a la mesa a comer en paz. No fue mucho el tiempo que se tomó para comer, aunque tenía que preparar sus cosas pues ya debía promocionar sus servicios, se puso a ver unos videos en su celular solo para estar más a gusto mientras comía. La joven Cavaliere, al terminar de comer, se acercó a la puerta de su habitación en búsqueda de su hermana, pero lo que encontró fue a Samara, sentada frente al computador, en el buscador web viendo unos documentos extraños.

-Sam, ¿Qué estás...?- Cloudy se acercaba a su hermana mientras se cuestionaba su actuar.

Samara volteó confusa pues estaba completamente perdida en su lectura. -¡Oh! Hola sis, no ando haciendo mucho la verdad.- Samara se movió un poco de su lugar y lo primero que vio Cloudy fue el encabezado de la página web en la que estaba su hermana. Parecía ser algo con referente a un gobierno, lo cual era extraño pues Cloudy sabía que su hermana poco o nada era de meterse en cosas de este estilo.

-"Constitución de Australia, 1901, con enmiendas hasta 1977."- Cloudy volteó a ver a Sam completamente confundida. -¿Qué es esto?¿Pero qué no estabas dibujando?- Cloudy soltó una enorme carcajada al ver en el lugar en el que había terminado la joven Wolfhound.

-¡Si estaba, te lo juro! Yo solo quería saber cómo eran los paisajes más bonitos del país para tratar de dibujarlos y de repente estaba viendo la Constitu... ¿Sabías que Australia forma parte de la monarquía inglesa?- Samara esbozó una sonrisa mientras le contaba un dato curioso a su hermana sin venir a cuento de su respuesta original.

Cloudy rio ante aquella extraña declaración. -Ya déjate de esas cosas y ven a comer.- Cloudy se apartó de en frente de Samara y tal cual una madre regañando a su hijo, señaló la cocina para que se hermana fuera a comer. Samara rió levemente al imaginar a Cloudy como una mamá enojada.

-Ya, ya. Gracias por hacer de comer, ya me estaba dando hambre.- Samara se levantó y claramente se observaba que movía su cola de lado a lado alegremente al escuchar que había algo para comer, algo que le parecía tierno a su hermana.