I.

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- ¡¿Cómo fuiste capaz de hacerme esto?! - Grita lleno de furia - Sabes cuánto deseaba tener un hijo y hasta ahora me dices esto - le avienta las hojas.

- Levi, lo lamento pero no quería herirte de esta manera - intenta acercarse al más bajo.

- ¡No me toques! - se aleja reteniendo sus lágrimas - me heriste más ocultándome la verdad. Sabías muy bien cuánto anhelaba tener un bebé, una familia ¡y resulta que nunca podré! - lágrimas bajan por sus mejillas - soy un Omega defectuoso.

- Levi, no hay que preocuparse. Nos tenemos a nosotros dos, eso es más que suficiente - toma sus manos - piénsalo bien, no tendremos gastos de más, no habrá desveladas por la noche. Un hijo solo es una perdida de tiempo en nuestras vidas - la sonrisa que trae en el rostro es bordada por un fuerte golpe en la mejilla.

- Eres un imbécil - retira el anillo de compromiso que descansa en su dedo anular - hasta aquí llegó lo nuestro, no quiero saber nada más de ti - avienta el anillo al suelo.

- Levi - lo toma del brazo cuando el más bajo intenta irse - Levi lo siento.

- No me toques - suelta el agarre.

Continua su camino saliendo del que por un tiempo fue su hogar. Camina sin rumbo mirando los grandes carteles luminosos de la ciudad. Observa por un instante el gran bar que hay frente a él e ingresa.

- Un martini por favor - pide al camarero

Varios Martini, Margaritas y Mai Tai después comienza a sentirse diferente. Observa al alfa que escasos metros suyos no le quita la vista de encima, con sonrisa torcida camina hasta él.

- Hola guapo. He notado como me miras - se sienta en sus piernas.

- Eres muy apuesto - susurra en su cuello.

- Lo se - contesta con simpleza.

- Te invito unos tragos, solo tu y yo en un lugar más privado - el azabache asiente.

El alfa lo toma de la mano y lo guía hasta afuera del antro, subiendo ambos al auto Mercedes-Benz plata que conduce. En menos de 10 minutos ambos se encuentran ya en el departamento, dentro de la habitación besándose como si no hubiera un mañana.

- Eres perfecto - desnuda por completo al Omega - simplemente precioso - besa y muerde cada parte de su piel.

- Mgh - aprieta los ojos al sentir dos dedos dentro de él.

- Estás tan estrecho lindo Omega - ríe lujurioso.

- No soy lindo, soy un Omega defectuoso, peor que un Omega recesivo - sus lágrimas comienzan a salir.

- Hey no llores - limpia sus mejillas - disfrutemos juntos esta noche - besa su frente - está noche es para divertirnos - Levi asiente.

Pronto los dedos fueron intercambiados por algo más grueso y la habitación comienza a llenarse de gemidos y gruñidos de ambos amantes perdiéndose por completo en el placer.

•••••

-Mhh - talla sus ojos ante la luz del sol que traspasa por la ventana - Ugh - sus caderas duelen - Está noche te pasaste - mira a su acompañante - Eh - abre en grande los ojos al ver que no es su es prometido sino un alfa de melena castaña que aún duerme - Mierda - Susurra.

Los recuerdos atacan su mente. Y al recordar todo lo que hizo siente una inmensa vergüenza, se acostó con un desconocido luego de romper con su prometido y no solo eso, lloró frente a ese alfa castaño y le contó lo que le pasó.

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