Camino del Tao

Parte 5

-¡A las armas!

El grupo de aventureros gritó, tanto hombres como mujeres, con armaduras de cuero, destellaron con intenciones asesinas, miraron al grupo de Suwak, la conmoción por ser atacados por un grupo de pícaros tan extraño se ha extinguido, reemplazado únicamente por la intención de matar.

Al frente, un hombre pequeño con una gran espada fue el primero en correr hacía Suwak.

Las manos del pequeño hombre apretaron el mango de su espada, sus músculos moviéndose mientras balancea la espada de arriba hacía abajo.

Sin embargo, Suwak, rápidamente esquivó hacía la derecha y una de sus dagas cortó hacía el estómago del hombre pequeño.

El hombre pequeño no pudo reaccionar, Suwak se mueve tan rápido como el viento, y, siendo un cultivador en la primera etapa de condensación de Qi, entre estos humanos normales, él es como un tigre entrando en un nido de gatos.

La daga de Suwak cortó limpiamente al pequeño hombre por la mitad.

-¡Gloría al monte Su!

Suwak gritó, unos momentos despúes dio un salto de algunos metros.

Los aventureros que, sintieron que aún podían resistir, al ver como su capitán fue derrotado tan fácilmente, dieron media la vuelta y corrieron como pollos sin cabeza.

Y, sin embargo, ¿Cómo podrían estas simples personas escapar?

Suwak se movió, con su velocidad, rápidamente alcanzó a un aventurero flaco y lo golpéo en el cuello.

Como resultado, el cuello de este aventurero fue totalmente hecho trizas, la sangre salpicando y la cabeza de ese flaco aventurero moviéndose como un balón de futbol.

Otro salto de Suwak y más aventureros cayeron.

En este momento, Suwak es como un hombre cazando a pequeñas ovejas.

Un minuto despúes, Suwak regresa tranquilamente, en su mano derecha arrastra a dos aventureras sobrevivientes.

-¡El hermano Su es genial!

Little Wan corrió hacía Su, se inclinó y gritó con alegría, la grasa de todo su cuerpo moviéndose.

Albino, Cable peligroso y Alacrán hicieron una reverencia y sonrieron.

-Chicos, este es un regalo de este joven maestro.

Suwak arrojó a las dos aventureras encadenadas hacía sus actuales subordinados, como respuesta, estos sonrieron felizmente y agradecieron.

Suwak está más interesado en lo que lleva esta caravana de comerciantes.

Desde un principio, Suwak nunca creyó que esta caravana fuera una simple caravana de comerciantes, sino que, se dejó guiar por su experiencia.

Antes de atacar a esta caravana comerciante, Suwak notó algo raro.

En primer lugar, la cantidad de aventureros no coincidía con el tamaño de la caravana.

Apenas hay una familia comerciante, y esta caravana apenas puede considerarse un pequeño carruaje que lleva a la familia comerciante, y un pequeño compartimiento de treinta metros cuadrados siendo llevada por el camino.

Sin embargo, la cantidad de diez aventureros protegiéndola era algo sospechoso, porque, para el tamaño de esa caravana, incluso cinco aventureros ya se consideran demasiado.

Los aventureros no son baratos para los comerciantes, y a menos de que estos comerciantes lleven algo realmente valioso, no se atreverían a atacar esta caravana.