ELEVEN: my cherry

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         Siento decaer, tengo esta sensación que nunca la había sentido. Es tanta la presión que siento en mi pecho cuando lo veo, cuando habla. Antes había estado tratando de ignorar todo esto, pero no puedo más.

—Y en vez de alejarte, porque no intentas integrarlo a ti?—

Mi psicóloga me habla, empecé hace unos días, —No quiero que obligarlo a tener que cargar mis problemas—

—No es que cargue tus problemas, es acompañarte—

—Y si no le gusta? Y si ya no le gusto?—

—Pues no es el indicado—

Asentí, quería estar con él y no quería quedarme con la sensación de "que pasaría si...". Mi sesión terminó cuando salí, Pedri me esperaba.

—Y como estas?— él dijo apenas entré al auto

—Podrías llevarme con Pablo?—

El asintió, sabía que eso quería decir que estaba bien. Que lo estaría. Pedri, Fer y más que nadie sabían que Pablo Gavi era una de las personas que realmente deberían estar en tu vida. Y que sería una tremenda gilipollas si lo alejará.

El auto de Pedri aparcó frente a su casa y bajé como si fuese que alguien estuviera siguiéndome.

Acto seguido empece a golpear la puerta, Aurora, su hermana me abrió y sonrió.

—Se encuentra Pablo?— pregunté y ella asintió y me hizo seña para que pasará.

Me di la vuelta y vi a Pedri en el auto, le asentí y eso hizo que entendiera que estaría bien. La hermana de Pablo me llevó hasta una habitación y luego se fue, la puerta estaba llena de pegatinas y tenía colgado un cartel en donde decía "Pablo".

Golpeé la puerta —No estoy Aurora— gritó desde dentro. Eso hizo que sonriera y me atreví a abrir la puerta.

Estaba sentado en un almohadón con la palanca de la play en las manos, parecía sorprendido, corrección, estaba sorprendido.

—Que haces aquí?— fue lo primero que dijo, antes de apagar el juego.

—Podemos hablar?— el asintió y me senté junto a él —Quiero decirte que antes tenia miedo, pero yo... quiero que estés en mi vida— balbuceé lo último.

—Que?— dijo él confindido. Genial, no me escuchó, voy de nuevo.

—Quiero que estés en mi vida, Pablo— dije sin más.

El se mantuvo serio, hasta que sonrió y dijo —Te había escuchado, sólo queria que lo repitieras—

—Eres un...—

—Un que? Dijo acercándose a mi—

No dije nada y tomó mi mejilla —Nunca pienses que eres insuficiente para mi, ni para nadie—

Tomé el atrevimiento de besarlo, no era la primera vez que tocaba sus labios, pero se sentía así, como si empezará una nueva etapa en nosotros.

—Antes había estado confundida, pero ya no. Siempre soñé con el momento en que me encontrará con aquel niño que conocí en Sevilla, pero me encontré contigo y fue mejor—

El me sonrió —Se que pasaste por mucho, pero créeme que no soy el tipo de persona con él que desgraciadamente tuviste que toparte, soy Pablo y espero que sea suficiente—

—Créeme que no hay nada más que suficiente que tú—

Esto marcó un antes y un después en nuestras vidas, después de esto somos más fuertes que nunca.

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Unos años después...

Elizabeth.


Siempre tuve el apoyo de mis familiares con todo, y hoy puedo decir que soy muy feliz, estoy en la relación que siempre quisé estar y estoy con el hombre que amo.

Estamos caminando hacia el altar, Pablo y yo... pero no se asusten (o se emocionen) no nos casamos nosotros, somos los padrinos de la boda.

Cada uno nos ponemos del lugar correspondiente y vemos entrar a la novia, Sofia. Futura esposa de Fernando, mi Fer.

El la espera en el altar, esta sonriendo, vaya que vi siempre su sonrisa, pero ahora tiene una mezcla de todas las emociones que podrías tener, juntas.

Por un momento veo de reojo a Pablo, quién me sonríe y pienso "dios mio, me quería siempre en esa sonrisa".

La ceremonia fue fantástica, y ahora estamos en la fiesta. Hora de tomar el ramo de flores. Ni siquiera me esfuerzo en tomarlo, pero aún así el ramo cae en mis manos.

Empiezo a reír, y miró a Pablo quién también festeja, entonces ahí es cuando lo sé, quiero casarme con este hombre.

El se acerca a mi y me dice —Es nuestro turno cherry— lo veo que se hinca en su rodilla.

Al parecer soy la única sorprendida en esto, no dejé ni que hiciera la pregunta, sólo empecé a asentir rápido. El me sonrió y me besó, entonces me pone el anillo y lo muestro, todos los presentes empiezan a festejar. ¡Me voy a casar!.




Pablo: Nunca conté esto pero antes de presentarnos, antes de que me enamorará de nuevo de ella, (por qué sonará tonto pero la primera vez que la vi en Sevilla, puedo jurar que me enamoré de ella), sabía que debía ser la indicada, aunque la molestará para que sus mejillas tomarán ese color cereza que tanto me gustaba, sabía que si no era Elizabeth, la niña de Sevilla, debía ser mi Elizabeth, mi cherry, y por suerte para mi, ella era ambas.









The end.

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La verdad es que no estoy nada satisfecha con esta historia, siento que le faltó mucho que pulir pero también siento que le perdí la mano, no sé si se me entiende.

Al estar mucho sin actualizarla o sin tener ideas, (porque realmente pasé por días en que mi cabeza estaba en blanco) perdí el rumbo en que la quería llevar.

Espero que no se enojen conmigo pero creo que tiene un final decente, lamento mucho no poder seguirla. Pero me encantaría en un futuro (no tan lejano, espero) reescribirla, y darle un buen final.

Siempre trato de agradecerles todo lo que me brindaron desde starboy, la verdad que me hizo dar cuenta lo que realmente amaba y muchas gracias por eso<3.

Con muchísimo amor,
Rocio🍒

| C H E R R Y | Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora