Jungkook trabaja en la heladería más famosa de todo Séul, donde venden los sabores más raros y exoticos de la ciudad.
Taehyung es un cliente habitual de aquella heladería.
Ambos se gustan, pero ninguno se atreve a dar el primer paso..
Hasta aquel dí...
Lo empujó hacia la puerta, sus erecciones se rozaron. La mente de Jungkook estaba inmersa en el placer y la lujuria.
Taehyung jadeaba durante aquel beso. Lo tocaba con deseo. Quería que lo follara ahí mismo.
Un recuerdo fugaz llegó a la mente de Jungkook. Solo hacer el amor, cuando realmente haya amor.
Dejó de besarlo y se alejó. Taehyung se quejó. -¿Qué pasa? ¿Por qué te detienes?-
-¿Crees en el amor a primera vista?-
-Si, pero no entiendo, ¿Porque me preguntas eso ahora?-
-Me gustas desde la primera vez que te vi, sin saber nada de ti, ni tú nombre- Jungkook le acarició la mejilla. -Eres más que sexo para mi, quiero conocerte, que me conozcas, tener citas, y si funciona ser novios-
-¿No me vas a ..?- Jungkook lo interrumpió con un beso.
-Vales más que una simple follada en una bodega, yo quiero hacerte el amor, tener tu cuerpo a mi disposición sin limites de tiempo, sin afán, explorar cada centímetro de tu piel, devorarte completamente-
-Eres tan cursi- Jungkook se asustó un poco. -Y eso me encanta- Taehyung lo abrazó por el cuello y lo besó.
Antes de que se cumpliera el tiempo de descanso, intercambiaron números. Taehyung iría a casa, volvería a la hora de salida del trabajo de Jungkook, para tener una cita. Su primera cita.
Cuando Taehyung salió de la heladería. Jin se acercó a Jungkook.
-¿No sabía que tenías novio?-
Jungkook no lo haría quedar mal, al fin y al cabo Taehyung le gusta y ser su novio es una meta.
-Si, es que recién empezamos a salir-
-¿Desde cuándo?-
"Desde que casi lo follo en tu bodega"
-Desde hoy- Le sonrío. -¿Podemos dejar la salida para otro día? Tengo una cita con él hoy-
-Claro no hay problema, espero otro día podamos salir-
-Si, claro- Jungkook recordó las palabras de Taehyung. ¿Realmente Jin esta interesado en él?
Una feliz jornada tuvo Jungkook luego de aquel encuentro, sus gustos eran correspondidos.
Beso aquellos labios con los que soñaba cada noche, tocó la piel debajo de la ropa, era mucho más suave de cómo se la había imaginado.
Taehyung era muy atrevido, eso le gustaba y le preocupaba. Sacaba en él aquel amante del sexo, pero debía controlarse, quería hacer las cosas bien.
No sexo. Hacer el amor. Era su meta.
Pero Taehyung era un manjar difícil de resistir. Sería una tarea compleja.
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