Odio Irresistible © KOOKMIN

014

──¿Tú trajiste estás sábanas?

Jimin preguntó, su cuerpo desnudo envuelto en los brazos de Jungkook, no sabía en qué momento comenzaron a abrazarse después del sexo, sin darse cuenta simplemente sus pieles se unían cada vez más.

──Las traigo todos los días y luego las llevo a lavarlas en mi casa. ¿O quién crees que tiene siempre listo sábanas limpias en este colchón para tí?

──Nunca me di cuenta.

──No me gusta hacerlo aquí, es un lugar muy húmedo por lo menos las sábanas son limpias...

Jimin se quedó en silencio, a él tampoco le gustaba hacerlo ahí, en el depósito de la escuela. Se decía constantemente a sí mismo que ya no volvería a tener sexo con Jungkook, pero cada vez que él lo buscaba, Jimin simplemente lo seguía sin objetar.

──Entonces quieres... hacerlo... me refiero a si quieres ir...

──¿Hacerlo en otro lugar?

──S-sí. Algo así.

Jungkook miró a Jimin, sus labios hinchados y rojos, daban la impresión de haber sido profanados, y tal vez así fue. Su piel pálida y suave como la porcelana. Definitivamente alguien como Jimin no merecía tener sexo en ese lugar. No es que a Jungkook le agradaba Jimin pero tampoco quería ser desconsiderado con su... ¿Qué era Jimin de él?

Ya habían pasado dos meses desde la primera vez que tuvieron sexo y Jungkook se repetía siempre que no lo volvería a buscar, pero sus pies simplemente se movían sin su consentimiento y lo llevaban hasta el consejo estudiantil. Sin darse cuenta comenzó a traer sábanas limpias y paños húmedos porque la piel de Jimin es muy sensible y un día se quedó hasta tarde porque limpió todo el depósito para que el presidente no esté en un lugar sucio.

Y cuando Jimin tenía mucho trabajo del consejo, Jungkook simplemente se quedaba con él a ayudarlo a veces, otras veces Jimin tenía mucha tarea y siempre lo terminaba en la biblioteca de la escuela, esos días Jungkook también hacía su tarea en silencio, siendo el sonido del lápiz la única compañía de los dos.

Y la última semana se la pasaron estudiando porque los exámenes estaban a la vuelta de la esquina, Jimin nunca le ofreció a Jungkook estudiar con él, ni tampoco Jungkook se lo pidió a Jimin, ellos simplemente se sentaban juntos y lo hacían.

Y el día de hoy por fin pudo volver a tener sexo con el rubio, no es que lo extrañase, es solo que Jungkook no tenía otro compañero sexual. Jimin era el único, por el momento.

──De hecho, sí... podríamos ir a mi casa si quieres, no te preocupes por mi papá, él casi nunca está.

Jimin asintió y se dispuso a vestirse en silencio. ──Podemos ir mañana, tengo que irme.

──¿Tan pronto?

Jimin miró algo sorprendido a Jungkook.

──¿Por qué?

──Me refiero a que siempre haces cosas del consejo y no sueles irte tan temprano.

──Tengo un asunto familiar que atender.

──Oh, entiendo. Entonces... nos vemos mañana.

──Sí.

Jungkook llegó a su casa y encontró a su padre. Se preguntó si había hecho algo malo, últimamente ninguno de los profesores tenían quejas de Jungkook, y el entrenador estaba muy satisfecho con su desempeño. Así que si algo había mal, no era su causa.

──Hijo, tenemos que hablar.

──Yo no hice nada.

──No es eso, sé que últimamente estás al día con tus estudios y haciendo tus deberes con Jimin. Por eso quiero... que conozcas a alguien importante para mí.

Jungkook miró a su padre, sabía que el hombre había estado saliendo con una mujer. Pero no creía que fuera algo serio, se preguntaba internamente qué tipo de aprovechada le tomó del cuello a su padre, de seguro era alguna jovencita que quería sacarle dinero. Pero se guardaría sus comentarios hasta conocerla.

──Como sea.

──Jungkook, no quiero que pienses que voy a reemplazar a tu madre, ella es y siempre será mi más grande amor... honestamente no busqué esto, pero conocí a una mujer que me hizo volver a sentir algo de amor, no te pido que la quieras, solo que la conozcas y tal vez... descubras que no es una mala persona.

──Lo que hagas con tu vida no es de mi incumbencia. Esta es tu casa y es tu dinero, a quién se la regales es tu problema.

──Tampoco voy a estar con una persona que te desagrade, eres lo más importante para mí, aunque no me creas. Tú eres primero, espero que lo sepas, por eso quiero que la conozcas, además tiene hijo de tu edad y creo que te va a agradar.

Jungkook asintió en silencio, no quería admitirlo pero se sintió algo cálido cuando su padre le dijo que era lo más importante en su vida, ellos no hablaban mucho, no después de la muerte de su madre. Probablemente los dos se encerraron en sus propios sufrimientos y no supieron ver qué se necesitaban. Por eso cada vez era más difícil mostrar algo de afecto por parte de ambos.

Pero en el fondo quería que su padre vuelva a encontrar el amor, y esperaba que no cayera en las redes de alguna mujer que solo busque su dinero, no quería confiar demasiado. Solo quería que nadie lastime los sentimientos de su padre.

Sin mucho ánimo a decir verdad, se preparó con un elegante traje, y acompañó a su padre a un restaurante muy modesto, le pareció algo extraño al principio, pero luego divisó a una mujer de la misma edad que su papá aparentemente.

──Yoomin, él es mi hijo, Jeon Jungkook.

──Es todo un placer, tu padre me ha hablado mucho sobre tí.

Jungkook saludó amablemente a la mujer y no se perdió de las miradas llenas de complicidad que tenían su papá y la mujer. Después de media hora de plática, toda duda sobre Yoomin se esfumó, estaba claro que era una buena mujer, modesta y humilde.

──Oh, ya llegó... ──dijo la mujer levantándose ──Quiero presentarles a Park Jimin, mi hijo.