Emma yacía en la enorme cama del cenizo, con una vieja playera blanca que le quedaba como vestido y unos viejos boxers que tuvieron que ajustar para que usará como shorts.
Dormía pacíficamente, ignorando por completo la integración de su madre y aquel temido líder de la mafia.
Él lo había iniciado, así que estaba bien, fue Hangaki quien se lanzó a los brazos del Sano y enrollo sus piernas en las caderas del rubio para evitar caer, fue Takemichi quien decidió unir sus labios en un beso hambrientos.
Entonces ¿Por qué lágrimas saladas bajaban por sus mejillas?
Al principio todo estaba bien, las grandes manos del cenizo recorrían esa fina cintura mientras exploraba la cavidad bucal del azabache con su lengua, apretó los enormes glúteos del chico y no dudó en desvestirse para él. No esperaba ir tan rápido, realmente creyó que le tomaría una semana o quizás dos convencer a Hanagaki para tener sexo pero tal parecía que se equivocaba.
Y una vez desnudos ambos, con Takemichi apoyado en el lavamanos y Manjiro entre las piernas del chico, fue que las lágrimas aparecieron confundiendo al Sano.
Las caricias solo la lechosa piel pararon, al igual que los besos, los ojos azules estaban cerrados y algunas lágrimas bajaban por las delgadas mejillas mientras leves sollozos eran oídos; Manjiro acarició la mejilla de Hanagaki, obligando al azabache a abrir sus bellos ojos.
—¿Por qué lloras?— preguntó con genuina intriga Manjiro, era la primera vez que algo así le pasaba en un momento de placer y desconocía el motivo de ello, saber el motivo por el cual Takemichi parecía repudiar el contacto pero al mismo tiempo fue quien inició todo.
—Lo siento— sollozó, agachando la mirada por pena, realmente solo quería terminar todo y meterse a bañar para sentirse mejor, no creyó que el sentimiento de miedo en su pecho crecería tanto —S-solo hágalo, no se preocupe por mí, estoy bien.
Sano sintió un nudo en el estómago al oír esa dulce voz quebrándose, era un mafiosos capaz de matar gente pero jamás fue capaz de abusar de otros -no sexualmente hablando- le era tan raro ver que alguien temiera tener sexo con el, mierda, incluso las prostitutas de los burdeles que tenían parecían felices con la vida que habían elegido, nunca obligó a nadie a tomar una decisión tan dura.
Sintió pena y confusión mientras los ojos azules soltaban saladas lágrimas y de los rosados labios salían suaves sollozos. Un suspiro escapó de sus labios, tomó una de las toallas que estaban dobladas junto al lavabo y cubrió el cuerpo del azabache.
—Tómate tu tiempo…yo iré a otro baño— comentó con tranquilidad, mientras se colocaba sus pantalones para poder salir de la habitación pero antes de poder girar la perilla, su muñeca fue tomada por la delgada mano del azabache.
—Puedo hacerlo, no se preocupe por mí…yo
—No lo haré— interrumpió el cenizo, algo incómodo —No se que clase de películas veas, pero así no es la mafia…no todos somos unos hijos de puta. No haré nada que tú no quieras.
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Good Morning Daddy [MITAKE] ✅️
FanfictionDonde Takemichi es padre de una linda niña de 3 años llamada Emma Hanagaki, la pequeña infante tiene un encuentro inesperado con el líder de la mafia más peligrosa de Tokyo y pronto inicia su aventura.