Los Deseos De Un Hermano Pervertido +18

-capitulo 36- noche de recuerdos

Eran cerca de las 8 de la noche y regresaba a nuestro departamento, recordaba todo y cada cosa que había hecho todo por culpa de Estefania que diablos le pasó, no la he visto desde que desperté, pero no quiero volverla a ver, me hizo creer que a Danny la engañaba y ahora me siento tan mal por haberla preocupado, por haber tomado, por tener ese accidente...

-jorge? -pregunto Danny

-aqui estoy en la sala. -respondi.

Ella llegó al sillón donde me encontraba y se sentó pegada a mi, me abrazo y yo la abrace, empecé a sentir un nudo en la garganta como si no mereciera estar aquí con ella, Natsumi seguía con mis padres e iban a estar con ella un día más en lo que me ponía mejor según ellos pero yo me siento muy bien.

Subimos a la recamara y ella no dejaba de abrazarme y no quería dejarme ir, la tome de la cintura y me acerque a su rostro mire esos ojos hermosos que .e cautivan todos los días y me hacen quedarme para siempre en ese instante sin más, probé nuevamente sus labios recordando el sabor dulce que tienen y lo tanto que me gusta probarlos, baje mi mano a sus pechos para poder escuchar un pequeño suspiro.

-extrañaba esto, sabes? -me decía Danny mientras ella recorría su mano en mi tórax.

La acerque muchísimo a mi y empecé a quitarle el sostén bajo su camisa blanca, recorrí su cuello a base de besos y lamidas, solo se escuchaban esos pequeños gemidos de mi linda y hermosa Danny, le quite la camisa y el brasier para ver qué se estaba exitando a cada paso que dábamos juntos en esta tarde/noche la luz se iba poco a poco de la recamara y ella brillaba demaciado en este este momento que habíamos perdido durante mucho tiempo, recuerdo cuando antes de que viviéramos con nuestros padres a cada rato nos escondíamos para hacer el amor, recuerdo los momentos doloroso de Danny así como ella recuerda los míos, siempre la ame más que a una hermana, ahora que la tengo para mí solo no puedo resistirme a querer rasgarle la ropa a querer meter estar dentro de ella todo el tiempo, con la llegada de Natsumi cambiamos mucho ya que no siempre teníamos intimidad, era rara la veces ya que Natsumi siempre estaba con nosotros pero ahora la tengo para mí sola.

-jorge...por favor... -dijo Danny.

-si dime qué necesitas. -mientras bajaba a sus pechos a lamer y besarlos, mientras escuchaba sus gemidos en el aire y el lo vacío del departamento.

-hazme recordar todo lo que hacíamos en casa de mis padres a escondidas. -dijo mirándome fijamente.

La tome de la cintura y baje a su shorts y se lo quite con todo y bragas, para notar lo exitada que estaba pase mi mano en su intimidad que tanto he profanado, empecé a lamer ese lugar y recordar lo adicto que era esto, escuchaba sus gemidos cada vez más fuertes en la recamara, ella se vino y solo escuché un gemido ahogado ya que se tapo la boca, ella me tiró sobre la cama y me quito el pantalón que traía para empezar a acariciar sobre mi boxer mi miembro ya estaba tan duro que me los quito al momento y al utilizar su lengua para jugar sobre mi glande empecé a gemir sobre mi rico que se sentía, había olvidado está sensación también, lo metió a su boca y yo en modo bestia tome su cabeza y le hundi mi miembro haciéndola toser.

-perdon Danny. -dije

-no..*cof*.. no te preocupes..*cof* -dijo ella.

Iba a tomar un condón de la mesita de noche que tenemos pero ella me detuvo.

-quiero sentirte como las primera vez....hermanito. -dijo Danny.

Al escuchar eso algo en mi se encendió más como una hoguera fuera de control estaba ella boca abajo abrí sus piernas para notarla mejor, acerque mi miembro a ella y sentía como ella quería igual que la penetrara la sentía cada vez más hasta que empecé a entrar en ella poco a poco, llegué al fondo de ella, yo gemía mientras ella tomaba las sábanas de la cama para agarrarlas con mucha fuerza, empecé a moverme a embestirla y a besarla como esa primera vez que la tenía enfrente mío, escuchaba los gemidos descontrolados de Danny, seguía y seguía hasta que ella se vino, ella pidió un momento pero no la deje, tome una de sus piernas y la subí a mi hombro y seguí embistiendo hasta que ella solo se concentraba en el placer, ella me pidió ahora que estuviera abajo, ella se subió sin complicación y empezó a subir y bajar poniendo sus manos en mi pecho, gemía y ella más y cada vez más fuerte, ella estaba apunto de venirse sentía como me apretaba el miembro, no me quería dejar ir.

-danny...Danny... Me voy a venir. -dije intentando salir de Danny.

-nooo...dámelo dentro de mi como aquellas tantas veces...dame esa semilla tuya para volver a recordar. -dijo y empezó a moverse más rápido.

Los dos nos venimos en un gemido conjunto, tenía tanto dentro de ella que se salía un poco, Danny estaba muy cansada y agotada me senté a un lado de ella, le puse la sábana, me fui a bañar y ella descansaba casi durmió al instante, al salir de la ducha ella estaba sentada en la cama, se levantó y me dió un beso para entrar a darse un baño también.

Al acostarme en la cama sentir como un dolor ardía dentro de mi pecho, habrá Sido mucho esfuerzo de mi parte, acabo de salir del hospital. -dije y solo me quedé pensando en la cama viendo hacia la ventana.

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-ya estamos aquí colega. -dijo un doctor.

-asi es ya mañana tendremos día libre, quieres hacer algo con las familias. -pregunto.

-no se la verdad, pero que te parece una comida en algún restaurante. -respondio.

-si porque no, al fin y al cabo solo hay un cadáver aquí. -dijo señalando un camilla.

-si eso sí no hay trabajo pero terminando tenemos que limpiar este lugar, la jefa nos regaño la última vez porque a alguien se le olvidó limpiar.

-cuantas veces tendré que disculparme por eso mi esposa no podía ir por mi hijo a la escuela y solo faltaba media hora para pasar por el.

-lo se lo sé, tranquilo amigo. -dijo en tono burlón.

-bueno vamos a empezar. -camino a la camilla.

Nombre: Estefania Avendaño Ruiz
Edad: 31 años
Motivo de muerte: suicidio
Donante de órganos: si

Una nota más abajo decía
"Fue una doctora muy respetada en este hospital tratarla con mucho respeto"

Firma el doctor Julián Avendaño Ortiz.

-esta es hija del respetado doctor Avendaño, en serio se suicidó? -pregunto el doctor extrañado.

Al levantar la sábana de su rostro vío que si era esa doctora que tanto querían en este hospital.

Empezaron la revisión de su cuerpo, para ubicar el daño que se había hecho en entraron una puncion de aguja arriba de su glúteo izquierdo y ellos creyeron que en verdad se había quitado la vida.

Al estar limpiando el cuerpo uno de los doctores sentía algo caliente.

-yo el agua está caliente? -pregunto.

-no, siempre a estado fría. -respondio.

Se quitó el guante para sentir el tórax de Estefania.

-esta tibia, tiene calor. -dijo exaltado.

-como es posible lleva 8 hr aquí abajo y los ventiladores están siempre a todo lo que dan. -se quito el guante y la toco del brazo y sintiendo cierta tibidez. -al tocarla se estremeció y fue directo al teléfono que tienen allí.

-doctor Avendaño, su hija está viva. -dijo cuando Estefania abrió los ojos....