𝟎𝟕| 𝙻𝚊𝚋𝚎𝚛𝚒𝚗𝚝𝚘

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—Cada vez somos menos—Murmuró Miku
—Tengo miedo, no sé si pueda con todas estas muertes en mi cabeza—Añadió el chico de overol
—¡Hey! Todo va estar bien, terminaremos con todo esto—Añadió Chishiya

El chico de Overol temblaba, jamás había visto tantas muertes en menos de un día completo, tenía la mirada triste, los ojos llorosos y rojos

—Has matado a todas estas personas inocentes—Soltó Hiroto cruzando palabras con Miku, Azumi lo tenía tomado del brazo con fuerza
—Quítate esa idea de la cabeza, ella no sabe la respuesta—Chishiya se puso frente a Miku al mismo tiempo que fulminó con la mirada a Hiroto
—No necesito que me defiendas—Miku se puso frente a Chishiya

Desde que su padre las había abandonado había aprendido a cuidarse muy bien, Su madre solía trabajar toda el día, en la noche solo cenaba e iba directo a la cama y así eran todos los días, Miku se acostumbró a esa vida aunque admitía que gracias a madre jamás le había faltado nada, era alguien feliz hasta que despertó en este mundo

—No te hagas la ruda—Susurro burlón en el oído de Miku
—Deberias ser tu quien muera, sigo diciendo que eres el jota de corazones—Dijo Hiroto
—Date la vuelta y cierra esa boca—Miku ya estaba molesta

También estaba fastidiada, lo único que quería era que todo acabará, quería despertar y que todo esto fuera un horrible pesadilla. Hiroto tenía razón en una sola cosa. La gente inocente moría. A la siguiente ronda había muerto el chico de overol, se había sentido tan mal por los que habían muerto y no quería pensar en eso ni cargar con esas vidas aunque no era su culpa

Chishiya y Miku casi quedaron de boca abierta cuando vieron su cuerpo lleno de sangre dentro de la habitación. Todos los jugadores faltantes miraron a Chishiya y A Miku sospechosos

—Porque lo mataron ¿No era su amigo?—Pregunto Hiroto
—Tiene razón—
—Alguno de ellos debe ser el Jota de corazones—
—Debemos matarlos—

Los participantes que aún faltaban murmuraban cosas, Hiroto aprovechaba ese momento para calentarles más la cabeza, Estaba seguro que Miku podría ser la salvación diciendo quién es el Jota de corazones pero como no lo decía sospechaba que ella lo era

—Si debemos matarlos—Grito Hiroto
—Ella no puede ser el jota de corazones—Azumi miro a los ojos a su amigo Hiroto—Estuvo con nosotros desde hace dos días. Es imposible que sea ella. Reacciona Hiroto—Añadió
—¡Cállate Azumi!. No sabes nada—

Hiroto empujó a Azumi y ella cayó al suelo, todos miraban, cada vez estaban más asustados porque cada vez eran menos y pronto todos se volverían locos y enemigos de todos. Tiempo restante 2 minutos. Nuevamente todos entraron a la habitación, y como ya era costumbre sonaron golpes fuertes, Todos salieron menos Azumi, Hiroto le había mentido con su símbolo, había estado en contra con ellos desde el principio y eso a Hiroto le estaba fastidiando

—¿Dónde está Azumi?—Pregunto Miku
—No lo sé, seguro Hiroto no tuvo piedad—Añadió Chishiya

Miku apretó los puños, Azumi era una buena chica con ella desde el principio, aunque le haya golpeado la cabeza el otro día, sabía que no había nada que hacer pronto Hiroto perdería la cabeza y seguro traicionara a sus amigos con tal de encontrar al con Jota de corazones. Y así fue los amigos de Hiroto cada vez más iban muriendo

—Aqui estas—Dijo Miku cuando vio a Chishiya sentado comiendo galletas
—¿No puedes vivir sin mi?—
—Tu eres el que no puede vivir sin mi—Dijo en tono burlona
—Tienes razón—Añadió Chishiya, las mejillas de Miku se pusieron rojas, él chico de pelo blanco cenizo sonrió en cuanto lo noto
—Me siento mal por el—Murmuro Miku, se refería al chico de overol
—Fue su decisión—
—¡No tienes corazón!—
—Lo tengo, pero fue su decisión, el pobre estaba muy asustado, era débil para estás cosas—

𝗟𝗼𝘃𝗲 𝗜𝗻 𝗚𝗮𝗺𝗲; Shuntaro Chishiya Donde viven las historias. Descúbrelo ahora